La lluvia trajo alivio pero las pérdidas son enormes en zonas rurales afectadas por el fuego
El enorme trabajo realizado por los Bomberos Voluntarios y vecinos, sumado a las precipitaciones registradas durante la madrugada de este jueves, permitió controlar los focos de incendio registrados en el departamento de San Pedro, siendo de gran magnitud el que se desató en colonia Las Minas y zonas de influencia, donde el fuego se extendió por más de 25 chacras afectando, por lo menos, unas 250 hectáreas entre cultivos anuales, potreros, forestación y yerba mate.
Desde el lunes los focos de incendio fueron numerosos en San Pedro y los bomberos además de brindar asistencia en el incendio en la Biosfera Yabotí, trabajaron arduamente, sin cesar a fin de extinguir el fuego, en algunos casos, como en la comunidad aborigen Alecrín.
Llegar hasta el lugar del incendio resultó imposible por las condiciones geográficas, en estos casos, realizaron cortafuegos para evitar que las llamas llegasen a las viviendas.
Al trabajo, valorado de los héroes del momento, valiosa es la unión de los vecinos ante este tipo de siniestros, tal es el caso de los pobladores de colonia Las Minas y zonas aledañas donde el fuego no dio tregua generando enormes pérdidas en la producción. Allí los colonos, incluso con caballos cargaban agua para resguardar las casas, después de más de 24 horas de fuego continuo, cerca de las dos de la madrugada, lograron con la ayuda de máquinas y camiones municipales, controlar el incendio armando cortafuegos.
La lluvia significó alivio pero los productores se mantienen alerta porque la lluvia no fue suficiente para apagar por completo algunos troncos y en caso de continuar las altas temperaturas y el viento, las llamas pueden reactivarse.
La situación, que ya estaba siendo crítica para el sector agropecuario, se tornó más compleja con los incendios. En este caso la mayoría de las chacras afectadas son de pequeños productores, que perdieron entre dos o tres hectáreas de yerba mate, en un caso doce hectáreas de potrero además cuantiosos cultivos anuales como tabaco y forestaciones.
En diálogo con El Territorio, uno de los vecinos, Ricardo Yansat, en cuya propiedad el fuego afectó la pastura para los animales, destacó el trabajo realizado por los bomberos, la municipalidad y la fuerza de voluntad de los demás productores, que no midieron esfuerzos en la lucha contra el fuego. “No tenemos un número exacto de lo afectado en cada chacra, fue enorme la pérdida, vamos a tener un año muy difícil, son entre 25 a 30 lotes de pequeños productores”, indicó.
Los vecinos destacaron además, la importancia de contar con camiones en buen estado, que en esta ocasión, las reparaciones y tareas de mantenimiento realizadas por el municipio, permitió que puedan movilizarse de forma rápida con todo tipo de vehículos.
Las precipitaciones fueron de suma importancia para que en estos momentos los distintos focos de incendio que estaban activos en la zona, estén controlados.
Corresponsalía San Pedro
