El hotel cuatro estrellas superior que habilitó la empresa Crucero del Norte, en la ciudad de las cataratas, fue presentado en sociedad en la noche del viernes con la presencia del ministro de Turismo de la Nación, Enrique Meyer; el gobernador de la provincia de Misiones, Maurice Closs, autoridades locales y la familia Koropeski, que está al frente del emprendimiento.
Se trata del Grand Crucero, un complejo de setenta habitaciones con piscina climatizada en el octavo piso que brinda una panorámica vista hacia la ciudad y la selva Iriapú. Será la novedad del circuito hotelero local de este verano y ya tiene reservas para enero y febrero.
El hotel ubicado frente a la rotonda de acceso a la ciudad en un punto privilegiado, por donde ingresan y egresan los visitantes que llegan a este destino. El alojamiento ofrecerá servicios turísticos a través de su propia agencia de viajes, “al turismo nacional vamos apostar fuertemente en virtud que nuestra empresa esta en casi todo el país y queremos utilizar toda la red comercial propia que tenemos a través de los buses, para promocionar aún más y que puedan venir de todas las provincias del país y poder así alojarse en nuestro hotel”, señaló el propietario de la empresa, Julio Koropeski.
El emprendimiento ya generó más de 60 puestos de trabajo con un 95 por ciento de recurso humano local entre recepcionistas, mucamas, mozos coordinadores y supervisores de las distintas áreas, “la realidad es que nos sorprendimos gratamente, por que al principio creíamos que iba a ser complicado por la gran oferta de trabajo”, explicó Leonardo Pascutto, gerente general del Gran Crucero Iguazú Hotel en referencia a la búsqueda de personal local. “Recibimos alrededor de cuatro mil curriculums”, aseguró el directivo.
Koropeski indicó a El Territorio que decidieron invertir en Iguazú porque había que acompañar todo lo que la provincia estaba haciendo en cuanto a promoción, ya sea en la Argentina como en el exterior, “el Gobierno puedo hacer muchas cosas pero el sector privado es el que tiene que invertir en todo lo que infraestructura de servicio, hotelería y gastronomía. Y de ahí surgió la idea de apostar a este emprendimiento”, distinguió.
Por otro lado, destacó que la empresa piensa manejar tarifas diferenciadas para todos los misioneros, grupos importantes o congresos, que se quieran realizar dentro del hotel.
Misioneros con descuentos
El Grand Crucero es algo totalmente innovador, un hotel de categoría cuatro estrellas superior. Allí el público misionero se va a encontrar con algo distinto, moderno que antes había en Iguazú. Como por ejemplo, un hotel en altura, que después de la modificación del código urbano es el primero que está edificado con altura.
Tiene detalles que sobresale de otros, como la tarraza donde está la piscina que tiene una vista panorámica excelente. A la pileta se la va a poder disfrutar tanto en verano como en invierno, porque es climatizada.
Cuenta con dos salones de convenciones, uno para doscientas personas tipo banquete y otro para trescientas tipo auditorio, dos restaurantes, uno de ellos gourmet y un garaje cubierto para 36 vehículos. El hotel será amigable con el medio ambiente, utilizará energía biorenovable con calderas alimentadas con pellets.
Posee habitaciones estándar, premium, y suite. El pasajero puede elegir la calidad de servicio que quiere. Pero por sobre todas las cosas lo recomendable será su cocina. Se apuntó a ofrecer platos regionales, trabajando con todas las frutas, verduras y productos misioneros que es lo que la empresa más deseaba ofrecer al visitante, “van haber muchísimos y gran variedad de platos regionales con carnes, pescado y pollo”, detalló el propietario.
Además tendrá un spa, que estará terminado en 30 días, para que los turistas tengan un lugar donde relajarse. Gimnasio y mesa de juegos.