"Al llegar a casa me vuela la cabeza por donde anduve"

domingo 29 de marzo de 2020 | 5:00hs.
"Al llegar a casa me vuela la cabeza por donde anduve"
"Al llegar a casa me vuela la cabeza por donde anduve"
Marcelo Meza es un camionero de Posadas que sigue cumpliendo tareas en medio de la pandemia. Es uno de los sectores que el gobierno nacional intervino para resolver la situación de estos trabajadores del volante en medio de la cuarentena. También fue una de las actividades que recibió el reconocimiento del presidente de la Nación, Alberto Fernández, por el trabajo que realiza para garantizar la distribución de alimentos y combustibles. Justamente el transporte de cargas resulta fundamental.
Pero, al resolverse la medida de aislamiento, los choferes fueron quienes más sufrieron las consecuencias. Mientras seguían cumpliendo sus habituales tareas, comenzaron a cerrarse todas las puertas hasta para acceder a servicios básicos como ir al baño o proveerse de mercaderías. Ello sucedió a lo largo del país, hasta que tanto el Ministerio de Transporte de la Nación como las cámaras que los representan y la cadena de estaciones de servicios pertenecientes a YPF celebraron un convenio para permitirles acceder nuevamente a todos los servicios.
De esta manera, según Meza, debieron sobrellevar muchas situaciones, mientras volvían a habilitarse las 200 estaciones que dependen de la petrolera del país.
 “Nosotros estamos teniendo ese problema ahora, que nos cierran las puertas en todos lados, hasta en las estaciones de servicio”, dijo en referencia a una problemática que luego terminó resolviéndose. 
“Necesitamos alimentarnos, un baño; sería lindo que cada provincia haga hincapié en eso. Porque eso formaría parte de nuestra propia seguridad, nosotros también tenemos hijos y pensamos en nuestras familias”, había indicado Meza.
Fue al repasar todos los desafíos que deben sortear en forma diaria en la ruta, como los controles, que se volvieron más estrictos. Es que en la salida de cada provincia fueron aplicándose diversos protocolos de actuación y control.
En Misiones, a los trabajadores del volante se les requiere la hoja de ruta además de controlarles el estado de salud para quienes ingresan a la provincia. 
A su vez, destacó Meza que se sienten respetados porque son los que trasladan mercaderías esenciales para la comunidad y la seguridad en la ruta es fundamental, más allá de todos los problemas que puedan tener. Por ejemplo, por ahora sólo pueden transportar alimentos, “pero no estamos pudiendo llevar otros productos como la madera”.

Mucha incertidumbre
Afirmó que en la ruta viven en un mundo de incertidumbre, tanto al salir de su hogar como al regresar. Por un lado, en el aspecto laboral, desde las propias empresas no están del todo seguros de si la mercadería enviada podrá sortear todos los controles, básicamente ante las diversas normativas impuestas en medio de la actual pandemia. 
Por eso, este conductor del volante de Posadas dice entender a quienes están exceptuados y en parte también arriesgando sus vidas ante la presencia del coronavirus.
Al destacar en ese sentido a quienes diariamente concurren a cumplir sus tareas, menciona la situación, por ejemplo, de los empleados de los supermercados o de las farmacia. Pero estos “una vez finalizadas sus tareas, vuelven sus domicilios, donde tienen dónde ir a comer, ir al baño o asearse”, destacó.  
Allí Meza planteó sus temores ante la amenaza del Covid-19. 
Relató que “al llegar e ingresar a  casa, siento que me vuela la cabeza al pensar en ese momento por los lugares que anduve”.
Acostumbrando a lidiar con todo tipo de situaciones en la ruta, esta vez admite que siente “impotencia” al no estar seguro “por todo lo que se pasa y se vive en el camino”.  
Si bien insiste que esto no les sucede sólo a los camioneros, ellos lo viven día a día y lo sufren en carne propia. Pero más allá, de este momento de emergencia sanitaria, no se detiene y continúa prestando un servicio básico y esencial para los ciudadanos. 

Volvió de Brasil y comienza la cuarentena lejos de su casa

Trevizán es chofer y empresario.
La vida de aquellos que deben seguir trabajando en plena cuarentena se vuelve cada vez más compleja. Entre la preocupación y los cuidados, continúan cumpliendo al pie de la letra esas tareas que demanda la sociedad. 
Un caso es el de Fabián Trevizán, oriundo de Bernardo de Irigoyen y de 52 años. Es chofer y pequeño empresario del transporte de cargas nacional e internacional.
En uno de sus tantos viajes y tras su regreso al territorio nacional desde Brasil, en la aduana de cargas de Bernardo de Irigoyen dialogó con El Territorio y contó su experiencia en estos días complicados por la pandemia mundial.
“Hoy estoy volviendo al país desde Brasil. Tengo una pequeña empresa de camiones y cada tanto también ando en la ruta porque empecé como chofer a los 18 años, es algo que me gusta mucho y bueno acá estamos peleándola, tratando de seguir hasta donde se pueda y colaborando con la sociedad”.
El camionero manifestó que “en Brasil se ve gente con mucho miedo y te discrimina, pero por el otro lado tenés gente muy buena al costado de la ruta”. 
Afirmó que se está preparando para lo que viene: “Puede ser mejor o peor y tenemos que estar preparados, porque de esta situación tenemos que salir entre todos”. 
“El transporte es algo que no podemos parar, sobre todo si trasportamos víveres como en mi caso”. 
Sobre el regreso al país, Trevizán aseguró que será responsable y no volverá a la casa familiar, “por lo menos hasta que se estabilice la situación y yo cumpla mi cuarentena”. 
“Por más que me duela en el alma por mi esposa, con quien llevo varios años de matrimonio y con quien tengo un hijo ya mayor de edad que me ayuda en la empresa, acá hay que ser responsable por el mismo amor a la familia y la gente que queremos”, sostuvo.