La convención de los puerros

domingo 24 de octubre de 2021 | 6:00hs.
La convención de los puerros
La convención de los puerros

La Convención de los Puerros se llevó a cabo en el Huerto de Jacobo inmediatamente después de verificados los comicios generales que llevaron al Zapallito de Tronco y su Frente Verde al gobierno de la parcela y en razón de que los integrantes de esa comunidad habían resultado perjudicados por ciertas irregularidades ocurridas en torno de la votación. Una vez constatados los hechos y los agravios sufridos, se autoconvocaron en asamblea permanente y allí decidieron lo que decidieron.

Sucedió que los miembros de esa especie, todos pertenecientes al género de los Amaryllidaceae, habían sido excluidos de los padrones definitivos del sembradío y por consiguiente no habían podido emitir sus votos el día de la elección. El hecho de haber quedado afuera de la decisión democrática más importante en toda la historia de la parcela, sublevó a esta tranquila población instada por la marginalidad acaecida y la discriminación sufrida. Más aún cuando las Cebollas y los Ajos (parientes cercanos) no solo figuraban en el listado sino que la más popular de las primas se había erigido en candidata del Frente Amarillo malogrado en el último tramo de la campaña.

Si bien el Jefe de la familia (don Ajoporro) había advertido de la exclusión de sus congéneres del padrón electoral y había hecho una presentación formal de queja ante el Superior Tribunal Electoral de la plantación, la situación no pudo ser zanjada antes de los comicios y mientras la población completa de las otras especies concurría alegremente a votar el día de la elección, los Puerros debieron quedarse en casa sufriendo la desazón de la forzada abstinencia participativa y la mirada compasiva y a veces burlona de los demás habitantes del sembradío que retornaban a sus canteros exhibiendo triunfales las constancias de emisión del voto.

Así fue que, cuando aún no se habían extinguido los festejos de los fanáticos del Zapallito de Tronco, los Puerros se autoconvocaron en asamblea constituyente a los efectos de expedirse respecto de: 1) La no participación eleccionaria de toda la comunidad, 2) La formulación de un justo pedido de reparación a las autoridades y 3) La integración de una Junta permanente para designar candidatos del sector en vistas a futuros comicios.

El quinto día posterior a la elección (viernes en el calendario decenal de la siembra) los dignos puerros, orgullosos referentes de la más alta tradición galesa y puntales simbólicos en los emblemas nacionales de varias regiones, comenzaron a reunirse en el salón de usos múltiples del sector de canteros destinados a las comunidades Allium Porrum. Allí se dieron cita los Gruesos de Rouen, los Largo de Meziers y los Autóctonos. Entre los primeros se anotaron los Platina, los Arcadia, los Electra, los Malabare, los Dactilo y los del apellido extraño: los Musselburgh, por los largos vinieron los de Bulgaria, los Large American, los Flag, los Alaska, los Artaban, los Romil, los Elina, los Paína y los Helvetia y los Silvestres “Ajos Porros” (excepcional variante no extranjera de la comunidad) se inscribieron por los terceros.

Las familias que no pertenecían a la categoría telúrica se sabían descendientes de destacados inmigrantes asiáticos y europeos arribados al Huerto de Jacobo desde tiempos inmemoriales y ya sabían de otras exclusiones y otros olvidos a pesar de haber sido en tiempos remotos los mimados de Aristóteles y un poco más acá del emperador Nerón, en ambos casos por el extraordinario beneficio que aportaban a las gargantas de los cantores. (Al filósofo se le ocurrió relacionarlos con la fuerza interpretativa, expresiva y pasional necesaria para cantar y el incendiario de Roma les atribuía el don de ser los artífices de la belleza de su canto).

La reunión fue presidida por Ajoporro quien, como gesto de bienvenida y a modo de souvenir repartió entre los asistentes un pequeño broche de la imagen del emblema nacional de Gales con el puerro ocupando un destacado lugar. El discurso de bienvenida fue breve y a su término se procedió a elegir a las autoridades de la Convención, resultando éstas el presidente ya instituido, un secretario de actas y un convencional moderador quien procedió a leer el orden del día que fuera aprobado por unanimidad. A continuación y sin más trámite se abrió el debate. Treinta y cinco puerros se anotaron para hablar, lo que hizo que el presidente limitara el uso de la palabra en tan solo dos minutos de alocución. Así, gruesos, largos y nativos dieron rienda suelta a su frustración exigiendo reparación inmediata.

