Nación ubica a Misiones entre las zonas endémicas de hantavirus

lunes 28 de enero de 2019 | 6:00hs.
Mayor demanda: operativo de entrega gratuita de cebo a los vecinos de Posadas.
Mayor demanda: operativo de entrega gratuita de cebo a los vecinos de Posadas.
Griselda Acuña

Por Griselda Acuña interior@elterritorio.com.ar

Los casos fatales y, sobre todo, el brote en Epuyén, provincia de Chubut, pusieron al hantavirus en la agenda sanitaria nacional. La enfermedad transmitida por el ratón colilargo despertó temor en toda la geografía argentina y Misiones no es la excepción.
Más teniendo en cuenta que la provincia se encuentra entre las zonas endémicas para hantavirus, lo cual significa que independientemente a la aparición de casos, la patología siempre estará presente en este rincón del país. “Se identificaron cuatro regiones endémicas: Norte (Salta, Jujuy), Centro (Buenos Aires, Santa Fe, y Entre Ríos), Noreste (Misiones) y Sur (Neuquén, Río Negro y Chubut). Las provincias de Buenos Aires, Salta y Jujuy son históricamente las que reportaron la mayor frecuencia de casos”, según establece el Boletín Integrado de Vigilancia Epidemiológica en su apartado Seguimiento de la situación nacional de hantavirosis.
El parte publicado recientemente por la Secretaría de Salud de la Nación corresponde al 23 de enero, y señala además que en 2018 Misiones tuvo un caso confirmado de hantavirus, mientras que en 2017 se registraron tres notificaciones de casos sospechosos pero sin confirmación definitiva.
Por otro lado, días atrás el ministro Walter Villalba confirmó que fueron remitidos al Instituto Malbrán de Buenos Aires cuatro muestras de pacientes con sospecha de hantavirus. Aclaró que si bien la posibilidad clínica es muy baja, fueron enviados por estricto protocolo.
En ese contexto, los técnicos de la Dirección de Saneamiento Ambiental, dependiente de la cartera sanitaria provincial, llevan adelante una tarea de concientización haciendo hincapié en la importancia de que la población mantenga los espacios limpios.
“La enfermedad surge a partir de que el vector es una rata, y que en general buscan comida, por lo que no se deben dejar los alimentos expuestos, que lo que consuma la rata este fuera de la vivienda, mediante la orina o materia fecal que al secarse se inhalan, y de esta manera se pueden contagiar las personas, y luego de un tiempo de incubación comienzan los síntomas que por lo general son respiratorios, por lo que deben recurrir al médico, no automedicarse y seguir las indicaciones del profesional”.
El hantavirus, a diferencia de la leptospirosis, tiene como reservorio a ratones de zonas silvestres, no de ciudad.

Demanda de cebo para ratas
Si bien en Misiones no hay registros de humanos infectados con el virus del hanta en este último período, las alertas llegan por los casos de leptospirosis en estudio en Oberá, y el vecino de San Pedro que debió ser tratado en el Samic de Eldorado.
Las consultas y pedidos por los cebos para eliminar ratas que la Municipalidad de Posadas entrega de manera gratuita en cada Centro de Integración Territorial (CIT) vienen en aumento desde diciembre pasado.
“La demanda se incrementó en las últimas semanas, sobre todo por los casos de hantavirus en el Sur del país, no tanto por la leptospirosis”, contó.
En lo que va de enero ya se entregaron casi 100 kilos de cebo mientras que en todo 2018 se distribuyeron 1.000 kilos.


Hantavirus: zoonosis emergente

“La enfermedad por hantavirus es una zoonosis emergente producida por virus ARN pertenecientes a la familia Bunyaviridae.
Los virus tienen una distribución mundial y producen en los seres humanos dos formas clínicas graves: la Fiebre Hemorrágica con Síndrome Renal en Asia y Europa y el Síndrome Cardiopulmonar por Hantavirus en América”, según especifica el parte epidemiológico nacional. “Son transmitidos al ser humano por roedores silvestres, reservorios naturales, que presentan una infección crónica asintomática y eliminan el virus a través de la orina, saliva y excretas”.
Los hantavirus se transmiten fundamentalmente por inhalación de aerosoles cargados de partículas virales provenientes de las heces, orina y saliva de roedores infectados. Otras posibles vías de transmisión son: contacto con excrementos o secreciones de ratones infectados con las mucosas conjuntival, nasal o bucal,
o mordedura del roedor infectado. La transmisión al humano generalmente ocurre al introducirse en el hábitat de los roedores
en zonas suburbanas y ambientes rurales, principalmente en los peridomicilios y durante el desarrollo de actividades laborales, recreativas, o en lugares cerrados como galpones o depósitos infestados por roedores.
Los síntomas se presentan dos a cuatro semanas después de la exposición inicial al virus. Sin embargo, los síntomas podrían iniciar en una semana o tardíamente hasta 6 semanas después de la exposición La tasa de letalidad de los casos puede alcanzar 35 a 50%.

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Casos en análisis .
Fueron remitidas al Instituto Malbrán de Buenos Aires muestras de pacientes de Misiones. Si bien la posibilidad clínica para dar positivo al virus del hanta es baja, se siguió el protocolo.