A juicio los acusados de matar a prestamista colombiano

Los dos detenidos por el crimen de un prestamista colombiano en Posadas serán juzgados por un tribunal luego de que las autoridades del Juzgado de Instrucción Siete clausuraran la instrucción para elevar la causa a juicio, confirmaron fuentes ligadas al proceso a El Territorio.

El asesinato de Gustavo Gallego Rojas fue cometido a fines de febrero del año pasado en el barrio Yacyretá, chacra 103 de la capital. Por el caso están detenidos con prisión preventiva Brayan Damián Casso Acosta (26)  y Juan Ramón Ramírez (27), quienes deberán responder por los delitos homicidio agravado por criminis causa y robo en concurso real, que prevé una pena de prisión perpetua.

Según detallaron las fuentes consultadas, el requerimiento de elevación a juicio por parte de la fiscalía ocurrió en mayo, mientras que la clausura del expediente por parte del juez Miguel Mattos se firmó la semana pasada, el 27 de julio. No hubo oposición por parte de las defensas de Casso Acosta y Ramírez.

Lo que consideran los investigadores judiciales es que los presuntos asesinos llegaron desde Corrientes para robarle a Gallego Rojas 70.000 pesos y una motocicleta. En ese marco, asesinaron de 15 puñaladas en su departamento a la víctima.

El crimen de Gallego Rojas, prestamista y dedicado a la venta de muebles, fue reportado el 28 de febrero, poco después de la 0.30, cuando sus vecinos oyeron gritos provenientes de su departamento y, al acudir al lugar, lo encontraron sin vida en el lavadero.

 Allí se constató que el hombre había sufrido al menos quince heridas cortantes en diversas partes del cuerpo, aunque luego el examen de autopsia determinó que la lesión mortal estaba localizada en el tórax.

Los primeros testimonios indicaron haber visto a dos hombres saliendo de la escena con una caja fuerte portátil (con $70.000 adentro) en mano y huyendo en la Honda Titán de Gallego Rojas.

 Luego aparecieron otros testigos que apuntaron sus sospechas hacia Casso Acosta, que tiempo antes había trabajado como “cobrador” de la víctima y de esa relación surgió un conflicto en el que el implicado había amenazado de muerte a su compatriota.

 Al respecto, Casso Acosta, también colombiano, residía en Corrientes, pero el sábado previo al hecho, en horas de la madrugada había llegado a Posadas, donde tenía una pareja embarazada y otros familiares. Se habría alojado en la vivienda de un conocido suyo ubicada a sólo 200 metros de la casa de Gallego Rojas.

 En ese lugar se alojó con Ramírez, según reconstruyó la investigación.

 Siguiendo la pista de la moto llegaron hasta otro inmueble que fue allanado a comienzos de marzo, donde efectivamente encontraron la Honda Titán robada.

 El dueño de casa quedó desligado y ante las autoridades aseguró que aceptó guardar el rodado como favor ya que conocía a ambos muchachos, pero nunca supo del origen de la moto.

 Finalmente los efectivos de la Dirección de Homicidios de la Policía de Misiones pudieron detener al extranjero el 1 de marzo, luego de ubicarlo en la casa de su pareja embarazada. Al presunto cómplice, en tanto, lo atraparon en la capital correntina días después, el 4 de marzo.

 Ahora deberán responder en el banquillo de los acusados por el brutal crimen.