Cuando los ojos tienen “patas de gallo”

El envejecimiento es un proceso natural que frecuentemente se traduce en piel fláccida, arrugas faciales, músculos debilitados y acúmulos de grasa.
lunes 27 de julio de 2009 | 16:22hs.
El envejecimiento es un proceso natural que frecuentemente se traduce en piel fláccida, arrugas faciales, músculos debilitados y acúmulos de grasa. 
La pérdida progresiva del aspecto juvenil o del atractivo físico puede originar trastornos emocionales tanto por motivos estéticos como psicológicos.
 La cultura actual promueve la sensación de buena salud lo que conduce a una proporción cada vez más amplia de la población a preocuparse por seguir dietas, hacer ejercicio y adoptar pautas vitales acordes con los principios de salud y belleza.
 Muchas personas pretenden que su aspecto sea un fiel reflejo de su estilo de vida y de sus expectativas. El aspecto proporcionado pon el envejecimiento facial suele transmitir una expresión de cansancio y tristeza así como un cierto grado de inexpresividad.
 Todo esto es lo que el paciente pretende corregir y demanda de su cirujano plástico.
En cuanto a lo que comúnmente nos molesta mucho y son las arrugas periorbitales, más conocidas como patas de gallo, hay varias formas de tratarlas, una de ellas es usando toxina botulínica. 
La toxina botulínica tipo A es una proteína purificada cuya acción permite relajar el músculo alrededor de los ojos y hacer menos evidente las arrugas y líneas motivadas por la contracción muscular.  
 Efectos positivos transitorios La técnica de aplicación se realiza mediante inyección directa en el músculo. 
Los efectos beneficiosos tienen una duración que oscila entre 3 y 6 meses según los autores, aunque algunos pacientes han presentado efectos superiores a un año.
De todos modos, los efectos estéticos positivos son transitorios, siendo menor la duración si la aplicación es transcutánea.
 Los efectos colaterales descritos para la aplicación de toxina botulínica son la sensación de quemazón en la zona de inyección y, en el 1% de los casos, incapacidad de elevar a su posición normal el párpado superior (ptosis palpebral).
 Lo más importante es que tiene que ser realizado por un profesional médico certificado. 

  Dr. Rafael Emilio Olivier  Especialista en cirugía plástica y reparadora MP 4189 -MN 101285 Sarmiento 1756, primer piso, Posadas (Misiones) (03752) 435260 San Martín 945, Oberá (Misiones) (03755) 408513 rolivier@intramed.net.