La revolución del conocimiento

El dato no es menor, y las consecuencias a futuro es de pronóstico reservado. Más de 5.000 estudiantes, la mayoría del interior de la provincia, perderían los aportes que reciben del Estado nacional por intermedio de las becas Progresar, un dinero que, en la mayoría de los casos, es clave para llevar a buen puerto una carrera universitaria. La traba en principio aparece como una cuestión técnica, pero subyace la sospecha de la quita definitiva. Los estudiantes de institutos públicos de gestión privada no están incluidos en la plataforma, por lo que directamente no pueden iniciar el trámite.

En Misiones, hay una población de casi 100.000 jóvenes de 18 a 24 años. El año pasado, 44.197 estudiantes accedieron a la cobertura. Este año, unos 5.500 estudiantes que asisten a establecimientos públicos de gestión privada (en muchas localidades son las únicas instituciones de nivel terciario que existen) están afuera de la plataforma, explicó Emilia Lunge, la coordinadora del programa. Ante esta situación, las autoridades provinciales ya elevaron un reclamo a la Nación (pág. 3).

“La verdadera revolución es la del conocimiento”, suele decir el especialista en neurociencias y rector de la Universidad Favaloro, Facundo Manes. Y cita este ejemplo: en 1970, Ghana y la República de Corea tenían un nivel similar de ingreso per cápita. Sin embargo, en 2013, el ingreso per cápita de Corea fue catorce veces mayor que el de Ghana. Esa diferencia se debió fundamentalmente a la inversión sostenida en el uso y organización del conocimiento.” Corea, de hecho, es uno de los países que más invierte en educación, gasto público por estudiante. 

Un camino con historia en este país (que siempre fue elogiado por su modelo educativo) y que parece que en los últimos años se insiste en desandar.