Polémica por juguetes que fueron quemados

Miles de juguetes incautados en el marco de dos procedimientos realizados en 2017, en la localidad de Corpus, fueron incinerados el lunes en la ciudad de Puerto Rico, por decisión de las autoridades de la Administración Federal de Ingresos Públicos (Afip), lo que generó una gran polémica porque muchos consideraron que podían ser donados.

Una de ellas fue Silvia Moreno, fundadora del Hospital de Juguetes Misiones, que en diálogo con Radioactiva, expresó: “Podían haber tenido otro destino, estoy segura que se están ateniendo a leyes vigentes, pero si la ley está mal se puede modificar o tener en cuenta situaciones más empáticas, sobre todo con los niños”.

“Son muchísimos niños los que no pueden acceder a juguetes. Quemaron lo equivalente a más de medio año de trabajo”, expuso Moreno.

Y remarcó que “es un perjuicio, perjudica a la tierra, a la ecología, a los niños que no lo van a recibir y a los padres que no lo pueden comprar”.

En tanto, el Juzgado Federal de Oberá aclaró en un comunido que se dispuso la medida en virtud de la toxicidad de la mercadería y el peligro que representa a la salud de los niños y niñas, por lo que existe una prohibición legal de donarlos.

“En numerosas oportunidades se dispuso la donación o entrega de mercadería, herramientas o hasta vehículos que podrían tener utilidad pública. Es algo que se tiene en cuenta cuando no puede ser subastado el bien, pero en este caso no era posible dada la posible afectación de la salud pública y justamente de niños y niñas”, sostuvo el titular del Juzgado Federal de Oberá, Alejandro Gallandat.

La mercadería había sido incautada por personal de la Comisaría de Corpus dependiente de la Policía de la Provincia de Misiones en el 2017 y era producto de una maniobra delictiva de encubrimiento de contrabando, tratándose de mercadería extranjera que había ingresado al país de manera ilegal; además no cumplía con los controles legales y estándares de calidad y salubridad requeridos para su destinación al consumidor local.

El malestar general se debe a que varios grupos, entre ellos los Voluntarios del Hospital de Juguetes se esfuerzan durante todo el año para acondicionar aquellos juguetes que la gente les entrega para que así más chicos tengan la posibilidad de recibir uno, más aún durante estos tiempos tan difíciles donde muchas veces el dinero no alcanza y en las familias suele haber más de un niño. El año pasado se entregaron más de 6.000 bolsas de juguetes para el Día del Niño.

Trascendió además, que este año, el intendente de Corpus, Orlando Rostan, le pidió en reiteradas oportunidades la donación de los juguetes a la Afip, pero la respuesta fue negativa.