Robaron un millón de pesos tras intimidar a empleada de un local

Dos delincuentes armados irrumpieron ayer por la tarde dentro de un comercio de la avenida Uruguay de la capital provincial y tras intimidar a una empleada del lugar se llevaron un botín que de acuerdo a las primeras estimaciones realizadas por los investigadores superaría el millón de pesos.

El hecho se produjo cerca de las 16 en el local de la firma Bolsaplast SRL ubicado en la esquina de la mencionada avenida y calle Ambrosetti, a media cuadra de la Seccional Tercera de Policía.

Según detallaron voceros policiales consultados por este matutino, los dos delincuentes llegaron hasta el lugar en un Ford Ka color gris que era guiado por un cómplice y que fue registrado por una cámara de seguridad del comercio.

Inmediatamente, el dúo se dirigió hasta un portón corredizo que da a la calle Ambrosetti y tras forzarlo lograron acceder al negocio.

Una vez adentro, rápidamente sorprendieron a una empleada de 28 años que se encontraba en soledad en ese momento en el lugar y que segundos antes advirtió un ruido raro que venía desde la calle.

Bajo amenazas e intimidaciones con arma de fuego, los malvivientes se apoderaron de 963.107 pesos en efectivo de la oficina del gerente. Aunque según precisaron los voceros consultados, además los desconocidos se llevaron otra importante suma de dinero que correspondía a la recaudación del día y cuyo monto total hasta el cierre de esta edición no había trascendido.

Por otra parte, los ladrones se llevaron una mochila con distintas pertenencias de la empleada como así también su teléfono celular particular.

De acuerdo al relevamiento de las imágenes de las cámaras de seguridad se pudo reconstruir que los desconocidos escaparon en el mencionado Ford Ka, el cual no llevaba dominio en la parte delantera, por calle Ambrosetti en sentido este-oeste y con destino desconocido.

También se pudo establecer que uno de los implicados llevaba puesta campera y jean azul, mientras que su cómplice tenía puestas prendas oscuras. Y que ambos llevaban gorras de color blanca.

Una vez conocido el suceso, distintas dependencias de la Policía de Misiones iniciaron la búsqueda de los responsables del robo.

Para ello se solicitaron los registros de cámaras de videovigilancia de la zona con la intención de reconstruir los momentos posteriores al hecho y la ruta de escape.

También se tomó declaración testimonial a vecinos y a otros comerciantes de la zona en busca de algún dato más que pueda ayudar en el caso.

Por este hecho tomó intervención el Juzgado de Instrucción Siete de la capital provincial, a cargo del magistrado Miguel Mattos.

Los implicados seguen siendo intensamente buscados.