En la zona Centro la sequía empieza a preocupar a la Cooperativa Eléctrica Limitada de Oberá (Celo), que a través de sus operarios detectó en la madrugada de ayer un desperfecto en el acueducto que trae agua desde el arroyo Bonito y ahora sólo se están abasteciendo desde el arroyo Ramón. Por tal motivo empezaron a racionalizar el agua a los barrios. Ayer casi toda la ciudad tuvo problemas para tener el vital líquido en su domicilio.

En un comunicado, la Celo explicó: “El personal técnico se encuentra dedicado a la reparación. Se está abasteciendo la cisterna sólo con el arroyo Ramón”.

Para poder mantener agua en la cisterna y que no se termine rápidamente, decidieron cortar el suministro en varios barrios. “Se realizaron cortes de servicio en la mayoría de los sectores de distribución para mantener las reservas en planta. Se solicita a los usuarios racionalizar las reservas domiciliarias hasta tanto se normalice el servicio”, pidieron desde la cooperativa.

Casi llegada la noche el servicio seguía sin soluciones. “Se recomienda a los socios seguir cuidando las reservas domiciliarias. El acueducto averiado es de acero, está alojado a gran profundidad y en gran parte está encamisado con cemento, por lo que los trabajos de reparación requieren más tiempo”, señalaron.

Uso racional
Por su parte, en Santo Pipó, la cooperativa de agua solicitó a los usuarios el uso racional del líquido vital. Piden evitar el lavado de veredas, autos, carga de piscinas y piletas, ya que el exceso de consumo hace que se pierda presión y por tal motivo algunos barrios se ven afectados.

La situación se debe a la bajante en el arroyo Ñacanguazú por la falta de lluvias.

El mismo pedido se dio en Ruiz de Montoya. Si bien el arroyo Cuñá Pirú cuenta aún con caudal para abastecer a la comunidad, el uso racional es fundamental y si se agrava la situación evaluarán declarar la emergencia hídrica.