¡Estás despedido!

En ‘El aprendiz’, antes de ser presidente de Estados Unidos, Donald Trump expulsaba de la competencia a los competidores del reality, con la frase “estás despedido”. Por entonces -el programa se emitió desde 2004 hasta 2007-, la nueva estrella de los reality shows era un conductor implacable contra los principiantes. Tanta fama televisiva ayudaría al magnate norteamericano a llegar a la presidencia de los Estados Unidos, donde también él resultó ser un aprendiz, ya que carecía de una carrera política. Ya se sabe que el mundo es una rueda y quienes ahora podrían utilizar con tranquilidad la frase “estás despedido” son los votantes de Estados Unidos, porque a Donald Trump se le negó un segundo mandato y se eligió ayer a Joe Biden como el 46° presidente de los Estados Unidos. De esta manera comienza a concluir la gestión de Trump, que había llegado sin experiencia política al mando del país más importante del mundo y ahora los ciudadanos volvieron a volcarse hacia un experimentado político, para quien la tercera fue la vencida, al haberse postulado otras dos veces en las internas demócratas para presidente.

La victoria en Pensilvania elevó la votación en el Colegio Electoral de Biden, con gran diferencia al mínimo requerido para llegar a la Casa Blanca. En Estados Unidos hay algunas particularidades a tener en cuenta. Para ganar la presidencia no es necesario ganar la mayor parte de los votos sino conseguir al menos 270 de los 538 votos del colegio electoral estadounidense. Hasta ayer Biden conseguía 290 electores, es decir, ya superaba el mínimo requerido, en tanto Trump estaba con 214 votos conseguidos.

De esta manera, el resultado electoral proyectado en Estados Unidos comenzó a conocerse al ingresar el quinto día, desde aquel supermartes en el que concluyó la votación, con una extraordinaria participación. Los dos candidatos más votados se presentaron durante la semana como ganadores. Hasta puede suceder -de darse el caso- que Trump, como lo hizo hasta ayer, no reconozca la victoria de Biden y judicialice los resultados en los estados más peleados.

Lo concreto es que la pelea puede extenderse hasta el 20 de enero como máximo entre estos dos finalistas, que tienen ideologías muy opuestas. Ese día se espera la asunción de Biden, que llega al máximo poder a los 78 años de edad. Quien fuera elegido seis veces al Senado de los Estados Unidos y el cuarto senador de más antigüedad, representa al Partido Demócrata, que está asociado al liberalismo en el sentido de que defiende la intervención del Estado o cuestiones tan esenciales como, en este momento de pandemia, una salud universal y educación accesible, o como ocurre en países como la Argentina, promover más programas sociales para contener a sus ciudadanos en este momento tan complejo por el Covid-19.

La última aspirante a la Casa Blanca fue Hillary Clinton, que perdió ante Trump, quien representa al Partido Republicano, considerado más conservador en su pensamiento al sostener la limitación del ámbito del Estado, el derecho a tener armas, la apuesta a un mercado libre, la desregulación de los sindicatos y las muy conocidas restricciones a cuestiones como la inmigración. La polarización se da hasta en el uso de barbijos, que defienden los demócratas y rechazan los republicanos.

Estas elecciones además dejaron al desnudo que la muy promocionada mejor democracia del mundo terminó tambaleándose durante el recuento de los votos. De hecho, todo lo que se esperaba se cumplió. Biden, como candidato opositor, había realizado campaña a favor del voto por correo, como estrategia electoral en sintonía con la prevención de contagios por coronavirus. Por el contrario, Trump siempre minimizó la pandemia y arengaba a sus simpatizantes de acercarse a los lugares de votación.

En el recuento del 3 de noviembre, el republicano picaba adelante en los estados clave como Michigan, Pensilvania, Wisconsin y Georgia. Pero a medida que empezaron a contarse los votos que fueron emitidos por correo, las diferencias se fueron achicando y todo hacía prever que las proyecciones terminarían dándole el triunfo al demócrata en esos estados y con ello superar el número mágico de electores para hacerse de la presidencia de Estados Unidos.

Las denuncias de fraude y acciones para parar los conteos de parte de Trump se iniciaron a la madrugada del miércoles. La escalada de la tensión tuvo en vilo a todos. Mientras, en el campamento demócrata pedían paciencia y contar los votos.

