Según el Inti, la industria está en mejor nivel que en prepandemia

Con la presencia del presidente del Instituto Nacional de Tecnología Industrial (Inti) Rubén Geneyro y gerente zonal del Banco Credicoop, Maximiliano López, se dieron a conocer ayer las líneas de créditos por 700 millones de pesos destinados a la modernización de las industrias de la provincia, tanto para pequeñas y medianas empresas como aquellas que operan como cooperativas.

La presentación se hizo en un hotel céntrico de Posadas con la presencia del ministro de Industria de la provincia de Misiones, Nicolás Trevisan, la subsecretaria de Economía del Conocimiento, María Apólito y los diputados, Flavia Morales y Lucas Romero Spinelli. En la ocasión presentaron las líneas de acción en el ámbito de la tecnología y la economía del conocimiento destinado a las pymes misioneras.

Apólito destacó la importancia de la industria del conocimiento y recordó que para el sector hay reducción de aportes patronales entre 70 a 80% y similar beneficio en ganancias. También destacó la importancia de la incorporación de tecnología en las pymes como los aserraderos de la provincia. Tras la presentación, El Territorio dialogó con Rubén Geneyro.

¿En qué consiste la línea de crédito que se ofrece?

Básicamente hoy presentamos una línea de financiamiento a través del Banco Credicoop y nos va a permitir que la empresa tenga alternativa para poder acceder a más tecnología. Es una línea muy accesible e interesante. Tendrá un período de gracias de 12 meses y nos permite darles más alternativas y que se completará mañana (por hoy en Eldorado) donde va estar el subsecretario de Industria y Pymes de Desarrollo Productivo. Nosotros decimos que la industria argentina está muy ávida de generar inversiones cuando los contextos son adecuados. Más allá de la pandemia, lo que hemos dicho es que el sector industrial en general  ha tenido un esfuerzo para ir consolidándose  en su crecimiento. Y, nosotros lo que apuntamos con esta línea junto al banco Credicoop, es dar una herramienta más en ese sentido.

¿Sería para un proceso de industrialización e incorporación de nuevas tecnologías?

Cuando planteamos el acceso o inversiones en nuevas tecnologías, siempre lo relacionamos mucho a la realidad de cada región. No todas las inversiones son lineales. Esta línea lo que tiene es que se puede adaptar muy fácilmente a la realidad de cada región. Son dos líneas inicialmente con un fondeo de 700 millones de pesos. Nuestro objetivo es que vaya rápidamente a las empresas, que tomen esta alternativa. Como el banco no tiene todas las especialidades para la biotecnología o para evaluar un proyecto de desarrollo, entonces el Inti le puede facilitar esa evaluación. Los fondos están destinados para las pequeñas como medianas empresas y las cooperativas.

A nivel nacional se habla, depende de quien lo diga, tanto de retroceso como avance en la industria del país. ¿Cómo lo ven desde el Inti?

Nosotros estamos viendo desde agosto del año pasado, un proceso de reactivación productiva. Hoy es un gobierno nacional que apuesta fuertemente a la industria nacional. Pensamos en la sustitución de las importaciones, en el desarrollo de proveedores en general y exportaciones. Sabemos que el contexto es complejo pero la industria argentina está en un nivel mucho más alto que en la prepandemia. Esto muestra esa capacidad de reacción enorme cuando hay política y contexto de apoyo.  Le doy un solo ejemplo: la Argentina -el año pasado- pudo cubrir 29 de los 30 insumos sustanciales para combatir el Covid-19 con producción nacional. En octubre o noviembre del año pasado, ya estábamos haciendo talleres de ofertas tecnológicas para exportarle a América Latina y esto muestra una gran capacidad de reacción de nuestro entramado productivo y una gran vinculación con el sistema científico tecnológico. Por eso, se pudo hacer barbijos, respiradores y se pudieron hacer un montón de elementos para combatir el coronavirus.

Siempre se dice que en toda crisis hay una oportunidad. ¿Los empresarios tienen oportunidades en el actual contexto?

Sí, porque tenemos un entramado productivo muy rico y también con gran capacidad de reconvertirse, de buscar nuevas alternativas  y en esto, vemos una gran entusiasmo de nuevas alternativas para invertir en tecnología, en procesos sustentables, en industria 4.0, en la transformación digital. La capacidad de readaptarse fue una demostración que en los ámbitos industriales y productivos fue donde menos contagios hubo; porque se adaptaron muy rápidamente a producir en un contexto de pandemia. Vimos también que se avanzaron en mejoras tecnológicas muy rápidas, de más eficiencia, en la gestión con teletrabajo en algunas empresas haciendo automatización. Esto de la transformación digital se está dando más rápido y, hay que darles alternativas a las empresas para que avancen en este sentido y lo vemos como una oportunidad. La Argentina tiene un gran entramado productivo en muchas líneas de producción; lo vemos desde la metalúrgica, al sector vitivinícola, al sector de alimentos orgánicos. Argentina tiene muchas alternativas y nuestros empresarios pymes tienen una gran capacidad de adaptación a los nuevos contextos.