Mismo suelo, otros aires

Composiciones para cine, investigación, coach para cantantes, protagonista, estudio, radio, canciones en guaraní, son parte de las labores que baraja Flor Bobadilla Oliva, en su rol de cantante, actriz, promotora de la cultura. Instalada hoy en Misiones porque... la pandemia la obliga, la virtuosa joven aprovechó a dar una master class de canto donde aseguró el foco está puesto en encontrarse.

“La idea se dispara cuando comienza la cuarentena como una cosa de darle un poco más de lugar al cuerpo porque en la anterior vida teníamos movimientos, rutinas que nos gestaban algún laburo con el cuerpo y de repente encerrados, sobre todo en Buenos Aires, me pasó que hay menos espacio. Entonces pensé en esta master class de cuatro encuentros con la voz, que es una invitación a hacerse un lugarcito para uno, en realidad”, confesó.

El año se anunciaba auspicioso en shows, con su presentación en el espectáculo de La Bomba del Tiempo en el Centro Cultural Konex, en Montevideo, en un ciclo de mujeres y el estreno radial junto a Yacaré Manso en Radio Nacional Folclórica. Pero tras esos días agitados de marzo, llegó la quietud y el parate. “En este momento tendría que estar de gira. La producción también se reducía a las ganancias que producía la gira, entonces sigo produciendo un poco más lentamente y le puse un poco de foco a esto (el taller) y la verdad que me hizo muy bien. Está teniendo una buena llegada y eso es lo más importante”, contó. Pero ya avizorando una nueva, adelantó que felizmente volverá a cantar para el público y será en su provincia.

Además, con la beca del Fondo Nacional de las Artes, también se dedicó a pulir su escritura en guaraní. “Ya hice esa escritura y le sigo dando forma y puliendo porque son canciones que todavía no fueron presentadas y tenían ganas de salir pero por lo pronto siguen guardadas hasta que podamos compartir esa otra música. Que se acerca un poco a la música nueva, a la música del mundo, o sea toca sus hilos con el folclore pero no se queda puntualmente en el folclore. Es un desafío para mí llevarlo a otros lugares, seguir haciendo música de todo el mundo”, relató acerca de su relación con el idioma ancestral y recordó que este viaje de volver a las raíces de la tierra misionera comenzó en 2015 junto a Abel Tesoriere. “El guaraní aparece de diversos modos, intento incorporarlo, tomando clases, voy dándole forma en mí, en principio, por la pronunciación y después con empezar a traducir, a componer en guaraní”, explicó.

Con esta mira incluye el lenguaje en el programa radial que lidera junto a Yacaré Manso.“Yo quiero que suene Ha’e Kuéra Ñande Kuéra y después me tiran un poco de la oreja porque lo ven más rock, pero bueno...”, entendió sobre su forma de abrazar el folclore.

Mundos que se cruzan
“También cada tanto me gusta componer para cine y cuando me dan ese lugar me parece re lindo de indagar y de jugar”, sumó. En este rol, se pueden escuchar sus acordes en Román, la última película de la también misionera Majo Staffolani y como actriz, se la ve protagonizando la ópera prima de la directora: Colmena (ambas disponibles en CineAr Play) y en una serie de microrelatos que está por estrenar Sadaic.

Combinando lo actuado y cantado es que sostiene se erige su último proyecto Solita mi alma.

“Si uno se queda siempre en lo cómodo...no hay lugar para crear, se aplasta. A mí me pasa que necesito buscar”, refirió.

Lo lúdico juega un papel funamental, no sólo porque le permite experimentar libremente sino porque es una forma innata que tiene la artista de crear. “Por suerte empecé a hacer esto de muy chiquita, entonces está ligado al juego. No se me tiene que ir la mano con el juego porque es mi trabajo, pero, si no estoy creando ¡estamos fritos!”, contempló. “Por más que no siempre esté componiendo, estoy componiendo siempre mis versiones haciendo arreglos, en las clases también. Le das forma a los conceptos, descubrís, le sacás la piel vieja y empezás a buscar esta combinación de: ‘de dónde venimos’ con lo que nos convoca, lo que queremos decir, poner en palabras”, resumió sobre sus distintos roles.

Anticipando su vuelta al escenario después de ocho meses y sacando la piel vieja de este año cerró: “Es lindo volver al lugar de uno porque se encuentra con otro panorama. El paisaje es el mismo, la postal es la misma, pero siempre hay un halo nuevo”.