Detienen a 2 hermanos por estafas de más de $6 millones

Dos jóvenes, hijos de un conocido pastor de Oberá, fueron detenidos el último miércoles junto a dos presuntos cómplices sospechados de perpetrar una millonaria estafa con cheques falsos mediante los cuales adquirieron electrodomésticos y herramientas por un total de 6.860.911,18 pesos.

Además de los citados arrestos y de recuperar parte de los elementos malhabidos, personal de la Unidad Regional II de Policía procedió al secuestro de un Toyota Corolla con pedido de secuestro por un robo registrado en la provincia de Buenos Aires.

Asimismo, dieron con tres hojas de cheques que a simple vista serían apócrifos, dos pertenecientes al banco BBVA Francés y el restante al banco Santander Río, según precisaron fuentes de la pesquisa.

Los allanamientos y detenciones fueron ordenados por la jueza Correccional y de Menores de Oberá, Adriana Zajaczkowski,  quien en la actualidad actúa como subrogante del Juzgado de Instrucción Uno.

En tanto, los sospechosos fueron identificados como Dhyeferson D. S. (23) y Dyonathan “Yoni” D. S. (26) -hermanos y propietarios de una casa de empeño ubicada sobre avenida Libertad de la Capital del Monte-, Sebastián W. (33) y Javier Antonio C. (41).

Con relación a los hijos del pastor, los investigadores mencionaron que poseen antecedentes por hechos similares.

Incluso, precisaron que el mayor estuvo detenido en el marco de la investigación por el hurto de una camioneta de la Cooperativa Eléctrica Limitada de Oberá (Celo), hecho perpetrado en enero pasado.

Yoni D. S. también estuvo en el radar de los investigadores en febrero, luego del robo en un departamento del mismo complejo que habitaba, sobre calle Salto Golondrina, circunstancia en que los inquilinos del primero estaban de vacaciones en Brasil.   

La maniobra

Con relación a la millonaria estafa con cheques, la pesquisa inició el pasado 9 de noviembre tras la denuncia de Carlos H. (31), propietario de una empresa dedicada a la venta de materiales industriales ubicada en avenida Libertad, quien en primera instancia apuntó sus sospechas sobre la persona que le entregó los valores falsos.

Mencionó que días antes, el propietario de una ferretería céntrica realizó compras de electrodomésticos y herramientas por la suma de 6.860.911,18 y abonó con cheques de distintas firmas y entidades bancarias.

Si bien a simple vista los valores eran originales, enseguida el empresario constató que los mismos eran adulterados. 

Con esa pista inicial los investigadores lograron la demora de Mauricio K. (26), quien a su vez refirió que en las últimas dos semanas de octubre y principios de noviembre varios de sus clientes realizaron compras y abonaron con cheques, algunos de los cuales luego utilizó para pagarle a uno de sus proveedores, Carlos H.

Mauricio K. aseguró que hasta entonces no se había dado cuenta de que eran apócrifos, de lo que se enteró ante el reclamo de su proveedor.

También aportó elementos que permitieron enfocar la pesquisa hacia los ahora detenidos, quienes habrían entregado los cheques para adquirir varias herramientas, equipos de aire acondicionado y televisores Smart, entre otros electrodomésticos.

En consecuencia, el miércoles por la tarde personal de diferentes dependencias de la UR II procedió al allanamiento de cinco domicilios y la casa de empeño de avenida Libertad al 400, lo que posibilitó recuperar varios de los elementos malhabidos.

Se trata de tres aires acondicionados Split, un rotomartillo, un esmerilador angular, dos taladros percutores, una amoladora, una lijadora de banda, una bomba de agua, una aspiradora y dos ventiladores de pie.

Auto robado

Si bien varios de los elementos secuestrados se encontraban para la venta en la vidriera de la casa de empeños, la mayoría de los electrodomésticos ya habían sido instalados en las viviendas de los diferentes implicados.

Así, los vecinos se vieron sorprendidos cuando efectivos policiales procedieron a desinstalar los Split de las respectivas residencias. 

En tanto, la situación de “Yoni” D. S. parece aún más complicada, ya que el mismo se movilizaba en un Toyota Corolla, dominio colocado KOA 709, con pedido de secuestro por robo en la provincia de Buenos Aires.

Personal de la División Verificación de Automotores detectó que el rodado presentaba adulteraciones en número de chasis y motor, por lo cual consultaron con la base de datos y constataron la citada irregularidad.

Los sospechosos fueron examinados por el médico policial en turno y quedaron alojados en diferentes dependencias la UR II. Preventivamente, la causa fue caratulada como estafa.

Por otra parte, además de los elementos que fueron recuperados en los sucesivos allanamientos, mucha de la mercadería adquirida con los cheques falsos ya habría sido  comercializada por los delincuentes, lo que implica un grave perjuicio económico para los damnificados. 

Antecedente

El pasado 26 de enero, la opinión pública obereña se vio sorprendida con el hurto de una camioneta Toyota Hilux propiedad de la Celo, que desapareció de la planta de agua potable del Kilómetro 10 de la ex ruta nacional 14, límite con Campo Ramón.

Desde un primer momento se sospechó de la participación de un empleado infiel para perpetrar el ilícito. Por ejemplo, si bien el hecho fue detectado en horas del mediodía, recién a las 17 fue denunciado ante la Seccional Segunda, con jurisdicción en la zona.

Además, al momento de su desaparición el rodado estaba estacionado en el lugar habitual y con las llaves puestas, detalle que no era desconocido para los malvivientes. En el lugar tampoco había cámaras seguridad instaladas.

Las pesquisas posteriores determinaron que la Hilux fue trasladada a la casa de un chapista en el Barrio 50 Viviendas, donde retiraron el ploteado identificatorio.

Luego habría sido trasladada hasta Bernardo de Irigoyen escoltada por otros dos vehículos. El propietario del taller y el conductor de uno de los coches fueron detenidos, al igual que el entregador, que resultó ser empleado de la Celo.

El testimonio de vecinos del taller fue clave para dar con las primeras pistas, como así también las cámaras de vigilancia que se hallan ubicadas en diferentes puntos de la ciudad de Oberá y localidades vecinas.

De esta forma, se estableció que “Yoni” D. S. -uno de los hijos del pastor- condujo uno de los dos coches que escoltó la camioneta hasta la localidad en la frontera con Brasil. En tanto, en el taller dieron con restos del ploteado que coincidía con la Celo.

Más allá de las pruebas recolectadas oportunamente los tres sospechosos fueron liberados. En cambio, la camioneta nunca fue recuperada.