Un anexo en el proyecto con ideas para bajar el déficit público
El proyecto tiene un primer texto basado en las metas del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) y un anexo que sugiere al Congreso de la Nación discutir la modificación o eliminación de regímenes especiales que representan un 2,4% del Producto Bruto Interno (PBI), para reducir en mayor medida el déficit fiscal -e incluso lograr el superávit- y combatir la inflación.
En esa “separata” figuran algunas ideas tendientes a mejorar el resultado fiscal del año próximo por las dos vías posibles como para lograrlo: o recaudando más o gastando menos. Una cuestión matemática que es fácil de explicar pero difícil de lograr en términos políticos, en el contexto de un año electoral en el que la palabra ajuste no forma parte del vocabulario de los candidatos
También se señalan algunas ideas tendientes a recuperar recursos fiscales que no se recaudan, como por ejemplo la posibilidad de que el impuesto a las ganancias aplique a los sueldos de los jueces o la restricción de beneficios impositivos que rigen en la provincia de Tierra del Fuego.
Según se explica en ese anexo “dichas reducciones impositivas o gastos tributarios surgen cuando, por aplicación de diferentes regímenes, se reducen las obligaciones impositivas que benefician a un determinado sector, lo que disminuye la recaudación total”.
El objetivo de este apartado es aplicar esos recursos no recaudados a mejorar el resultado fiscal del año próximo por encima de lo proyectado, es decir, buscan sobrecumplir el 1,9% del PBI. Una propuesta oficial que para ser realidad debe pasar primero el filtro del Congreso Nacional.
El presupuesto 2023 se ubica en el centro del debate parlamentario
