El desintegrador molecular de Yasí-Yateré

domingo 02 de mayo de 2021 | 6:00hs.
El desintegrador molecular  de Yasí-Yateré
El desintegrador molecular de Yasí-Yateré

Capítulo 1: “Un poco de historia”.

Situémonos en el sector 9XA al noroeste del sexto sector del mundo unido. Esta región abarca desde la central hidroenergética del Iguazú (llamada así por nuestros antecesores) hasta la barrera sónica de electrocomunicación D9; desde hace más de 1.000 años todo este sector estuvo dominado por una leyenda que hoy en día es del pasado pero a fin de que la sepan la rememoraré: hacia el año 1987 se hizo fuerte el rumor sobre un niño pequeño, bajito y rubio al que se lo llamaba Yasí Yateré; dicho rumor se extendió hasta el año 2867, año en que el rumor creció más de la cuenta pues, se decía, el Yasí Yateré había armado un desintegrador molecular y que con él destruía todo a su paso, obviamente dicho rumor atemorizó al recientemente formado sector.

 

Capítulo 2: “Se dispuso a....”

En esos días habían nacido sobre la margen derecha del suministro de H2O número 12 (anteriormente llamado Paraná), BN111 - muchacho flaco y alto, pero no mucho algo más de 2 dátrinas.

Mostrando un especial interés por esta leyenda ya muy contada, estudió en la facultad de electroquímica de 9XA graduándose con honores en radiestesia. Creyéndose preparado y listo se dispuso a realizar la temible y a la vez osada tarea de encontrar, capturar y/o destruir a la última leyenda de 9XA.

Trabajó largos meses creando aparatos de todo tipo, de radiestesia, localizadores sónicos, rayos láser de Pu 95 ensamblados en silicio, macroacopladores de electrones y otros sencillos aparatos como estos.

Luego de lo cual se dirigió con su compañero de aventuras CHX 14 (alias “el petiso” por medir tan solo 1 dátrina) y juntos se dirigieron hacia el sector boscoso de 79.000 dátrinas que había en el área sur de 9XA donde, según se decía, habitaba el Yasí Yateré.

 

Capítulo 3:  ¡Dios!!!, ¡Qué asco!

Internáronse ambos en el sector boscoso y a medida que avanzaban se iban encontrando con las ruinas de una antigua ciudad llamada “Posadas” en el idioma de entonces. Todo era extraño, todo era historia, construcciones pequeñísimas, vehículos de cuatro ruedas los cuales eran muy contaminantes y según se cree, estos fueron los que causaron la explosión termonuclear del año 2017; mientras se asombraban, se acordaban lo que aprendieron en la facultad, que la persona más alta les llegaba a la rodillas. ¡Dios!, ¡Qué asco! dijeron los dos al unísono al mismo tiempo que se dieron cuenta que con su grito atrajeron a un achropterix rojo macho en celo que rondaba el lugar en busca de una posible presa y como ya sabrán este animal es sumamente peligroso en su época de apareamiento; viendo esto BN 111 sacó su láser, conteniendo la respiración y quitándose la escafandra para poder apuntar mejor, dirigió a simple vista y sin ayuda del electrolocalizador sónico el fino haz de luz rojo brillante hacia el centro de sus pseudopodios haciendo estallar su proboscis en mil pedazos -¡buen tiro BN!, fue la respuesta de CHX 14 al ver lo sucedido y relamerse ya por el asado de achropterix rojo macho que comerían esa noche. Y así fue, esa noche comieron abundantemente y se echaron a dormir en un amplio cuadrado de 26 x 26 dátrinas limpio de maleza, rodeado por edificios y canales anchos, poco profundos, rellenos de un material gris llamado asfalto.

 

Capítulo 4: “Tranquilo BN, nos están siguiendo”.

Esa mañana los dos se despertaron muy descansados y contentos, desayunaron y se echaron a caminar por la antigua ciudad hasta que llegaron a una avenida sobre la que se erguía una construcción alta con forma de dos platos invertidos montados sobre una columna gruesa; a los dos les llamó la atención la forma de dicha estructura porque se asemejaba mucho a las nuevas naves electromagnéticas que alcanzan la velocidad del quarkz (o sea 670.000.874.612 kilométros por décima de segundo), ¿habrían tal vez los seres atrasados de aquellas épocas conocido la forma de estas modernas naves?; en fin; más fue mayor el asombro al examinarlo con rayos epsilon y ver que el interior era hueco y estaba lleno de H2O en perfecto estado de conservación; con un certero disparo de su láser CHX14 agujereó la parte superior de la estructura por la que comenzó a salir el líquido.

