Panorama complicado en locales de Jardín América
La gastronomía de Jardín América sufrió las modificaciones que suscitó la pandemia del Covid-19. Tal fue el caso del restaurante El Quinto, que antes de marzo de 2020 albergaba a un gran número de comensales, más aún en días festivos como el Día del Padre, el Día de la Madre y cumpleaños. Sin embargo, sufrió un parate de tres meses y volvieron al ruedo a mediados de junio, retorno que fue complicado, según calificó Cristian Benítez, su propietario. “Suele haber gente, no mucha pero siempre algo hay. Volver después del parate fue difícil porque disminuyó en gran número la concurrencia, a la que teníamos habitualmente”, explicó.
Además, recordó que en los primeros tiempos al reabrir las puertas, tuvieron que cerrar el turno noche entre semana; sólo atendían al mediodía y los sábados era el único día en el que trabajaban en horario nocturno. “Las restricciones no afectaron tanto como la economía en general, porque llega poca gente y un promedio por persona es de 1.000 pesos más o menos, hablando de tenedor libre con una bebida chica. Pero la recuperación de la crisis puede llevar varios años en la gastronomía y hotelería, porque tuvimos que reinsertarnos en su momento”, señaló Benítez.
Por su parte Eduardo Balmaceda, dueño de La Terraza Resto Bar, dijo que “estamos trabajando un 40% de la cantidad que solíamos tener antes de la pandemia. Las restricciones horarias nos cortaron muchísimo y, lamentablemente, a la hora de pagar las cuentas no te esperan, son momentos complicados que hay que afrontarlos”. Acotó que el comensal en su local gasta un promedio de 500 pesos. “La gente cuida mucho su bolsillo, no consume como antes”, agregó.
Sobre las expectativas de cara a las vacaciones de invierno, señaló que son muy pocas. “No creo que llegue a mejorar el panorama. Podría ser recién para fin de año pero para las vacaciones que se aproxima en julio veo muy complicado que haya mayor consumo”, afirmó.
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