jueves 28 de marzo de 2024
Nubes dispersas 29.7ºc | Posadas

Santa Ana: el crimen de Víctor y una pregunta por resolver ¿por qué lo mataron?

domingo 01 de noviembre de 2020 | 18:28hs.
Policiales

Indefenso y arrodillado en medio de la noche, la vida de Víctor Márquez Dos Santos (16) se apagó por una bala de la Policía de Misiones el 24 de agosto del 2019. Por el hecho está detenido en una cárcel del Servicio Penitenciario Provincial Deibid Vergara (33), acusado de homicidio agravado por su condición de funcionario público.

Según dos pericias -una hecha por la propia Policía de Misiones y otra por Gendarmería Nacional-, la bala 9 milímetros con la que dieron muerte al joven en la localidad de Santa Ana salió de su arma reglamentaria. Además, el testimonio de Mariela Cipontino, una policía que estaba con él esa noche, lo señaló directamente como el asesino luego de una semana de investigación sin resultados positivos.

Cipontino sigue el proceso en libertad junto a Rubén Núñez (43) y Matías Acosta (31). Todos formaban parte de la patrulla dirigida por Vergara y se los señala como encubridores del crimen.

Como informó El Territorio, el caso está cerca de ser elevado a juicio, luego de que el fiscal Christian Antúnez Nerenberg solicitará unas últimas medidas que, según detallaron fuentes del caso, no demandaran mucho tiempo. Sin embargo, hay una cuestión que aún no quedó del todo clara, aunque parezca central: ¿Por qué mataron a Víctor?

Un accidente imposible de probar

A Víctor lo ejecutaron con un tiro en la cabeza y sobre Vergara hay elementos más que contundentes, ya que además de utilizar su arma en horario de trabajo, actuó frente a tres colegas a quienes luego tuvo que amenazar de muerte para que no cuenten lo que había sucedido. Desde la perspectiva de alguien que cometió un delito y busca ocultarlo, ¿cómo se explica que haya dejado tantos cabos sueltos?

Este medio consultó a varios efectivos policiales -algunos de ellos participantes de la pesquisa y otros que opinaron desde una mirada externa- e investigadores judiciales, quienes trazaron la hipótesis de que Vergara disparó el arma sin querer. Es decir, que se le escapó el tiro. Creen que su intención era asustarlo, “apretarlo” y que por eso exhibió su arma, que se terminó accionando.

Incluso un reconocido investigador que estuvo al frente de los procedimientos en Santa Ana añadió que durante las entrevistas de campo en la localidad, uno de los colegas del acusado señaló que el oficial solía mostrar e intimidar con su reglamentaria a los detenidos, en el propio patrullero o la comisaría. Incluso que los golpeaba en la cabeza con la culata. Eso, sin embargo, no se ratificó en sede judicial.

En el expediente, según detalló desde la querella el abogado Mauricio Hadad, -consultado por este medio- hay varias testimoniales, sobre todo de jóvenes, que revelan que el sospechoso siempre mostraba una actitud “patotera”, muchas veces los amenazaba con el arma, luego de detenerlos sin motivos. De todas formas el letrado fue tajante en rechazar la versión de un disparo accidental, expresando que para accionar un arma el uniformado debe realizar cuatro movimientos.

Sobre su situación procesal respecto de esta posibilidad, todo indica que es muy difícil que pueda beneficiarlo, teniendo en cuenta dos cuestiones fundamentales. Una de ellas, la más importante, es que es casi imposible de probarlo; y la otra es que por más que esto haya ocurrido así, Vergara no desconocía de que manipulando un arma frente a una persona, en medio de un operativo de detención, el resultado final era una posibilidad.

Hay que añadir que hasta ahora Vergara nunca habló en el expediente.

¿Una trama narco?

Más allá de esto, la instrucción no echó luz sobre un posible móvil del asesinato o las razones por las cuales Vergara detuvo a Víctor. A los fines de hacer justicia por un terrible asesinato, en el que para más el responsable es el Estado, los esfuerzos se concentraron en determinar quien es el reposable, ya que a posteriori eso es lo que importa y podría definir la condena.

Se sabe, mediante el análisis de los teléfonos secuestrados, que el presunto homicida le mandó un mensaje a su compañero de guardia Matías Acosta momentos antes del crimen: “Haceme el aguante que si está va a caer”, era el contenido revelado en exclusiva por El Territorio.

De los registros también surge que ambos hablaron meses antes de un Dos Santos, a quien sindicaron como una persona que vendía estupefacientes. Los mensajes se dieron, supuestamente, porque ellos tenían la intención de formar una minibrigada antinarcóticos en la localidad. Pero en ningún caso está comprobado de que se referían a la víctima.

La versión de que Víctor vendía droga en la localidad tampoco fue comprobada y se puso seriamente en duda porque surgió desde antes de que se sepa la implicancia de los policías de Santa Ana, que hasta entonces participaban activamente de la investigación.

Pero testimonios de sus amigos reconstruyeron de que Víctor solía mofarse de que estaba amenazado y de que sus “jefes” podrían hacerle daño, respecto del incumplimiento de sus funciones. Por ejemplo, si pleaneaban una salida, decía que prefería no proyectar tan lejos, que no podía asegurar que iba a estar bien para ese día.

Al respecto, quienes estuvieron al frente de la pesquisa aportaron la versión de que Deibid Vergara (33) también estaba ligado al mundo narco y lo asociaron con gente de peso en la localidad. Es decir, los presuntos jefes de la víctima. Siempre según estas voces que no aparecen en el expediente, el uniformado lo habría interceptado para cobrar - o decirle que pague- las deudas que el adolescente tenía.

Sin embargo, la Justicia podrá determinar lo que realmente sucedió, aunque hasta el momento se ha evitado avanzar sobre cuestiones de las que debería hacerse cargo el fuero federal. Lo que es incuestionable es que Víctor fue víctima de gatillo fácil y por su muerte y la de su padre, que terminó falleciendo de un infarto en su velorio, el responsable tiene que pagar.

¿Que opinión tenés sobre esta nota?


Me gusta 0%
No me gusta 0%
Me da tristeza 0%
Me da alegría 0%
Me da bronca 0%
Te puede interesar
Ultimas noticias