La inestabilidad del río agrava la crisis del agua en Iguazú

La medida paliativa para normalizar el servicio de distribución de agua en la Ciudad de las Cataratas debió ser interrumpida ayer a las 6 de la mañana debido a un nuevo descenso del nivel del río Iguazú. Dicha medida consistía en la puesta en funcionamiento de una parte de las bombas -ubicadas en la balsa- que habitualmente toman del cauce del río.

Por eso, ahora la esperanza está puesta en que el caudal varíe para comenzar con el bombeo de agua cruda, informaron desde del Instituto Misionero de Agua y Saneamiento (Imas).

“Trabajamos toda la noche del lunes y la madrugada del martes (por ayer) en la toma, llegamos a aumentar el volumen de agua cruda a 800 metros cúbicos por hora, sin embargo a las 6 de la mañana el río volvió a bajar y las bombas quedaron nuevamente fuera del agua y las sacamos de funcionamiento”, explicaron desde el Imas.

Si bien esperan que el caudal comience a aumentar hoy, la situación en la ciudad continúa siendo complicada ya que solamente cinco de los 30 barrios que son abastecidos por el Imas recibieron el líquido vital en la madrugada de ayer, debido a que lleva mucho tiempo llenar la cañería y recuperar la presión.

Es por ello que los integrantes de la Asamblea Vecinal volvieron a manifestarse en el Hito de las Tres Fronteras, frente a Imas, y llevaron adelante una junta de firmas en la plaza San Martín que serán adjuntadas a un petitorio para ser elevado al gobernador de Misiones, Oscar Herrera Ahuad.

Entre otros ítems, exigirán el cambio de autoridades de Imas Iguazú y el cumplimiento de las obras anunciadas, además de la finalización de la obra que se ejecuta en la segunda planta potabilizadora de la Ciudad de las Cataratas.

Por su parte, los bomberos voluntarios de Iguazú trabajaron intensamente en la distribución de agua potable en los barrios más altos y lo hicieron mediante el apoyo recibido por sus pares de las localidades de Puerto Esperanza y Puerto Libertad, que aportaron camiones cisterna de 10.000 litros y personal para la distribución de agua potable.

“Asistimos a cerca de 20 familias por carga de camión, sabemos que no podemos llegar a todos los barrios, pero tratamos de auxiliar a los vecinos que después de cinco días están sin agua, es una situación insostenible. Esperamos que Imas pueda restablecer el servicio lo antes posible, ya que vemos que será una semana difícil”, manifestó Javier Bareiro, presidente de la Asociación de Bomberos Voluntarios de Iguazú.

Durante la mañana de ayer, en forma simultánea a la distribución de agua, los bomberos debieron acudir a un incendio en un departamento de un inquilinato que gracias al rápido accionar pudieron controlarlo antes que se expanda a los demás departamentos del edificio ubicado sobre calle Mendoza, en barrio Florida.

El problema del agua empezó el pasado viernes, cuando las represas ubicadas sobre el río Iguazú realizaron una maniobra de cierre de las compuertas. Esta acción provocó una disminución  instantánea del caudal del río, que dejó a las bombas que están en el cárcamo de la toma de agua por encima del nivel de agua, totalmente fuera de servicio.