Rutas y puentes inundados, una escena que puede repetirse

Domingo 22 de junio de 2014
De volver a aumentar el volumen de agua, al menos en la zona Norte de Misiones el panorama de puentes y rutas inundados puede volver a producirse.
Es que desde ningún organismo oficial, de varios consultados, pudieron detallar una planificación alternativa. Tampoco repuestas de largo plazo, como acciones que trasciendan los eventos puntuales, y menos aún políticas de desarrollo y gestión integral de las zonas sometidas en la actualidad a procesos de inundación.
Al respecto, tampoco se dieron muchas precisiones desde la Dirección Nacional de Vialidad (DNV), que tiene responsabilidades en el mantenimiento de las rutas nacionales, parte de las cuales quedaron bajo agua en las últimas inundaciones.
El organismo nacional se limitó a trasladar responsabilidades de informes a la delegación Misiones, y desde esta dependencia no quisieron hablar al respecto.
Varias falencias de este y otros organismos oficiales, fueron cuestionados en un reciente informe de la Auditoría General de la Nación (AGN), que procedió a efectuar un examen en el ámbito de la Dirección Nacional de Vialidad (DNV), el Órgano de Control de las Concesiones Viales (Occovi) y la Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV), vinculado a los aspectos de la infraestructura vial en todo el país y que, naturalmente, incluye las rutas de Misiones.
El estudio comprendió un amplio período, desde 1953 hasta diciembre de 2012.

Lo que dice el informe
El trabajo concluyó hacia fines de noviembre de 2013 y se difundió en marzo de este año. Apuntaba a conseguir una aproximación a la problemática de la seguridad vial, con un enfoque restrictivo, tomando solamente aquellos aspectos vinculados a las características de la infraestructura vial y a la incidencia de éstas sobre la siniestralidad.
En su estructura, la Dirección Nacional de Vialidad -detalló el informe de la AGN- “cuenta con la División Seguridad Vial con recursos técnicos limitados y no coordina ni centraliza las actividades específicas a esta temática que se desarrollan en diversas áreas de la DNV. El organismo posee formalmente un Plan Estratégico de Seguridad Vial, pero carece de programas y metas concretas, susceptibles de ser evaluadas”.
En materia de articulación con otros organismos viales, según las conclusiones del relevamiento, “el convenio de cooperación con la Agencia Nacional de Seguridad Vial indica no ha producido efectos ni ha tenido principio de ejecución, lo que ha impedido el desarrollo de acciones fundamentales que requieren la coordinación de ambas reparticiones”.

Normas desactualizadas
“Las normas de diseño utilizadas para proyectar los caminos pueden hoy ser consideradas muy antiguas y técnicamente, significativamente desactualizadas, al no contener los importantes y nuevos conocimientos adquiridos en el campo de la ingeniería vial”. Esta es la conclusión a la que arribó la AGN.
En cuanto a la normativa técnica, la Auditoría General de la Nación, además de considerar como desactualizadas las normas de diseño para proyectar caminos, indicó que la DNV "encomendó la elaboración de las nuevas normas de diseño geométrico, pero esta actualización de la normativa, que ya cuenta con la aprobación administrativa de la DNV desde 2010, aún no fue puesta en vigencia”.
Ante esta situación, sostiene la Auditoría, “el no haber agotado la instancia para la puesta en práctica de la nueva normativa, la que insumió recursos humanos y erogaciones, constituye un punto débil en materia de compromiso institucional en pos de lograr avances normativos que signifiquen construir caminos más seguros”.

Algunas acciones desde DPV
Ante eventuales nuevas inundaciones de puentes y para evitar el aislamiento de cientos de pobladores, desde la Dirección Provincial de Vialidad (DPV) adelantaron que trabajan en mejorar los accesos alternativos terrados que por las propias lluvias quedaron destruidas para el tránsito de pequeñas unidades. Es lo que sostuvo Julio Duarte, titular de la Dirección Provincial de Vialidad.
“Se están reparando varios caminos, en algunos casos destruidos por el paso de camiones y que sirven de desvíos en casos de cortes de rutas por inundaciones”, detalló.
La reparación de caminos terrados representa una clara medida transitoria y no una solución definitiva, habida cuenta de las particularidades del suelo misionero y de que las intensas lluvias suelen echar a perder rápido el trabajo realizado.
Además de acondicionar caminos terrados que puedan ser utilizados como alternativos, también dentro del esquema anual de conservación y mantenimiento de rutas provinciales, la DPV está ejecutando tareas de restauración de banquinas en la ruta provincial número 17, en un tramo de 60 kilómetros comprendido entre Eldorado y Pozo Azul, punto de empalme con la ruta provincial 20.
Este trayecto fue muy utilizado como desvío cuando las aguas superaron el nivel de los puentes sobre la ruta 12.
Las tareas en ese lugar incluyen el mantenimiento integral de la zona de camino, perfilado de banquinas, limpieza y reposición de señales y corte de malezas alrededor de las defensas metálicas en los sectores de curvas.
Estas mejoras ejecutadas por la Dirección Provincial de Vialidad apuntan a reforzar la seguridad vial en la ruta mencionada, debido al intenso tránsito de vehículos de gran porte, al tratarse de una de las arterias más utilizadas por el transporte de cargas hacia el paso fronterizo de Bernardo de Irigoyen.


Los trabajos de la EBY
La otra cara de los problemas por la última crecida en Misiones es que esta vez no hubo tareas de evacuación, debido a las obras de defensa de la Entidad Binacional Yacyretá (EBY), desde donde indicaron que ello evitó que el agua invadiera las zonas bajas del territorio misionero.
Señalaron además desde la EBY que “los puentes fueron levantados en función a los siete metros que se subió el embalse”, tomando en cuenta algunas importantes crecidas históricas.
Como ejemplo de la elevación de puentes pueden citarse los de Garupá y El Yabebiry, que siempre se tapaban. El puente sobre el arroyo Garupá está localizado en la desembocadura del citado curso de agua sobre el río Paraná y comprende unos 840 metros.
En cuanto a obras viales, en la margen izquierda del río Paraná hay un total de 23.
Otra obra concluida es la relocalización de la ruta nacional 12 y el puente sobre el arroyo Yabebiry, próximo a San Ignacio, en la intersección de la ruta nacional 12 cono dicho arroyo. Comprende la adecuación como autovía de 4.980 metros de la ruta, donde se localizan cuatro puentes: uno sobre el arroyo Yabebiry, de 616 metros, y tres sobre arroyos afluentes al mismo, uno de 476 metros y dos de 18 metros.
Se agregaron obras complementarias de movimiento de suelo para terceras trochas, prolongación de alcantarillas, carpeta asfáltica y colocación de defensas de hormigón.
Las obras viales en al área metropolitana, según la EBY, comprende seis proyectos en Argentina que integran el programa de obras viales de integración entre este país y  Paraguay.

Por Antonio Villalba
interior@elterritorio.com.ar


:: Notas relacionadas
Puentes en debate
En El Alcázar siguen esperando los informes y piden caminos alternativos
En Montecarlo insisten con el asfaltado de la ruta 15
Arroyo Acaraguá, la vida después de la tragedia
Fiscal pidió informe técnico a Vialidad Provincial