Santo Tomé homenajeó a su hijo dilecto, en el aniversario de su fallecimiento
A 32 años de la desaparición física del hijo dilecto de Santo Tomé, el teniente general Isidro Bonifacio Cáceres, autoridades y familiares rindieron un sentido homenaje en el Cementerio Santo Tomás Apóstol, lugar donde descansan sus restos.
Cáceres fue un maestro normal y militar argentino, que se desempeñó como jefe del Estado Mayor General del Ejército entre 1989 y 1990. Tuvo participación en la Guerra de Malvinas como oficial de operaciones de la Gobernación. Fue internado de urgencia por una aneurisma de aorta, y a la semana falleció. Era el 21 de marzo de 1990. Tras su deceso, Presidencia de la Nación declaró tres días de duelo nacional en su honor. Y fue reconocido de manera póstuma con el máximo grado militar del Ejército Argentino: teniente general.
En su acto homenaje realizado en la mañana de hoy estuvieron presentes Gladis López y Liliana Cáceres, esposa e hija del teniente general, respectivamente.
Como en cada recordatorio de su persona, se enaltecieron sus valores, por ser un ciudadano con un firme compromiso con el pueblo y la Patria. Hubo además, un momento musical a cargo de la Escuela de Música Municipal.
Por el cuerpo deliberativo estuvieron: su presidente Carlos Raúl Farizano, y los ediles Stella Maris Uguet, Carmen Braña, Blanca Gales, Esteban Rey Adaro, Santiago Saucedo, Carlos Antonio López y Juan Alberto Centeno.