Es oportuno destacar la enorme diferencia con el sistema electoral argentino, que a todas luces muestra mayor control, transparencia y certidumbre a la ciudadanía en el escrutinio. El proceso argentino tiene sus puntales al estar unificado el escrutinio y el centro de cómputos, se realiza un domingo, es obligatorio y en boleta papel. En Estados Unidos no hay un escrutinio provisorio nacional, allá cada estado tiene el poder en el recuento y comunica quién ganó el distrito y con ello, los electores en representación del Colegio Electoral que define el próximo presidente. Las cadenas de los grandes medios estadounidenses como CBS, Fox News, AP y CNN son las que se apoderan de dar los resultados nacionales, hasta tanto terminen los conteos totales en cada distrito y se realice en el colegio electoral.

Pero, como se señaló, Trump aún no reconocía la derrota y seguramente pedirá el recuento de votos en aquellos estados que la diferencia fue inferior a 1 punto. Hay un chiste que circula en las redes de autor desconocido que define la situación de estos años. Dice que Trump fue electo presidente el 2016 por WhatsApp, gobernó cuatro años por Twitter y fue derrotado por correo. El Correo en Estados Unidos es una valiosa institución considerada por los ciudadanos.

Expectativas en Latinoamérica

También hay diferentes expectativas sobre la relación que tendría Estados Unidos con Latinoamérica con un nuevo gobierno. Analistas internacionales recuerdan que, en sus casi cuatro años de mandato, Trump no realizó una gira por esta región. Se recuerda sólo aquel viaje a Buenos Aires con motivo de la cumbre del G-20, aunque su agenda estuvo enfocada en seguridad relacionada al narcotráfico y cuestiones migratorias. En esto último, en nada se parece tampoco a su antecesor, Barack Obama, quien había realizado 15 viajes a esta parte de la región, incluida Cuba. Por lo tanto, con Trump el escenario futuro no sería distinto.

De Biden, quien fuera vicepresidente de Obama en sus dos mandatos, se espera una mayor atención hacia esta región para evitar las migraciones a gran escala o la posibilidad de poner más atención al medioambiente.

De esta manera, en el tablero internacional, no era lo mismo para la Argentina que ganara uno u otro. Como se le escapó al ministro de Economía, Martín Guzmán, en una entrevista radial, si se ratifica el triunfo de Biden, el más perjudicado en la región sería Jair Bolsonaro. Para el resto de Latinoamérica comenzaría una nueva etapa. Apenas conocido el resultado, el presidente Alberto Fernández felicitó al pueblo de Estados Unidos por el récord de participación en las urnas y elevó su saludo a Biden como próximo presidente de Estados Unidos, y a Kamala Harris, quien además se convertirá en la primera mujer  que ocupe la vicepresidencia de ese país.

Señales alentadoras

A propósito de Alberto Fernández, antes de concluir la semana resolvió dar un paso más pensando en la nueva normalidad en el país. Anunció que el Área Metropolitana de Buenos Aires (Amba) deja el aislamiento social para pasar al distanciamiento, aplicado desde hace tiempo a provincias como Misiones. De esta manera, quedarán departamentos de diez provincias en la etapa de aislamiento, hasta el 29 de noviembre, por haberse registrado aumento o multiplicidad de casos de coronavirus.

Este nuevo paso se da por haberse amesetado a nivel general la cantidad de casos, lo cual trae un poco de tranquilidad. Advirtió que el problema no se superó y pidió no relajarse al anunciar de manera oficial que se están haciendo gestiones con todos los laboratorios, para conseguir una vacuna. La gran noticia sobre el acuerdo con el gobierno ruso sobre la vacuna Sputnik V trajo un poco de horizonte para el camino a la vuelta a la normalidad.

El viernes por la mañana se comunicaron Alberto Fernández y Vladimir Putin para ultimar los detalles del envió de 25 millones de dosis para la Argentina, una vez que termine la fase 3 de los estudios de factibilidad de la vacuna rusa.

Además, desde el Ministerio de Salud dejaron bien en claro que el gobierno sigue negociando con otros laboratorios que están avanzados en sus investigaciones como AstraZeneca. Que ayer por la tarde confirmo que le venderá 25 millones de dosis al país. La idea es tener varios proveedores para que la campaña de vacunación llegue a la mayoría de los argentinos.

