Los efectos de la pandemia en estos centros de estudios
Para conocer cómo estuvo funcionando la actividad universitaria durante la pandemia, entre los meses de septiembre y noviembre del año pasado, se hicieron encuestas a docentes, alumnos, directivos y no docentes de todas las universidades públicas del país.
Al anunciarse las aulas híbridas universitarias, se dieron a conocer los resultados de esas encuestas organizadas por el Ministerio de Educación de la Nación.
Según esas estadísticas oficiales, en general las universidades nacionales se las ingeniaron para no interrumpir el dictado de contenidos y toda la comunidad universitaria hizo un esfuerzo por adaptarse a la virtualidad en pandemia, sobre todo docentes y alumnos.
La encuesta oficial indicó que 7 de cada 10 docentes dijeron que estaban “satisfechos” y “muy satisfechos” con las acciones realizadas por la universidad para dar respuesta a las condiciones impuestas por la pandemia. En la misma sintonía se expresaron los estudiantes y trabajadores no docentes, que manifestaron similar o aún mayor conformidad (72% los primeros y 76% los segundos).
“Si bien hay altos niveles de satisfacción en general de acuerdo a lo que pudimos ver en estas encuestas nacionales, también quedó claro que hay ciertos contenidos y prácticas que requieren del regreso a la presencialidad” explicó el ministro Nicolás Trotta.
“Lo que vimos es que los niveles de satisfacción son inferiores en las personas que más sufrieron la pandemia. Los estudiantes que viven en los contextos más desfavorables, los que tienen hijos, los que presentan menores niveles de ingresos, muestran más dificultades en la continuidad virtual” explicó el coordinador del programa de becas universitarias, Germán Lodola.
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