El imputado es un agricultor de la localidad de Aristóbulo del Valle

Por un tecnicismo ordenaron liberar a un acusado de violación

La Cámara de Apelaciones de Posadas cuestionó el acta indagatoria. Ordenó el cambio de carátula y dispuso la libertad del detenido. Víctima y entorno temen represalias
martes 06 de abril de 2021 | 3:30hs.
Por un tecnicismo ordenaron liberar a un acusado de violación
Por un tecnicismo ordenaron liberar a un acusado de violación

Durante más de una década la presunta víctima guardó silencio por temor a las amenazas de su propio padre, un agricultor que en innumerables ocasiones la habría sometido sexualmente, según denunció la joven que actualmente tiene 20 años.

Tras un largo proceso, donde intervinieron compañeras de la facultad a la que asiste, finalmente a mediados del 2019 la chica se animó a denunciar a su progenitor.

Los hechos se habrían registrado en una chacra en la localidad de Aristóbulo del Valle, donde residieron durante la niñez y adolescencia de la víctima,

Su madre corroboró el terror que le tenían al acusado, acostumbrado a maltratar a su familia.

Ante la grave acusación de la joven y otros elementos de prueba, el Juzgado de Instrucción Uno de Oberá imputó al agricultor por el delito de abuso sexual con acceso carnal agravado por el vínculo y ordenó su detención.

En principio permaneció en una dependencia policial de Aristóbulo del Valle y tras el dictado de prisión preventiva fue alojado en la Unidad Penal VIII de Cerro Azul.

Hasta ese momento el accionar judicial había respaldado el relato de la estudiante y su entorno más íntimo, lo que les daba tranquilidad sobre su propia seguridad, ya que en más de una ocasión mencionaron el temor que le tienen al sospechoso y detallaron sus antecedentes de violencia.

Pero el último miércoles, la querella que representa los intereses de la presunta víctima fue notificada de una resolución de la Cámara de Apelaciones en lo Penal de Posadas que ordenó el cambio la carátula y dispuso la libertad del detenido.

Dicha medida se apoyaría en la anulación del acta de indagatoria, tecnicismo que terminó beneficiando al imputado.

Reclaman garantías

La novedad significó un verdadero cimbronazo para la presunta víctima, quien reside en Oberá por razones de estudio, aunque visita a su madre en Aristóbulo del Valle los fines de semana.

“La joven contó que su propio padre la manoseó desde pequeña y a los 12 años la penetró por primera vez. Para ella fue un alivio empezar la secundaria porque se mudó a Campo Grande, donde vivía con la familia de una tía. Muy esporádicamente volvía a la casa por temor al padre y recién pudo hablar cuando empezó la facultad”, precisó un allegado.

Asimismo, subrayó que en un primer momento la chica expresó sus dudas de denunciar a su progenitor por temor a represalias, puesto que siempre la habría amenazado.

Al respecto, aseguró que “al principio repetía que tenía mucho miedo de denunciar porque el padre en algún momento iba a salir y se iba a vengar. Pero confió en la justicia e hizo la denuncia, aunque ahora la vuelven a dejar a merced del violador. Entonces qué garantías tiene de que no le pase nada”. 

Según averiguó este matutino, la Cámara de Apelaciones dispuso que la indagatoria al imputado fue mal hecha, por lo que decidió la anulación completa de la misma, un hecho inusual, sobre todo en delitos contra la integridad sexual.

“Se discute la formalidad del acta de la indagatoria, a pesar de que estuvo presente el defensor del imputado, como corresponde. La Cámara ordenó que se cambie la carátula a abuso simple y se otorgue la libertad al detenido”, precisó una fuente con acceso al expediente.

En tanto, se estima que esta semana el agricultor será trasladado al juzgado interviniente para ser notificado de la resolución de la Cámara.

Además se dispondría la prohibición de acercamiento hacia la víctima. Por su parte, desde la querella anticiparon que luego de analizar el dictamen apelarán el mismo.

Amenazas previas

El expediente por abuso sexual está a cargo del juez de Instrucción Tres de San Vicente, Gerardo Casco, subrogante del Juzgado de Instrucción Uno de Oberá.

Con relación a la presunta víctima, desde su entorno destacaron el respaldo que tuvo en el ambiente universitario donde se desenvuelve, lo que le permitió romper el silencio, tener contención y radicar la correspondiente denuncia.

Un dato que marca la personalidad y antecedentes de violencia doméstica del imputado indica que al enterarse de la denuncia, la madre de la víctima preparó la comida y dejó servida la mesa para su esposo, tras lo cual escapó de la chacra con unas pocas cosas, atemorizada por la posible reacción del acusado.

“La víctima declaró que en más de una ocasión el progenitor la amenazó de muerte. Le decía que si alguien se enteraba o lo denunciaban les iba a pegar un tiro a ella y a la madre. Por eso el día que le avisó de la denuncia la mamá se fue, porque estaba segura de que la iba a matar”, relataron.

En su declaración, la estudiante precisó que los abusos comenzaron con manoseos y toqueteos, hasta que a los 12 años fue penetrada por primera vez.

En principio el agricultor fue imputado de abuso sexual con acceso carnal agravado por el vínculo, delito que contempla entre 8 a 20 años de cárcel, aunque el cambio de carátula disminuiría sensiblemente la pena. 

Temas de esta nota
¿Que opinión tenés sobre esta nota?