El grave trasfondo de las adicciones en jóvenes de Oberá

El caso de Jésica D. S., los antecedentes y denuncias previas, no hacen más que graficar el drama de las adicciones, un flagelo que crece sin control en Oberá.

En tal sentido, Alejandra Montero, titular del área de Niñez y Familia de la comuna, reconoció que “es impresionante la cantidad de gente que tiene problemas de adicción. Vemos muchos casos que cuestan solucionar porque los padres están descuidando mucho a sus hijos por el consumo”.

“El consumo de drogas es considerada una enfermedad mental y debe ser tratada así”, remarcó para explicitar que no alcanza con medidas punitivas para abordar el tema.

Sobre el caso puntual de la joven ahora detenida, la titular de Niñez y Familia opinó que “es una situación muy compleja porque es adicta y tenemos registro de que ya estuvo en tratamiento, pero recayó”.

Por su parte, varios vecinos se mostraron angustiados por el estado de abandono en que se hallaban sus hijos.  

“Los chicos no iban a la escuela, nunca fueron. La madre es drogadicta y alcohólica, por lo que los chicos se las arreglaban solitos. Ella consume de lunes a lunes, y si los chicos comían era porque iban a buscar comida del comedor municipal o los vecinos les dábamos algo”, subrayó una vecina.

Y agregó: “A veces, en plena luz del día, se podía ver cuando la madre se encerraba con un hombre en la casa y los chicos quedaban afuera. Es algo que venía pasando desde hacía tiempo. La chica ya estuvo en rehabilitación y casi le sacaron los chicos, pero después dejaron todo así, no la visitaron más y la cosa fue empeorando”. 

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