Amanda Laureana Da Rocha cumplió condena en la cárcel de Ezeiza

Alerta vecinal por el accionar de una mujer reincidente en venta de cocaína

En los últimos siete años fue detenida tres veces en Oberá. En las últimas dos causas recibió la prisión domiciliaria. Sus vecinos aseguran que nadie controla sus actividades
sábado 26 de diciembre de 2020 | 5:15hs.
Alerta vecinal por el accionar de una mujer reincidente en venta de cocaína
Alerta vecinal por el accionar de una mujer reincidente en venta de cocaína

A mediados de 2015, Amanda Laureana Da Rocha (32) fue condenada con su pareja de ese momento a cuatro años de prisión por almacenamiento de estupefacientes, ya que en su domicilio de Oberá hallaron un cargamento de marihuana listo para ser comercializado. Cumplió aquella condena en la cárcel de mujeres de la localidad de Ezeiza, Buenos Aires.

En septiembre de 2018 volvió a ser capturada, junto a otro cómplice, acusada de manejar un kiosco de drogas en su propia casa, también en Oberá. En el lugar fraccionaban las dosis de marihuana y cocaína.

Ya en enero del año pasado, Da Rocha gozaba de prisión domiciliaria por la causa del 2018 cuando volvió a ser detenida porque la Policía constató que vendía estupefacientes en su domicilio. 

De todas formas, a pesar de su facilidad para reincidir, la Justicia Federal le volvió a otorgar el beneficio de la prisión domiciliaria, pero esta vez quedó bajo la custodia de personal del Escuadrón 9 Oberá de Gendarmería Nacional Argentina (GNA).

Tampoco se dispuso de tobillera ni otro dispositivo electrónico que permita un control estricto, demasiado changüí para una persona que siempre escondió y vendió drogas en su propia casa, según determinó la Justicia. 

Ahora, vecinos de calle Río Cuarto alertaron que Da Rocha abandona su vivienda de manera sistemática, incumpliendo con la pena impuesta.

“Sale todo el tiempo y todo el tiempo llega gente a su casa, como siempre hizo. Parece que le avisan cuando le vienen a controlar una vez al mes, porque ahí justo está en la casa. Con la excusa de que tiene hijos le dan prisión domiciliaria, pero nadie controla y hace lo que quiere, siendo que es una persona con tantos antecedentes por venta de drogas”, alertaron. 

A metros de la escuela
Da Rocha fue detenida por última vez en enero del año pasado tras constatarse que vendía drogas en su vivienda, donde debería estar cumpliendo prisión domiciliaria por una causa previa por el mismo delito federal. 

Es más, al momento de ser capturada se hallaba caminando por la calle Estanislao del Campo, casi Paraguay, en el barrio Loma Porá.

Según el expediente, las pesquisas permitieron dar con elementos que hacían suponer que la implicada continuaba vinculada de forma directa a la venta de drogas.

El trabajo de campo fue puesto a disposición de la Fiscalía Federal de Oberá y posteriormente su dispuso el allanamiento de la casa de Da Rocha, sobre calle Roca al 1335

Un dato significativo fue que el inmueble se ubicaba a menos de media cuadra de la Escuela 288 de Oberá.

Dentro del domicilio encontraron 125 gramos de cocaína, cogollos de marihuana, una balanza de precisión, 4.900 pesos en efectivo, celulares, tablet y un cuaderno con la contabilidad de todas las ventas realizadas.

Entonces fue detenida, pero su defensa logró que regrese a la prisión domiciliaria para cuidar a su pequeña hija recién nacida. Además tiene un varón más grande. 

Droga y robos
La misma mujer había sido detenida en septiembre del 2018 con varias dosis de marihuana y cocaína en el domicilio que compartía con un joven de 24 años.

De acuerdo a lo reconstruido por los investigadores en aquel operativo, el estupefaciente estaba escondido en distintos sectores de la propiedad, mientras que el valor de lo incautado rondaba los 200.000 pesos.

También se encontraron dos teléfonos celulares y 14.800 pesos en billetes de distinta denominación, provenientes de la venta minorista de drogas.

Luego se determinó que al verse rodeados, la pareja desechó cocaína por el inodoro del baño, ya que hallaron partículas de dicha sustancia en el lugar. 

Pero aquí no terminó la historia, ya que en paralelo a la causa por estupefacientes, los investigadores averiguaron que los sospechosos podrían tener vinculación con robos perpetrados en la ciudad. 

Fue así que en el mismo procedimiento se halló un automóvil Suzuki Jimny, con pedido de secuestro por robo a mano armada ocurrido Buenos Aires y una réplica de una ametralladora a gas UZI, que guardaría relación con distintos atracos en la zona.

Condena en Ezeiza
El derrotero de Da Rocha por el sistema Federal comenzó en 2015, cuando fue sentenciada a cuatro años de prisión como coautora del delito de almacenamiento de estupefacientes en la vivienda que habitaba en el barrio Mate Rojo, de Oberá. 

También fue sentenciado su concubino de entonces. Ambos reconocieron su culpa en juicio abreviado.

La investigación que derivó en la detención de la pareja se inició a raíz de la denuncia anónima que hizo un vecino en el Escuadrón 9 de GNA, preocupado por el avance de la droga entre los adolescentes del barrio.

El 23 de agosto de 2013 los detectives de la fuerza federal procedieron a allanar la vivienda situada en la avenida San Francisco 1657, del barrio Mate Rojo.

La inspección del inmueble comenzó en una pieza frontal donde no se halló nada, pero en una habitación contigua fueron encontradas dos bolsas de arpillera que contenían los paquetes de marihuana, cuyo peso total fue de 38 kilogramos.

En la propiedad también incautaron un revólver, y un vehículo BMW que tenía maniobras de adulteración sobre los dígitosestampados en el motor y chasis..

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