jueves 28 de marzo de 2024
Cielo claro 23.7ºc | Posadas

La historia de Graciela Maidana

Tras sufrir un cáncer, encontró una salida en el arte del crochet

En 2016 le diagnosticaron cáncer de mama. Confiesa que en un principio sintió miedo, pero rápidamente lo transformó en una actividad productiva

lunes 18 de enero de 2021 | 1:36hs.
Tras sufrir un cáncer, encontró una salida en el arte del crochet
Graciela teje y todo lo que realiza lo regala. Foto: Esteban González
Graciela teje y todo lo que realiza lo regala. Foto: Esteban González

Activa, caritativa, servicial, creativa y alegre, son cualidades que se manifiestan en Graciela Maidana (55). El cáncer de mama que padeció no la apagó, sino que la motivó a aferrarse a la vida, encontró en el arte de hacer manualidades la fortaleza que necesitaba y también participar activamente en la parroquia Cristo Redentor de Jardín América. Destaca que en su familia encontró además la fuerza que requería para continuar hacia adelante.

Graciela es profesora de biología desde hace 31 años y en 2016 fue diagnosticada con cáncer de mama, por ello tuvo que tomar licencia y luchar contra ese tumor cancerígeno. Siempre acompañada por su esposo, Mario Rodríguez, y sus hijos Ana, Adrián y Agustín, ella expresó que primero sintió temor aunque después decidió mantenerse positiva, luchó y ganó la batalla.

“En febrero de 2016 saco turno para un control de rutina, primero me hacen una mamografía, luego una ecografía mamaría, ahí me di cuenta que algo sucedía porque la doctora estaba buscando en la mama derecha qué había”, recordó.

Ella reflejó que en principio no le dieron detalles, sino que le derivaron a una hematóloga, a causa de un nódulo. Fue así que Graciela acudió a las demás consultas médicas y al ver los resultados de los diferentes estudios que se fue realizando, supo que se trataba de un tumor cancerígeno, aunque afortunadamente era pequeño y fue detectado a tiempo. “Primero tuve miedo, pero me dije ¿Cómo podría ser si yo creo en Dios?”, comentó. Ella pidió oración y siempre en compañía de su esposo logró llevar adelante el tratamiento.

Desde ese entonces, descubrió otra faceta además del amor que tenía para enseñar en la escuela: el tejido a crochet. “Empecé a hacerlo en mis tiempos libres como estaba de licencia, mientras miraba televisión por ejemplo”, dijo la docente. Y agregó: “Mi primera cirugía fue el 25 de abril, luego vino la quimio y continué los rayos X, entre todos estos pasos que debía hacer me tomaba el tiempo para tejer”, manifestó.

Graciela expresó que a partir de ese año no sólo encontró en sus manualidades la posibilidad de despejarse, sino que la ayudó a pensar más en su familia. “Primero como todo es nuevo, es como una sorpresa pero tanto Mario como mis hijos siempre me apoyaron, yo nunca pensé que me podía tocar tener cáncer pero las cosas pasan por algo porque para mí fue descubrir todo un mundo y el acompañamiento de la familia es importante para sobrellevar el momento”, aseguró.

Además, todas las manualidades que hace las regala. “Me gusta obsequiar por algún cumpleaños o fecha especial algo hecho por mí, siento que tiene mayor valor aún”. Ella se caracteriza por pensar en el prójimo y agasajar a un ser querido con presentes hechos por ella.

Su participación en la iglesia
Su caridad y cariño por los demás no solo va por la docencia y ejercer su profesión con los jóvenes, sino que también se involucró con los más pequeños.

En la parroquia Cristo Redentor, se integró al grupo de madres que realizaban diferentes actividades con los niños. “Primero llegué como auxiliar y luego me tocó agarrar la comitiva y guiar al grupo en ese mismo 2016.

El año pasado por la pandemia no nos pudimos reunir con los niños pero siempre buscábamos una alternativa para que pudieran hacer alguna actividad”.

Tras una charla con uno de los sacerdotes de la comunidad, decidieron organizar un desfile y realizaron un video donde 13 niñas representaban, cada una, una advocación mariana en el mes de octubre del año pasado.

A raíz de eso, para el 1 de noviembre, día de todos los santos también aprovecharon la fecha y participaron 24 niños que se vistieron con los atuendos de distintos santos populares.

Por eso Graciela es querida entre tantos niños y sus respectivas familias, porque su dulzura, paciencia y cariño acaparan la atención de los chicos y hace que cada vez se sumen más ante una nueva propuesta.

Temas de esta nota

¿Que opinión tenés sobre esta nota?


Me gusta 0%
No me gusta 0%
Me da tristeza 0%
Me da alegría 0%
Me da bronca 0%
Te puede interesar
Ultimas noticias