Chicos que egresan de hogares reciben apoyo económico

Un total de 30 adolescentes están inscriptos dentro del Programa de Acompañamiento para el Egreso de Jóvenes y Adolescentes sin Cuidados Parentales (PAE); de esos, nueve empezaron a recibir un apoyo económico para continuar con sus proyectos de vida.

Son chicos que por alcanzar la mayoría de edad egresaron de hogares sin ser adoptados. Se trata de los primeros que son parte de esta iniciativa de Nación a la que se sumó Misiones.

Sin embargo, la primera etapa del programa comienza cuando el chico tiene 14 años y se trabaja en que empiece a adquirir autonomía dentro del propio hogar.

Para ello el programa prevé que el joven tenga un referente adulto por fuera que le da un padrinazgo una vez que egrese del hogar.

El referente afectivo recibe capacitación por parte de la Secretaría Nacional de la Niñez, Adolescencia y la Familia (Senaf) mientras que junto a éste el adolescente empieza construir un proyecto de vida para una vez que salga del hogar y así poder insertarse en la sociedad, alquilar, estudiar y buscar trabajo.

A partir de que egresan a los 18 años empiezan a percibir mensualmente una asignación que corresponde al 80% de un salario mínimo vital y móvil, poco más de 22 mil pesos. Los jóvenes mayores de 21 años que estudian pueden continuar en el programa hasta los 25 años.

“Trabajamos en el marco de la ley 27.364 que en noviembre de 2018 creó el PAE, que tiene como objetivo garantizar la inclusión de los jóvenes, acompañarlos en el tránsito a la vida adulta promoviendo su autonomía personal y social. Esto se hace a través de un referente afectivo que puede ser alguien que el joven elija o se propone y después pasa por la etapa de conocer al joven. Estos chicos que egresan del hogar cobran una asignación económica con una tarjeta donde se les deposita un dinero todos los meses para poder ayudarlos en su autonomía y planificación en la vida adulta”, contó a El Territorio Tamara Acosta, licenciada en Trabajo Social y responsable del programa que en la provincia está bajo la órbita del Ministerio de Desarrollo Social.

El ingreso al PAE es voluntario, el chico decide si ingresa y cuándo sale.

“Los que pueden ingresar son los jóvenes y adolescentes sin cuidados parentales que estén en dispositivos de cuidado formal (hogares) alcanzados por una medida excepcional. Es decir, chicos que estén separados de su familia de origen, nuclear o extensa, y que se hayan agotado todas las medidas de convivencia, son chicos que están solos de relaciones familiares y al no tener a nadie el programa apunta a que puedan tener un referente”, explicó Acosta.

“Con el dinero que perciben la idea es que les sirva para planificar: estudiar, buscar trabajo”, agregó.

“Las experiencias que tuvimos hasta ahora fueron todas gratas en el sentido de que los chicos que egresan no se imaginan qué hacer afuera de todo lo que armaron en ese proyecto con su referente. Algunos piensan en seguir estudiando, otros piden ayuda para buscar trabajo, otros se compran una zapatilla con el dinero del PAE y ahí aparece la figura del referente para guiarlos”, destacó.

Hasta el momento hay 26 adultos inscriptos como referentes de estos jóvenes y otros en proceso de inscripción.

“Cualquier persona puede ser referente pero tiene que cumplir ciertos requisitos como presentar un certificado de antecedentes penales, ser mayor de 21 años, tener estudios secundarios completos y aprobar una capacitación. Ser un referente implica ser un sostén, un apoyo, es la persona que te va a ayudar a construir tu proyecto de autonomía personal basados en el deseo de cada joven. Si hay personas de la comunidad que quieren ser referentes se deben comunicar y se inscriben. Nuestro correo es paemisiones@gmail.com”, finalizó Acosta.