Jugó un partidazo, con autoridad y contundencia desde el primer minuto. Con estos atributos, Oberá Tenis Club (OTC) se impuso ayer por 84-67 ante Instituto de Córdoba, en su última presentación de la fase regular de la Liga Nacional de básquet, un resultado clave en sus aspiraciones para evitar la zona de descenso.

De todas formas, a partir de hoy el representante de la Tierra Colorada estará pendiente de los resultados que consigan Atenas de Córdoba y Ferro, sus rivales en la puja por zafar de la penúltima posición y del cruce ante el último (Weber Bahía) por la permanencia en la máxima categoría.

Ayer el Celeste hizo los deberes y ratificó todo lo bueno que mostró en la última parte de la competencia, tramo en el que logró cinco triunfos en ocho presentaciones, su mejor racha en la temporada debut en la Liga Nacional.

Pero por el momento no alcanza para escapar de la angustia que implica la posibilidad de tener que medirse con el conjunto bahiense, siempre y cuando se dé una serie de resultados.

En la fase regular, el Celeste disputó 38 partidos, con un récord de 13 triunfos y 25 derrotas. En tanto, Ferro acumula 13 victorias, 24 caídas y tiene un juego pendiente ante Instituto, aún sin fecha confirmada.

Por su parte, Atenas cuenta con la misma cantidad de derrotas que OTC, pero aún debe disputar dos partidos: hoy ante Libertad de Sunchales y el miércoles ante Obras.

En consecuencia, la única opción para que el elenco misionero tenga que disputar el cruce por la permanencia sería que Ferro y Atenas ganen todos los partidos que restan.

Si el Griego pierde hoy, ya está. Sino, habrá que seguir esperando los demás resultados.

Gran triunfo
En la víspera, después de la magra actuación ante Plantese del sábado, el conjunto que dirige Leandro Hiriart salió muy enfocado en defensa y de entrada contó con un encendido Anthony Young, goleador del juego con 23 puntos.

El norteamericano desniveló atacando el aro y lastimó desde el perímetro, clave en el primer cuarto con 15 puntos que sentaron las bases para la primera luz de ventaja que después pudo sostener.

Sin Nicolás Paletta, lesionado en un tobillo, Cristian Schoppler tomó la base y condujo con criterio, relegando su faceta goleadora en función colectiva.

Kent y Ruiz colaboraron en el goleo, mientras que Rodrigo Sánchez aportó la intensidad defensiva que lo caracteriza.

Instituto no encontró un jugador que desnivele en ataque, le costó anotar e hizo agua en defensa. Así, el primer parcial fue 27-15 para OTC.

En la continuidad, Hiriart mantuvo la intensidad con una adecuada rotación. Gómez Quinteros fue un buen relevo en la base, Eseverri aportó dos bombas y Zago marcó presencia en la pintura, más su eficaz tiro de larga distancia. Con estos argumentos, el Celeste sacó 21 de ventaja (43-22).

El rival ajustó en defensa y en ataque sobresalió Alessio, más chispazos de Scala.

En el inicio del complemento OTC perdió intensidad e Instituto achicó a 10 (56-46). Pero se recompuso a tiempo y cerró el tercer parcial con ventaja de 19.

En el tramo final mejoró la postura defensiva, borró al oponente y sacó una máxima de 27 puntos. En el cierre, con la tranquilidad de un resultado inamovible, el DT les dio minutos a los suplentes y celebraron sin angustia.