Iniciaron un segundo proceso de juicio político contra Trump

A sólo ocho días del traspaso de mando presidencial, la bancada demócrata de la Cámara Baja del Congreso de Estados Unidos presentó ayer una acusación de “incitación a la insurrección” contra el presidente saliente Donald Trump para que el Senado le inicie un segundo juicio político por el violento asalto de sus partidarios al Capitolio del miércoles pasado.

La tensión es tal en Estados Unidos que la alcaldesa de Washington instó ayer a los estadounidenses a evitar una histórica tradición nacional y no viajar a la ciudad para acompañar a la ceremonia de investidura del presidente electo Joe Biden y a seguir el evento por la televisión o las redes sociales, pese a que la guardia nacional ya anunció el despliegue de 15.000 de sus miembros para evitar cualquier nuevo acto de violencia.

Pero esta garantía no parece alcanzar para calmar el temor que sobrevuela el país ya que el FBI alertó en su boletín, según recogió el canal de noticias ABC, que se están preparando protestas pro Trump en los 50 estados y la capital entre el domingo próximo y el miércoles 20 de la asunción presidencial.

Las principales redes sociales y plataformas de aplicaciones de comunicación utilizadas en el país, en tanto, continuaron ayer aislando los espacios utilizados por Trump y sus seguidores para evitar nuevas convocatorias masivas.

En medio de este clima de incertidumbre, miedo y tensión, la oposición, que en apenas ocho días se convertirá en oficialismo, presentó ayer una acusación contra Trump en la Cámara de Representantes, apenas minutos después de que la bancada republicana bloqueara una resolución que pedía que el vicepresidente Mike Pence destituyera a Trump invocando la 25 enmienda de la Constitución, que le da esa autoridad.

Tras la violencia del miércoles pasado en el Capitolio a manos de seguidores de Trump, el plan de la Cámara Baja, dominada por la oposición demócrata, era debatir ayer y votar hoy una resolución impulsada por su presidenta, Nancy Pelosi, para pedirle a Pence que invoque la 25° enmienda de la Constitución.

Cuando ese intento fue bloqueado por los republicanos, los demócratas pasaron al plan b: presentar cargos para abrirle un segundo juicio político a Trump.

“Los republicanos de la cámara rechazaron esta legislación para proteger a Estados Unidos, permitiendo que continúen los trastornados, perturbados e inestables actos de sedición del presidente. Su complicidad pone en peligro a Estados Unidos, erosiona nuestra democracia y debe terminar”, aseguró Pelosi en un comunicado.

La acusación, que la mayoría demócrata de la Cámara Baja tratará de votar esta misma semana, según versiones periodísticas, hace referencia a las repetidas denuncias falsas de Trump de fraude en las elecciones del año pasado y al discurso que dio a sus partidarios el 6 de enero incitándolos a marchar al Congreso.

La acusación también menciona una llamada que Trump hizo a la máxima autoridad electoral de Georgia en la que le pidió “encontrar” suficientes votos a su favor como para revertir su derrota frente a Biden en las elecciones del 3 de noviembre pasado en ese estado del sur del país.