Internet fue el mayor reclamo de los porteños
Los problemas de conectividad con internet, los servicios bancarios y las dificultades con los envíos de productos comprados en la web fueron los reclamos que más hicieron los porteños en las oficinas de defensa del consumidor desde que empezó la pandemia en marzo del año pasado. Las empresas que brindan servicios de telecomunicaciones fueron las más denunciadas de 2020 y lo que va del 2021 y dentro de ese universo el servicio de internet fue el que tuvo la mayor parte de los reclamos.
“Las comunicaciones y el entretenimiento adquirieron una importancia central para los consumidores durante la etapa de estar aislados en las casas”, explicó la directora general de Defensa del Consumidor de Buenos Aires, Vilma Bouza.
El segundo grupo que acaparó los reclamos de los porteños fueron los bancos, con pedidos de devolución de cobros indebidos en los resúmenes de las tarjetas de crédito. Y en tercer lugar, los comercios de venta de electrodomésticos por demoras en los envíos, fallas en el funcionamiento de los equipos y discusiones en torno a las garantías.
La figura de la mediación que ayuda a que las partes encuentren de manera consensuada la solución de un conflicto es un camino cada vez más usado en todo el país para dirimir problemas sin tener que llegar a una instancia judicial. En Argentina se distingue la mediación obligatoria, que es impuesta por la ley para diversos procesos, de la voluntaria. También existe la mediación facultativa por la cual las partes se ponen de acuerdo para seleccionar al mediador y lo presentan como solicitud al juez. Debajo de ese paraguas de legislación general, cada jurisdicción adopta las fórmulas de mediación para su territorio.
Los principios que caracterizan la mediación son: confidencialidad, voluntariedad, comunicación entre las partes, imparcialidad del mediador interviniente y su neutralidad frente a la materia traída a cuestión. La mediación moderna se ha configurado como una nueva forma de acceso a la justicia.
La mediación descomprime el trabajo de los juzgados, que sólo intervendrán en caso de que no se llegue a un acuerdo. Además, en muchos casos supone un ahorro de tiempo y costos en comparación a los procesos judiciales.
Según el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la Nación, los conflictos que se intentan solucionar a través del mecanismo de mediación comunitaria son diversos y abarcan todo tipo de malentendidos, desacuerdos, peleas, enfrentamientos o choques de intereses entre las personas que integran la sociedad. Según las estadísticas nacionales, el 75% de las mediaciones son relativas a conflictos familiares, como disputas por el cuidado personal y régimen de comunicación de los hijos menores de edad, divorcio y cese de la convivencia, deberes de responsabilidad parental y problemas económicos entre los miembros de la familia.
Luego hay un 18% de las mediaciones enfocadas a resolver temas de vivienda, que incluyen conflictos vecinales, problemas de alquiler y daños contra la propiedad. Le siguen un 5% de las mediaciones que están centradas en deudas de dinero, conflictos de consumidores y usuarios, entre otros. Finalmente hay un 2% restante que se divide en mediaciones sobre temas de salud, trabajo y documentación.
En tanto, no pueden ser resueltos con mediación aquellos casos en que existe un juicio en trámite, salvo que ambas partes lo soliciten y se comprometan a homologarlo en la Justicia, causas penales, indemnizaciones, entre otros.
En cifras
75%
De las mediaciones a nivel nacional son relativas a conflictos familiares, donde figuran disputas por el cuidado de hijos menores.
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