En simultáneo empezó ayer en todo el país la vacunación contra el Covid-19 a los chicos de 3 a 11 años, con la vacuna Sinopharm. Para ello se habilitaron 46 vacunatorios en toda la provincia y en Posadas son nueve los espacios disponibles para recibir a los más pequeños.

Los padres se mostraron aliviados de que finalmente les llegara el turno a sus niños e instaron a los demás progenitores a que inmunizaran a sus hijos. El Instituto de Medicina Física y Rehabilitación (Imefir) fue de los más concurridos en la ciudad capital, mientras que en la Casa de la Cultura y del Bicentenario de Itaembé Miní durante la mañana se habían aplicado ya 200 dosis; por último, el menos frecuentado fue el vacunatorio del hospital de Itaembé Guazú.

En los tres vacunatorios que relevó El Territorio los turnos fueron rápidos, no hubo tiempo de espera prolongado. No obstante, según contaron algunos padres a este medio, en el Caps 4 hubo mucha afluencia de padres y chicos, por lo que algunos esperaron hasta media hora para poder vacunarse.

“La verdad es que estábamos muy ansiosos. Cuando vimos la noticia de que los iban a vacunar no lo podíamos creer. Ojalá los padres vacunen a sus hijos, porque salvan vidas”, sostuvieron Rosana Ayala y Adrián Cantero, padres de Joaquín (9), que tiene una cardiopatía congénita.

Los progenitores pidieron permiso en sus trabajos y retiraron a sus niños de las escuelas para no perder la posibilidad de inocularlos en este día histórico en la lucha contra el Covid-19. Se observaron caras temerosas que ante el abrazo de sus madres se tranquilizaban, otros que se mostraron valientes y animaban a sus hermanos más pequeños ,pero también hubo lágrimas.

Para Sabrina Bogado, mamá de Dulce (7) y Giovanni (4), la tranquilidad pasa porque sus pequeños estarán protegidos en el marco de las clases presenciales, que volvieron en su totalidad el pasado 26 de septiembre. La misma calma la compartió Nicolás Pasquet, papá de Marlon (7), que sostuvo que estaba a la espera de esta noticia.

Por su parte, fue María José (10) la que le confió a su madre su deseo de ser vacunada contra el Sars-Cov-2, acudió al Imefir con una sonrisa en su rostro y confió que el pinchazo no le dolió nada.

“Estábamos esperando hace tiempo este momento. Ella va a salita de 4 y hablé con la maestra para sacarle del jardín porque no quería perder el turno. Ahora voy a estar más tranquila”, sostuvo Ester Fernández, mamá de Génesis (4).

Cirilo Lemes, en tanto, llevó a sus dos niños, Guillermo (10) y Luciano (7), hasta la Casa del Bicentenario de Itaembé Miní. El mayor fue el más valiente, mientras que Luciano opuso más resistencia, pero luego de la vacuna se rió de la anécdota y celebró que no sintió dolor. 

En ese marco, Luis Coent, subjefe de Inmunización del Ministerio de Salud Pública, festejó la iniciación de inoculación a menores en los centros de vacunación de la provincia. Además indicó que la población misionera tiene un alto porcentaje de vacunados.

“Es una gran noticia el haber empezado con la vacunación a los chicos entre las 3 y 11 años. De a poco vamos a ir expandiendo los turnos de vacunación desde la aplicación”, manifestó Coent.

Por otra parte, el gobernador Oscar Herrera Ahuad se refirió ayer al inicio de la aplicación de las vacunas: “Si se quieren cuidar ellos mismos, a los abuelos, a los tíos, tenemos que vacunar a los niños”.

Luego reiteró que la vacunación es fundamental “para que el niño vaya a la escuela y para la protección del docente”.

Además consideró: “Si dejamos una franja sin vacunar estaríamos expuestos a que si hay un descenso en la inmunidad en cualquiera de las franjas, podamos volver a tener circulación viral”. 

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