Luego de las exposiciones de rigor se pasó a votar las propuestas de acción que fueron tres: 1.-Realizar un piquete ante el Tribunal Electoral para apurar una definición respecto del motivo de la exclusión de los Puerros. 2.- Practicar una sentada en el lugar y entregar a sus señorías el escrito de impugnación de las elecciones y el pedido de nueva fecha para sufragar con padrones depurados. 3.- Realizar escraches en las residencias de los miembros del Tribunal por considerarlos indignos e ineptos para la función encomendada.

Dada la paridad que arrojó la votación entre las tres alternativas propuestas y primando la prudencia de don Ajoporro en la conducción de la convención, se resolvió intentar una cuarta propuesta que contemplara las tres anteriores, haciendo salvedad que los escraches se realizarían de no dar el Tribunal una respuesta adecuada a las presentaciones a efectuarse.

Así por unanimidad se votó la entrega de la impugnación de los Puerros del acto eleccionario, el pedido de fijación de nueva fecha de elecciones y de no ser viable lo peticionado (por cuestiones legales) se exigiría una reparación consistente en la concesión de siete unidades completas de canteros con sus respectivos senderos para el cultivo de la especie, más una tonelada de estiércol compostado cien por ciento orgánico.

Superados los puntos 1 y 2 del orden del día, lo próximo fue constituir una Junta Permanente para designar candidatos con miras a elecciones venideras. En la consideración de este punto la situación se tornó compleja porque ningún sector quería quedar afuera de la decisión; los puerros nativos estaban en gran desventaja numérica y los largos eran más numerosos que los gruesos. La desproporción en el número puso a prueba el talante y la paciencia de Ajoporro para encontrar una solución justa que diera satisfacción a todos por igual. Pidió un cuarto intermedio para retirarse a meditar y cuando retomó el micrófono y el control de la asamblea, dijo:

“Propongo a esta digna asamblea que, en razón de la desproporción numérica insuperable para resolver la representatividad igualitaria de las tres corrientes de opinión por vía de la votación de listas de integración de una Junta Permanente, y considerando que todos los miembros de esta gran familia (cualesquiera sean los orígenes de procedencia) tienen el derecho de representar a los demás por la obtención de la simple mayoría de votos y que todos estamos obligados a aceptar la representación de los elegidos, en aras de lograr la igualdad de posibilidades de acceso a los lugares en las listas de los frentes electorales, procedamos de la siguiente manera y en ese orden:

a) Por ser la minoría absoluta en esta comunidad, el primer representante a ocupar un lugar titular en próximos frentes electorales será del sector nativo, debiendo contar con un suplente que procederá del sector de los gruesos y un asesor general que pertenecerá al grupo de los largos.

b) Para el siguiente evento eleccionario arrojaremos la moneda entre los gruesos y los largos para determinar la titularidad de la representación, la suplencia será para el sector perdedor de la justa de la moneda y la asesoría para los nativos.

c) En una tercera instancia democrática la titularidad será para quien fuera suplente en el ejercicio anterior, la suplencia para los nativos y la asesoría para el grupo que ejerciera la titularidad en la pasada elección. En vistas al segundo bloque de eventos eleccionarios a llevarse a cabo en el sembradío la operatoria de selección de candidatos será la misma.”

Un cerrado y prolongado aplauso coronó la propuesta del presidente honorario de la Convención, quien fuera vitoreado al término de su exposición. De este modo, sin compulsas que arrojaran resultados controvertidos con las consiguientes heridas en el epitelio social de la comunidad, quedó resuelto el tercer y último punto de la convocatoria.

Con tan acertada, meditada y justa ocurrencia, el jefe de la familia de los Puerros se aseguró su lugar en algún Frente Político a armarse a futuro y resolvió la participación política de los Puerros en las lides democráticas venideras del Huerto de Jacobo.

Norma Nielsen

Nielsen es cuentista, poetisa y compositora de música. Tiene varias publicaciones y participó en antologías.

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