Pegó el salto en Tigre, cumplió el sueño y vivió el mundo Boca desde adentro: “Que gane el mejor”

El loquito corría en Apóstoles y chocaba todo lo que tenía a su lado. Ya en Tigre, su DT Caruso Lombardi le decía que frene, porque se iba a estampar contra el paredón. Pero, tozudo, siguió igual –o casi-, perseveró, llegó al fútbol grande con el Matador –eso que tanto anheló- y sus buenas actuaciones lo llevaron a Boca, club del cual gritó innumerables goles de niño.

Toda esa película se le pasó a Matías Giménez cuando fue abordado por El Territorio para analizar la final de la Copa de la Liga de primera división entre ambos equipos que se jugará este domingo. El corazón se le partió en dos en términos deportivos al hoy mediocampista de Dock Sud, quien se sinceró y avisó: “Son sentimientos encontrados”.

De todas maneras, hizo la pausa y compartió su mirada sobre qué puede suceder desde las 16 en el estadio Mario Kempes de Córdoba.

“Tuve la fortuna de haber crecido en Tigre”, remarcó Giménez, quien calificó a la sopresa del torneo como “serio candidato a quedarse con el título”, porque “viene con ambición ganadora, ya lo demostró en la B Nacional. En primera no le costó adaptarse, rápidamente se hizo protagonista y hoy tiene la posibilidad de concretar su segundo título”.

Matías añadió que “tiene un técnico (NdeR: Diego Martínez) que le dio una identidad muy buena, Tigre propone en todas las canchas y va a ser respetado por Boca”. A los pocos minutos, cambió el aire, se perfiló y lanzó su definición sobre el Xeneize: “Sabemos lo que representa Boca, que tiene que ser siempre protagonista, es el equipo grande que va a tener la presión”, subrayó y luego miró la línea de cal para afuera, para precisar que “en el banco tiene a un técnico (Sebastián Battaglia) que es el máximo ganador de la historia y seguramente le transmitirá la energía y tranquilidad para que sus jugadores puedan conseguir ese objetivo deseado”.

A pesar que lo ve más equilibrado al Matador, recordó que “más allá que viene con altibajos, Boca es protagonista, llegó a la final y tiene la posibilidad de ser campeón. Esperemos sea un buen espectáculo y gane el mejor”.

Otra vez lo invadió esa extraña sensación y en ese lugar incómodo de estar entre la espada y la pared, sostuvo: “Quiero mucho a Tigre, quiero mucho a Boca, del cual soy hincha. Tigre me dio la posibilidad de jugar en el fútbol grande (del 2007 al 2009), me dio muchas cosas y Boca, fui un afortunado de haber jugado y estar rodeado de muchos ganadores” (temporada 2010).

Por ello, evitó ir con un pleno por uno de los dos y sentenció: “Esperemos que el espectáculo sea bueno y que los hinchas lo disfrutemos. Tigre llega un poco mejor, más allá de la jerarquía de los jugadores de Boca, está bien aceitado, tiene dos laterales que atacan, abastecen a los delanteros que están muy bien, Retegui y Colidio son protagonistas. En el medo Prediger juega muy bien, X Fernández da placer verlo jugar”.

En la otra vereda, más allá de alguna duda en la formación, avisó que “Oscar Romero tiene un gran pie y visión de juego. Benedetto viene en un gran nivel, hizo todo por volver y tiene ese objetivo de ganar”. Además “recupera a un jugador clave como Izquierdoz y goza de un gran arquero como Rossi”.

Por eso, en el pan y queso, “depende cómo se levanten el domingo, siempre va a estar la presión de ganar. Seba Battaglia transmitirá lo suyo y por el lado de Tigre, el club quiere seguir con los logros y por la senda del crecimiento”.