Se agrava la crisis hídrica en Pozo Azul

Desde hace unas semanas el número de familias a las que la municipalidad de Pozo Azul, asiste con agua para consumo, supera las 100 viviendas. La crisis hídrica se agrava en un municipio donde no cuentan con una planta potabilizadora, solo acceden al vital líquido mediante pozos perforados y vertientes, los que, a tantos días sin lluvia presentan caudal insuficiente para abastecer a la demanda.

 Si bien, existe la probabilidad de precipitaciones en lo que resta de la semana, los milímetros son pocos para llegar a normalizar el deficiente acceso al agua. El municipio, donde rige la Emergencia Hídrica y Agropecuaria,  han realizado nuevas perforaciones a fin de resolver el problema en algunos barrios, restando otros tantos donde el vital líquido escasea con la sequía.

 Uno de los barrios donde la falta de agua es grave, es en barrio Progreso, ubicado sobre ruta provincial 17, donde los vecinos dependen de pozos de balde, algunas deben cruzar la ruta, caminar más de mil metros para cargar agua de otra propiedad “Tenemos un pozo, hoy solo pude sacar una palanganita de agua, es muy difícil la situación porque tengo cuatro chicos en edad escolar y no puedo lavar la ropa porque el agua que recibimos es para lo básico, necesitamos contar con una red de agua potable” señaló con preocupación a El Territorio, Zulma Márquez.

 En uno de los casos, eran seis las familias que dependían del agua de un mismo pozo, a la fecha la disponibilidad de agua, no alcanza para dos de esos núcleos y así son similares los ejemplos. Mientras desde la municipalidad cargan los tanques de las familias una vez por semana y estas racionan el agua lo máximo posible, avanza con algo de retraso la construcción de una toma de agua.

 En cuanto a San Pedro, hasta el momento el caudal del arroyo Mbiguá, permite la distribución normal del vital líquido, servicio que fue reforzado con la puesta en funcionamiento de dos nuevas perforaciones en la zona urbana.