Un QR que abre universos

Hay libros para todos los gustos y edades. Varían en género, forma, tamaño, color y, desde hace algunos años, hasta en formato.

Ahora, en Posadas, los libros también tendrán forma de código QR. Es que la Biblioteca Popular 2 de Abril pondrá en marcha una propuesta que busca fomentar el universo literario a partir del aprovechamiento de los recursos tecnológicos.

Se trata de El camino de la lectura, una iniciativa que intenta crear una ruta de libros que estarán instalados (en forma de código QR) en distintos espacios públicos de la ciudad, para que los vecinos puedan acceder a la lectura gratuita, de manera rápida, fácil y sobre todo, segura.

La propuesta surgió hace algunas semanas,  y aún se encuentra en pleno proceso de producción. “Es una manera de acercar a la gente a la lectura en un contexto tan particular como el que estamos viviendo”,  detalló Norberto Rivas, presidente de la Biblioteca, en diálogo con El Territorio, haciendo hincapié en que por la pandemia, las prestaciones han disminuido considerablemente.

Si bien desde hace algunos meses las casas de libros permanecen abiertas y atienden al público (con protocolos de por medio), las medidas sanitarias son muy estrictas. Ya que, según explicó Rivas, los libros que circulan deben hacer cuarentena durante varios días. Asimismo, son sanitizados, entregados en bolsas y deben ser devueltos en las mismas condiciones; ello porque el virus puede sobrevivir varios días en el papel. A eso se suma que la atención al público ha disminuido diariamente a un cupo de unas 15 personas por día, de modo que las citas de prestación deben ser pactadas con anterioridad.

Todas estas cuestiones influyeron en el día a día de la Biblioteca: “Muchas veces por una cuestión de protocolos y todo el tiempo que demanda cumplirlos, por seguridad misma o incluso porque la biblioteca les queda un poco lejos, las personas dejan de acercarse”, explicó Rivas. “Entonces, implementamos esta opción como una propuesta que nos conecte y nos mantenga cerca de la gente, porque es una idea que abre caminos, estrecha vínculos”, agregó el bibliotecario.

Por el momento, El camino de la lectura estará situado en la Costanera de Posadas y las plazas céntricas (San Martín y 9 de Julio). Pero la intención de los organizadores es trasladar la iniciativa, más adelante, a otros espacios públicos como paradas de colectivo, colectivos de larga y media distancia y plazoletas en distintos barrios entre otras opciones.

El proyecto se encuentra en pleno desarrollo y la colocación de los códigos -que será en forma de baldosas, en el suelo, o a modo de tótem, tipo carteles- se realizará en la primera quincena de enero. La iniciativa se lleva a cabo con el apoyo de Marandú Comunicaciones, quienes trabajan en conjunto con la Biblioteca para instalar los libros. 

Además, los lectores podrán decidir si desean descargar el archivo o simplemente leerlo sin almacenarlo en el teléfono.

“Un modo de utilizar esta herramienta es escanear el código y descargar el libro al celular. Así, una vez que se complete la descarga, la persona se llevará el libro en el teléfono”, explicó Rivas. En tanto, la otra opción es escanear el código y leer el material en el lugar. “Esta propuesta surgió porque muchos no tienen espacio en el teléfono para descargar el archivo. Entonces, mientras estén cerca del código, podrán leerlo”, deslizó Rivas.

Variedad y diferenciación

 Cuando comenzó la cuarentena, la Biblioteca 2 de Abril trabajó de manera online. Para ello, debieron acceder a una gran variedad de material en PDF, o transformarla a este formato, y compartirla por WhatsApp. Desde entonces, además de los libros físicos, la casa también cuenta con una gran variedad de textos- alrededor de 3.000- en formato digital.

Esa innovadora estrategia, llevada a cabo con todas las medidas legales correspondientes respecto a la propiedad intelectual- les facilitó la posibilidad de contar con una gran variedad de material y avanzar en el proceso.

Estiman que para enero habrá en el espacio público alrededor de mil textos de variados géneros. 

“Cuentos infantiles, libros de historia, novelas, clásicos, poesía y sobre todo material de autores misioneros, Todo va a estar disponible y diferenciado por colores”, señaló Rivas alegando que los códigos de color verde serán exclusivos para los escritores locales. En tanto, los restantes géneros se siguen diseñando.

 “Se trata de una idea muy linda e innovadora. Tratamos de utilizar los recursos como una herramienta para expandirnos, para crecer y sobre todo, para fomentar la lectura en nuestro espacio. Nos aggiornamos para que todos puedan acceder a la literatura”, cerró Rivas.