Investigan la desaparición de un kilo de cocaína de un depósito policial

jueves 13 de agosto de 2020 | 6:30hs.
Investigan la desaparición de un kilo de cocaína de un depósito policial
Investigan la desaparición de un kilo de cocaína de un depósito policial
Por Daniel Villamea

Por Daniel Villamea Corresponsalía Oberá

Lo que comenzó como un control de rutina, previo al proceso de incineración de la droga, determinó el faltante de poco más de un kilo de cocaína -confirmado oficialmente- que se hallaba en resguardo de la Seccional Tercera de Oberá y bajo la estricta responsabilidad de las máximas autoridades de la División Toxicomanía de la Unidad Regional II.

Se trata de un escándalo de proporciones que podría derivar en mayores implicancias, habida cuenta la presunta responsabilidad de los funcionarios públicos que estaban a cargo del depósito de decomisos de estupefacientes.

Si bien los detalles del caso se manejan con sumo hermetismo para no comprometer las pesquisas, El Territorio averiguó que la fiscal federal Oberá, Viviana Vallejos, solicitó la intervención de personal de Gendarmería Nacional Argentina (GNA) con el objetivo de garantizar la transparencia de las pericias correspondientes.

Ayer por la tarde los gendarmes tomaron las primeras declaraciones al personal policial de las dependencias implicadas.

En tanto, desde la fuerza provincial informaron que la Jefatura de la Policía de Misiones, a través de una investigación de la Dirección de Asuntos Internos, detectó el faltante de poco más de un kilo de cocaína que se hallaba en el depósito de la Seccional Tercera, por lo que inmediatamente se dio aviso al Juzgado Federal de Oberá.

En consecuencia, en la víspera personal judicial se presentó en la citada dependencia y constató el faltante, aunque hasta el momento no trascendió el peso exacto, para lo que se realizarán tareas complementarias de rigor.

En paralelo a las medidas que adopte el Juzgado Federal, a cargo de Alejandro Gallandat Luzuriaga, una comisión de Asuntos Internos permanecerá en Oberá para instruir un sumario administrativo con el fin de determinar las responsabilidades que pudieran corresponder al personal policial.

Acceso no forzado
En diálogo con este diario, ayer autoridades judiciales se excusaron de brindar mayores detalles del caso para no interferir en la investigación en curso, al menos hasta contar con mayores elementos de prueba.

Lo que sí se confirmó es que el juez Gallandat avaló el pedido del ministerio fiscal para la convocatoria de personal de GNA en las pesquisas de rigor que se iniciaron en la víspera.

“Ya que se trata de una dependencia de la Policía Provincial, lo más sano es que intervenga otra fuerza”, remarcaron.

Con relación a la investigación, fuentes de la Policía precisaron que el faltante de droga fue constatado al llevar a cabo un inventario previo a la incineración, proceso que se realiza de manera periódica.

Al respecto, explicaron que los estupefacientes decomisados en el ámbito de la Unidad Regional II se resguardan en un depósito ubicado el predio de la Seccional Tercera, aunque la custodia depende exclusivamente de la División Toxicomanía.

Otro dato que sería clave en la investigación del hecho indica que el acceso al depósito no habría sido forzado, lo que pone el foco sobre el personal de Toxicomanía, más precisamente sobre los dos oficiales que disponían de copias de la llave del lugar.

En ese sentido, fuentes del caso indicaron que por protocolo de seguridad interno, sólo el subcomisario Carlos Ariel L. y el oficial auxiliar Hugo Ariel B., jefe y segundo al mando, respectivamente, eran quienes tenían acceso directo al depósito de decomisos de estupefacientes.

De todas formas, si bien los citados eran los únicos que contaban con llaves del lugar, tampoco se puede descartar mayores implicancias en cuanto a la responsabilidad o complicidad en el hecho.

Inédito y grave
Al cierre de esta edición, personal de GNA continuaba con las diligencias y trámites ordenados por el Juzgado Federal de Oberá.

Por el volumen y tipo de la droga desaparecida, fuentes del caso reconocieron que se trata de un hecho inédito que golpeó muy fuerte en los cimientos de la Unidad Regional II, actualmente al mando del comisario inspector Juan Rafael Kubiszen.

Según trascendió, en las próximas horas el magistrado a cargo ordenaría una serie de allanamientos para tratar de dar con elementos que permitan avanzar en la investigación del caso. Tampoco se descartan detenciones ni relevos de cargos de mando para garantizar el proceso.

Para ello fue importante la declaración de varios uniformados que cumplen tareas en la Seccional Tercera, como también del personal subalterno de la División Toxicomanía.

Consultado por este matutino, por el momento Kubiszen se excusó de brindar detalles del caso, aunque reconoció la gravedad del hecho.

En tanto, fuentes de la fuerza recordaron que también en 2017 el Juzgado Federal de Oberá le dio intervención a GNA en el marco de la investigación por la desaparición de varios kilos de marihuana del mismo depósito, una causa de la cual hasta el momento no se conocieron mayores detalles.

Con relación al origen del estupefaciente, se presume que el faltante sería parte de un lote decomisado el 28 de septiembre del año pasado en un procedimiento que se concretó en la localidad de Campo Viera.

En aquella ocasión un hombre de 50 años fue detenido con varios panes de cocaína de máxima pureza, secuestro que arrojó un peso total de 4,213 kilogramos. La mercadería fue valuada en más de cinco millones de pesos.

Luego la droga fue dispuesta en el depósito dispuesto en dependencias de la Seccional Tercera, pero bajo la estricta responsabilidad de la División Toxicomanía.