Lo sucedido les trajo a la memoria lo que estudiaron en la primaria, que estas civilizaciones almacenaban este líquido en depósitos para épocas de faltarle - ¡ja, ja! rieron los dos al unísono, ¡No conocían el controlador de atmósfera! - dijeron. Mientras se lavaban la cara, las manos y llenaban los suministros de H20.

Se echaron a caminar, caminaron, caminaron y caminaron hasta que se cansaron, la ciudad había quedado lejos ya, mañana sería jueves, día de lluvia y viento y no habían rastros ni del Yasí Yateré, ni del desintegrador molecular, ni de nada; - ¡Ya estoy podrido!! dijo CHX 14 -. Yo también, mañana será jueves no lo volveremog a ver más!! dijo BN111 - con tono enojoso; en ese momento CHX 14 lo tomó firmemente del brazo y le dijo - ¡tranquilo BN!, ¡nos están siguiendo!, y así era, BN 111 subió el volumen del micrófono exterior de su escafandra hasta los 80 heptaciclos y consiguió distinguir 6 pasos en vez de 4, sacó su detector sónico y oteo toda la zona hasta 123 dátrinas a la redonda y localizó una pequeña forma de vida de una dátrina de forma regular. Se colocaron los cinturones jet y se elevaron hasta las 53,8 dátrinas (el alcance máximo de estos vetustos artilugios), y así fue que divisaron movimientos bajo los árboles y la maleza.

 

Capítulo 5: “¡CHX, CHX Dispara ahora!”

Descendieron y se dispusieron a seguir al pequeño ser hasta que éste llegó a un claro, BN y CHX permanecieron escondidos, mientras que el pequeño ser se echó a tomar el sol; el niño era de aproximadamente 0,52 dátrinas, cabellos rubios y 40 kg. de peso. ¡Todo concordaba! ¡Era el Yasí Yateré!; lo miraron largo rato, su buzo blanco de PVC 12, su escafandra blanca y brillante, su bastón tan alto como él, de oro y plata; todo parecía resplandecer bajo el sol, los dos estaban maravillados, algo mágico se tendió en el ambiente, parpadeantes luces azules se cernieron sobre ellos inundando sus sentidos al mismo tiempo - que una voz suave y melodiosa les decía: - “Sáquense las escafandras ¿eh?-, fue en ese entonces que BN 111, como por arte de magia se dio cuenta que todo era un engaño bien preparado, frente a ellos estaba el niñito, apuntándolos con un tubo plateado por el cual comenzaron a surgir gruesos haces de luz verde; BN 111 esquivó el tiro rodando sobre su eje y pegándole a CHX 14 para sacarlo de su trance; cuando CHX 14 se hubo despertado sacó su láser y lo dirigió titubeante hacia el niño y viendo su dulce rostro no se animó a disparar, fue ahí que BN111 le dijo “¡CHX, CHX dispará ahora!” y así lo hizo; el fino haz de luz dio de lleno en el cuerpo del niño haciéndolo volar unas 586 dátrinas.

Segundos más tarde cuando BN y CHX se hubieron ya incorporado, del lugar donde había volado el niño se oyó un mugido o más bien un grueso ronquido seguido de un agudo silbido que obligó a ambos a desconectar los micrófonos exteriores, luego de esto del lugar de donde venían esos sonidos surgió un animal horrendo, de gruesos dientes, pelos largos y 3 ojos en vertical que se reía a carcajadas y avanzaba hacia ellos; se colocó delante de BN y CHX y los tres comenzaron a reír, rieron y rieron hasta que los tres cayeron al piso de la risa cuando comenzaron a sentir un cansancio enorme; poco a poco los tres fueron embebidos por el haz de luz verde que todavía desprendía el desintegrador molecular - que estaba tirado en el piso aún funcionando; lenta y paulatinamente los tres se convirtieron en antimateria.

 

Epílogo:

Desde el 6 de diciembre del año 4885 el sector 9XA al noroeste del sexto sector del mundo unido, está dominado por la leyenda de los tres habitantes del sector boscoso que no existen en vida, vagan juntos riéndose a carcajadas, atrapando niños y destruyendo todo a su paso con un rayo láser de luz muy brillante y fina.

Año 5747 Sector 9XA, manzana 17.

(Nota: dátrina es igual a 3 metros de hace 2.000 años.)

Cuento publicado en la revista Mojón A segunda edición de 1986.


Bernardo Meiojas

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