El Liraa arrancó en Miguel Lanús, el barrio con más criaderos de Aedes

En la mañana de ayer se lanzó la 32° edición del Levantamiento de Índices Rápidos de Aedes Aegypti (Liraa), un método de monitoreo que permite identificar criaderos de larvas del mosquito transmisor del dengue visitando los domicilios de los vecinos de diferentes barrios posadeños.

En la ocasión, la actividad estuvo situada en la plaza Arturo Illia, de Miguel Lanús, ya que este fue el barrio que que encabezó el Índice Breteau (IB) -en la 31°edición que se realizó en septiembre- seguido de la Chacra 32-33, Dolores Norte, Dolores Sur, Santa Rita, Villa Urquiza, Riberas del Paraná, Villa Cabello, Centro, Itaembé Miní Este e Itaembé Guazú. Por definición, el IB es el número de recipientes positivos por cada 100 viviendas inspeccionadas. Se trata de un valor numérico que define el número de insectos en desarrollo que se encuentran en las viviendas humanas por la cantidad del total inspeccionado.

En este sentido, el IB según el último Liraa realizado en septiembre fue de 6,2%, mientras que la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda que debe ser del 5% o menos para evitar un brote de dengue, por lo que estos resultados pusieron de manifiesto que la situación es de riesgo en la capital provincial y las autoridades sanitarias -municipales y provinciales- apelan a la conciencia social.

El Territorio dialogó al respecto con Liliana Arce, directora de epidemiología de la Municipalidad de Posadas: “En el Liraa anterior la zona que vimos más complicada justamente fue Miguel Lanus, por eso arrancamos desde esta zona. El índice había sido bastante. Siempre tratamos de que sea de un solo dígito, es lo ideal, y se trata de que sea de 5% para abajo, pero eso es muy difícil a esta altura ya que se trata de una endemia”, comentó.

En este sentido, indicó que se tiene estipulado visitar unas 5.000 casas en forma aleatoria mediante el trabajo de 120 agentes sanitarios, quienes serán los encargados de recorrer todas las delegaciones de la ciudad de Posadas en un lapso de cinco a siete días, siempre y cuando el clima acompañe y no llueva, ya que en este caso resulta muy dificultoso salir a terreno. Además de observar los patios, los operarios también brindarán recomendaciones.

“Es fundamental que la gente tome conciencia de que en este momento de interbrote no nos sirven las fumigaciones, porque matan al mosquito que vuela en el aire pero si continúan teniendo criaderos en su domicilio, sigue el ciclo. En siete días vuelven a nacer los mosquitos, por eso la idea es eliminar los criaderos”, enfatizó Arce.

Macetas, floreros y bebederos, son los potenciales criaderos más frecuentes del mosquito transmisor del dengue y todo aquello que pueda acumular agua. “El Aedes aegypti está con nosotros y la única manera de combatirlo es lo que estamos haciendo, así que volteemos, demos vuelta, tapemos, eliminemos todos aquellos criaderos, porque la responsabilidad social es de todos”, dijo por su parte el Subsecretario de Atención Primaria del Ministerio de Salud, Danielo Silva, y agregó que “estamos próximos a lanzar el período siguiente después del interbrote que es el prebrote”.

En este contexto, Arce sostuvo que el escenario para este monitoreo es bastante positivo: “Hubo muy pocos días de lluvia y eso es lo que predispone a que los mosquitos pongan los huevos en las zonas donde tienen recipientes con agua. Además es cíclico, sufrimos un brote a principios de verano de este año y creemos que esto va a disminuir, tenemos la esperanza y dependemos muchísimo de que los vecinos nos abran las puertas de su casa para poder combatir al mosquito”, aseguró.

Según el recorrido que acompañó El Territorio, la predisposición del vecino en general fue buena y en algunas casas se encontraron criaderos, mientras que en otras, sorpresivamente, no hubo ninguno.

Febriles y bloqueos

Al ser consultada sobre la existencia de casos positivos de dengue, indicó que “comenzaron a aparecer febriles pero son todos sospechosos, no tenemos confirmados”. Días atrás, había señalado en diálogo con este matutino que en la ciudad de Posadas se realizaron seis bloqueos sanitarios ante denuncias por casos sospechosos de dengue. Esta tarea consiste en fumigar la manzana donde vive la persona que desarrolló síntomas compatibles con la dolencia que transmite el Aedes aegypti. Fiebre y dolor corporal son los principales síntomas.

Finalmente, comentó que en paralelo al Liraa y a las tareas de descacharrado, el municipio acompaña en las tareas de colocación de ovitrampas  (sensores que permiten controlar los huevos que deposita la hembra del mosquito) a cargo de la Dirección de Saneamiento Ambiental de la provincia, como así también en los trabajos relacionados a la liberación de mosquitos estériles. 

En relación a esto último, afirmó que “está en etapa de evaluación, todavía no tenemos resultados definitivos y estamos esperando para llegar a sacar las conclusiones”. El mecanismo consiste en la creación de mosquitos que ya nacen estériles y la finalidad es que el macho adulto estéril compita con el macho salvaje por la hembra salvaje. Si “ganan” los fabricados, la hembra después pone huevos pero sin embrión. Es decir, son huevos sin mosquitos adentro.

Los últimos números del dengue
El dengue representa en Misiones un riesgo latente, sobre todo después del último brote, en 2019-2020, en el cual se registraron tres de los cuatro serotipos de la enfermedad: DEN-1, DEN-2 y DEN-4.

El último reporte sanitario de la enfermedad -publicado el 14 de julio- arrojó un total de 10.083 casos, la mayor parte del serotipo DEN-1. Sin embargo no se descarta que haya podido existir un subregistro de infectados.

Comandante Andresito e Iguazú fueron las primeras localidades en empezar a reportar positivos y el brote descendió a Eldorado, Oberá, Garupá y Posadas, entre las comunas que reportaron mayor número de infectados.