Con el horizonte de la vacuna, la economía tiene más posibilidades de poder despegar definitivamente. De hecho, en ese camino iría además la idea del gobierno de dar un fuerte impulso a la producción y con ello, a la economía. En la semana, el ministro Guzmán afirmó que la Argentina comienza a registrar una recuperación económica, tras las consecuencias provocadas por la pandemia del coronavirus.

Según afirmó, se construye un puente de estabilidad para los próximos 90 días, mientras se trabaja en un programa de estabilización macroeconómica plurianual a ser enviado al Congreso de la Nación.

Como se venía advirtiendo, algunos indicadores muestran síntomas positivos de recuperación. El Indec publicó el crecimiento interanual del 3,4% en la industria. O sea, este septiembre, en plena pandemia, fue superior a septiembre de 2019 que gobernaba Mauricio Macri.

El precio de la soja sigue en aumento, el consumo energético con mayores niveles que en marzo de este año y la construcción en franco aumento. En esta buena semana para el gobierno argentino, se suma la estabilidad cambiaria, en donde se logró calmar al mercado que empujaba una devaluación.

El dólar blue acumuló una baja de 38 pesos -cerrando en 157 pesos- desde su récord de 195 pesos.

Usurpación, un problema a resolver

La propiedad es inviolable y ningún habitante de la Nación puede ser privado de ella, sino en virtud de sentencia fundada en ley. Es lo que determina la Constitución Nacional. Es decir, desde el sector público, debe protegerse este derecho además de velar por la explotación de los recursos privados y los medios de producción en un marco de legalidad.

En otros términos, el propietario de un bien como el caso de un terreno o una chacra puede disponer a voluntad sobre los fines que dará a ese espacio de tierra. Sin embargo, van contra este derecho algunos sectores sociales que estarían promoviendo la ocupación irregular y de manera masiva. Ello no venía sucediendo en Misiones.

Todo indica que el fenómeno se está produciendo a partir de la promoción de algunos sectores sociales y hasta políticos. La situación puso en alerta, con toda razón, a los propietarios de terrenos y chacras a lo largo de toda la provincia. Hasta se produjo un desalojo de una antigua propietaria en Itacaruaré, que tras hacerse público tal situación, se retrocedió en la decisión.

Es que la propiedad privada se extiende más allá del fallecimiento del poseedor, porque como lo determina la legislación, queda en manos de los herederos.

Los promotores de la ocupación de tierras sostienen el derecho de la vivienda, que también es verdad, aunque no es intrusando la manera de resolver tal situación, porque como se dijo cometen un delito al violentar una propiedad privada. El tema está en pleno debate en Misiones y desde el gobierno afirman que se están ocupando de los que verdaderamente tienen necesidad extrema de contar con un lugar para habitar.

Por lo tanto, resulta un claro ilícito la incitación a apoderarse de tierras de manera particular o masiva como estarían promoviendo algunos sectores sociales. Se espera que la justicia actúe con la inmediatez y rigurosidad que se requiere en estas situaciones junto a las fuerzas de seguridad para evitar intrusiones.

Semana clave para Misiones

La que comenzará será una semana clave para Misiones. Toda la mirada de la producción, la economía y política estará puesta en el Senado de la Nación donde se espera la aprobación del proyecto de presupuesto 2021 y con ello, la transferencia automática del Fondo Especial del Tabaco y la creación de una zona aduanera especial para la Provincia. Estos beneficios fueron incluidos en Diputados y quedaron firme en el Senado, producto de un proyecto gestado desde la provincia que no tuvo ninguna mezquindad en ampliar los beneficios a casi una veintena de provincias.

Es la manera correcta de gobernar, desde donde se esperan avances, acuerdos y no imponer obstáculos o promover la grieta, que en Misiones se rechaza y no existe. De hecho, afirman que desde la conducción del partido renovador, lo que se promueve es el diálogo y los consensos.

Transitando el penúltimo mes del año, recomiendan desde ese espacio a todos los sectores a cuidar el actual rumbo y el presente que tiene Misiones, que posibilita proyectar con tranquilidad y en paz. Tal convivencia también se notó en la Cámara de Diputados de Misiones, donde se priorizaron aprobar leyes vinculados a ampliar los servicios de salud, cuya calidad es reconocida en el país. Como así también el manejo adecuado de la pandemia liderada por el gobernador Oscar Herrera Ahuad.

Destacan desde la administración provincial, que ello es posible por una seria y eficiente administración de los recursos que ingresan en la provincia por coparticipación y por la recaudación propia.