Denunciaron a un empresario por acoso, usurpación y amenazas

La trama es similar a una película del lejano oeste, donde un terrateniente avanza sobre tierras ajenas en base a la fuerza y amenazas, siempre respaldado por empleados que siguen sus órdenes de manera incondicional. Pero en este caso la historia transcurre en Florentino Ameghino, municipio rural de la zona Centro, y las damnificadas son dos mujeres: madre e hija.

El acusado es un conocido empresario que reside en Panambí, quien pretendería apropiarse de alrededor de 50 hectáreas, según la denuncia radicada por las citadas ante la comisaría local.

El caso ya se tramita en la justicia de instrucción e incluye los presuntos delitos de usurpación, amenazas de muerte y acoso sexual.

Según averiguó El Territorio, el acusado habría pergeñado un plan para quedarse con las tierras de las mujeres aprovechando la muerte del padre de la familia.

Tras solicitar la reserva de su identidad por miedo a represalias, una de las hijas del difunto comentó detalles del caso y reclamó el accionar de la Justicia, ya que teme por la integridad de su madre y su hermana, quienes residen solas en la chacra.

“Mi papá tenía una amistad con este hombre, por eso años atrás permitió que sus animales se alimenten en nuestra chacra. Mi papá falleció y sus animales siguieron pastando en nuestra chacra. El problema empezó en diciembre, porque con la seca que había le pedimos que lleve sus animales porque había poco pasto y necesitábamos para los nuestros. Ahí se enojó y fue la primera vez que dijo que la chacra era de él, que le había comprado a mi papá”, explicó.

En tanto, la mujer exhibió toda la documentación que certifica que las tierras siguen estando a nombre de su familia.

Cuestionan a la Policía

Tal como consta en la denuncia, meses atrás el intruso construyó un corral para curar al ganado. Se trataba de una construcción de madera ubicada a pocos metros de la casa familiar.

“No respetaba nada. Iba a la chacra los fines de semana, gritaba para llamar a los animales y molestaba a cualquier hora. Le decíamos que no vaya más, que no es propiedad de él y respondía: “Yo mando acá, yo hice un negocio con tu papá”. Un día desarmamos el corral y se enojó muchísimo. Ahí dijo que mi papá le vendió, que él era el dueño. Pero mi papá, mientras que estuvo vivo, nunca dijo nada de ninguna venta. Aparte tenemos todos los papeles en regla”, precisó.

Ante esta situación, los propietarios se dirigieron a la comisaría de Florentino Ameghino para radicar una denuncia, ya que el intruso ingresaba sin permiso a la propiedad y amenazaba a los dueños.

Al respecto, los damnificados criticaron el accionar policial, ya que nunca habrían atendido su reclamo. Incluso, en todo momento los uniformados se mostraron a favor del empresario, aseguraron.

“No sabemos qué arreglo tiene con los policías de Ameghino, pero ellos lo protegen”, reclamó una de las propietarias.

En ese sentido, mencionó que hace pocas semanas su madre cortó un alambrado que impedía a su ganado regresar a la chacra, ante lo cual el intruso “volvió con más gente y dos policías a poner el alambrado”.

Y agregó: “Ese día un policía nos filmó, como si los delincuentes fuéramos nosotros. A las seis de la tarde volvió con una oficial y otro policía para que vean el supuesto daño que nosotros le hicimos a él. Una locura”.

Acoso sexual

La sugestiva relación del empresario con los policías del pueblo habría retrasado la elevación de sucesivas denuncias a los juzgados intervinientes.

“Todo el tiempo va con la Policía a la chacra, pero a nosotros la Policía nunca nos asistió correctamente. Cuando vamos a denunciar tardan muchísimo en atendernos porque primero llaman por teléfono a alguien, como pidiendo permiso. Tampoco nos quieren dar constancia de las denuncias. Todo muy raro”, opinó.

También detalló un hecho puntual: “Cuando levantamos el alambrado que corresponde para delimitar nuestro terreno, este hombre vino con dos policías a tratar de pararnos, pero sin ninguna orden de un juez. Como si él fuera el patrón de los policías”.

Además, una de las mujeres de la familia radicó una denuncia por acoso sexual contra el mismo individuo, para lo que aportó fotos y videos de contenido explícito. Este diario accedió a dichas pruebas que ya constan en el expediente.

“Mi hermana hizo una denuncia por acoso sexual, con fotos y videos, pero ahora en el juzgado no encuentran las pruebas porque parece que la Policía no llevó. Ya es el colmo. También hay un vecino que presenció cuando (el empresario denunciado) le quiso agarrar de atrás a mi hermana. Es un testigo directo”, agregó.

Con relación a la supuesta transacción que esgrime el sospechoso, la mujer corroboró que todos papeles están en la escribanía a nombre de la familia.

“Si tenía algún papel o recibo firmado por mi papá, le íbamos a reconocer. Pero nunca presentó nada porque lo que dice es falso. Aprovechando que mi papá murió quiso apoderarse de 50 hectáreas, esa es la única verdad. Sigue amenazando a mi mamá y a mi hermana y nuestro temor es que les haga algo porque viven solas y alejadas del pueblo”, alertó.