Agencias de viaje, complicadas por restricciones nacionales

Las restricciones siguen marcando el ritmo de vida de muchos argentinos. Es lo que ocurre con aquellos que se encuentran varados en el exterior, cuyo escenario se complica con el correr de las horas, puesto que muchos de ellos no tienen manera de seguir sosteniendo una estadía fuera del país; teniendo en cuenta además que el gobierno nacional ya anticipó que no los asistirá.

 El decreto de necesidad y urgencia que permite un cupo de 600 ingresos diarios vencerá el próximo 9 de julio, tras lo cual no se sabe cuáles serán las próximas decisiones en torno a esta cuestión. 

Según el gobierno, esta medida se impuso porque retrasaría la llegada de la variante Delta de coronavirus al país.

En este marco, además, desde el gobierno decidieron exponer las razones de los viajes que hicieron los argentinos al exterior, indicando que desde el 28 de mayo al 28 de junio salieron 44.242 personas, de las cuales el 60 por ciento fue por turismo, mientras que un 15 por ciento fue por trabajo, el 14 por ciento por residencia, y el restante se divide entre mudanza, estudios y otros. 

Como se sabe, muchos países tienen fronteras cerradas y otros siguen aplicando restricciones.

A su vez, quien salía de la Argentina firmaba una declaración jurada en la que se establecía que por la pandemia podrían reprogramar los vuelos.

Agencias en problemas

Más allá de la situación de los varados, también hay otro gran grupo de trabajadores que se encuentra a la expectativa. Se trata de las agencias de viaje, que advierten serias dificultades para vender y generar ingresos bajo este escenario de inestabilidad constante. Al respecto se refirió Laura Montenegro, de Piu Bella Viajes, quien argumentó que “está bastante difícil, la gente tiene miedo de viajar incluso dentro del país”.

“Es un problema para todas las agencias de viajes y los pasajeros, porque primero pusieron muchos vuelos, se podía viajar a Estados Unidos sin problemas y ahora se da un efecto embudo, toda la gente está afuera y entrar es un problema, son 600 pasajeros por día, lo que no alcanza ni siquiera a tres vuelos”, dijo en comunicación con Acá te lo contamos por Radioactiva 100.7.

Montenegro adujo que mucha gente se fue por una semana o diez días, “y nadie contesta los teléfonos, la gente se desespera y  todo depende de la Anac. Nosotros estamos con reprogramaciones tras reprogramaciones desde el año pasado”.

“Hoy por hoy los otros países no están complicados, somos nosotros nomás, los demás países están abiertos”, recordó.