Teatro por la libertad

La historia sienta precedentes y la memoria activa nos permite tomar conciencia ciudadana acerca de qué sociedad queremos construir para todos. Con esa premisa, comenzó ayer el Ciclo Nacional de Teatro por la Democracia, una fuerte apuesta a respetar y valorar la libertad desde la empatía que genera el arte. 

Conmemorando uno de los episodios más tristes de la historia argentina conocido como La Noche de los Lápices -nombre con que se conoce una serie de secuestros, desaparición y asesinatos de estudiantes de secundaria que habían participado el año anterior en movilizaciones que reclamaban el Boleto Estudiantil Secundario-  el plan teatral despliega una serie de presentaciones y puestas en escena que toman valor con las efemérides que reivindican, con la excusa de debatir y replantearnos la sociedad que hoy construimos.

La jornada contó con la voz de víctimas de secuestro en la última dictadura.

El plan consiste en visibilizar efemérides nacionales con jornadas de teatro, promoviendo el sentido de pertenencia ciudadana y ocupando el espacio público con actividades escénicas, juegos y talleres teatrales para la transformación social y la construcción de la memoria colectiva.

“Celebramos el teatro porque estamos en democracia. La idea es invitar a la comunidad a que pueda participar y hacer uso de sus derechos como ciudadanos, de que sepa que el acceso a la cultura es siempre libre y que juntos podamos generar momentos de reflexión y convite”, resumió Lucía Veliz, jurado nacional del Instituto Nacional del Teatro (INT) en representación de la Delegación Misiones a cargo de Claudia Luque, en diálogo con El Territorio.  

De esta manera, el día de la Democracia, de la Diversidad, de la Reivindicación de los Derechos de la Mujer, entre otras varias e importantes fechas que conmemoran la lucha por la libertad, la igualdad y la democracia se presentarán como la excusa perfecta para el debate comunitario de la mano del teatro, una herramienta empática y plural. “Lo que pondera en estos encuentros es el mundo posible que podemos construir entre nosotros”, explicó la referente del INT destacando que la grilla de obras será diversa y variada, con diferentes temáticas y para todas las edades.

‘Cuadro de asfixia’ se llevó el aplauso y los elogios del público.

Ayer, la apertura se dio en el  Galpón del Centro Cultural Comunitario de la Murga de la Estación (Pedro Méndez 2260). Aprovechando la efeméride, el encuentro contó con el testimonio de dos misioneras que vivieron en carne propia el secuestro y la tortura durante la última dictadura militar.

Además del conversatorio se presentó la obra ‘Cuadro de Asfixia’, una puesta en escena que tiene como eje la memoria como reservorio de identidad y el lenguaje como constructor de sentido y de realidad; una pieza que contó con positiva repercusión y buena participación del público.

El ciclo seguirá hasta diciembre visitando escuelas, clubes, asociaciones, barrios y teatros de diferentes puntos de la provincia.