Investigan a Schoklender en Bolivia por irregularidades en su paternidad

Miércoles 21 de septiembre de 2011 | 19:30hs.
Más dudas | Sergio Schoklender y Viviana Sala, quien acompaña a su hijo al Colegio Jean Piaget | Foto: Gentileza Perfil

Según publicó Perfil.com, la Justicia de Bolivia abrió una causa contra Sergio Schoklender y su ex esposa, Viviana Sala, por "trata de seres humanos". El portal habría detectado supuestas irregularidades en la partida de nacimiento de su hijo, que podría ser "adoptivo" pero que figura como hijo biológico de ambos. Entre otros puntos oscuros, aparece un sospechoso viaje de la pareja, por el que Schoklender salió del país sin autorización judicial.

La Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen de Santa Cruz de la Sierra abrió ayer esta investigación luego de que este medio presentara documentación a la que accedió en exclusiva en Bolivia. Las irregularidades son múltiples:

1. La principal contradicción. En 1999 Schoklender (53) presentó a su hijo como "adoptado" a Hebe de Bonafini y a sus familiares, pero el chico figura en la partida de nacimiento como su hijo biológico, nacido el 16 de julio de 1999 en Santa Cruz de la Sierra, la ciudad donde se refugió su hermano Pablo en los '90 (ver documento).

Hebe, quien entonces ya tenía un vínculo afectivo con su ex apoderado, aseguró a Perfil.com que él presentó al pequeño "como un chico adoptado" y recordó que su mujer Viviana (51) "no podía tener hijos biológicos".

 2. Viaje en avión prohibido. De haber estado embarazada, Viviana Sala no podía viajar en avión en esas fechas. La normativa aeronáutica lo impide.

 En el registro de Migraciones de Bolivia se detectó que el ex gestor de Madres viajó de Ezeiza al aeropuerto de Viru-Viru (Santa Cruz) el 14 de julio de 1999; y Sala, el 15 de julio, apenas un día antes del supuesto parto natural. Sin embargo, la reglamentación de la Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA) impide a las aerolíneas embarcar a embarazadas a menos de una semana de dar a luz.

Sala regresó a Ezeiza a 24 horas de haber inscripto al niño en el Registro Civil y a tan sólo 72 horas después del supuesto nacimiento, según Migraciones (ver documento). La IATA también veda el viaje a recién nacidos hasta los siete días del parto. Schoklender no acompañó a la madre con el bebé: el 21 de julio voló de Santa Cruz a San Pablo (Brasil).

3. Schoklender viajó sin permiso del juez. En julio de 1999, Sergio cumplía su último tercio de condena por el asesinato de sus padres en libertad condicional y, de acuerdo al expediente de la causa al que accedió este medio, el juez interviniente no lo había autorizado a viajar en esas fechas. El día que lo habilitaron, el 16 de ese mes, Schoklender ya estaba en Bolivia. Tiempo después, Schoklender declaró al juez que ese viaje al final no lo había realizado.

4. Testigos bajo sospecha. El médico que aparece a cargo del parto es Luis Pedraza Sandoval (55) y la matrícula que figura en la partida de nacimiento no existe en el Colegio de Médicos de Santa Cruz. Pedraza también figura como testigo, pero con un número de cédula de identidad que en 1999 correspondía a un chico de 6 años. Dos jueces de Familia en Bolivia coincidieron a Perfil.com que eso es "anormal" y "sospechoso".

El otro testigo que figura en la partida de nacimiento es Lorgio Daza Cabrera (55), un ciudadano no vinculado a la medicina según dijeron sus familiares. Al igual que Pedraza, emigró de Bolivia a los pocos años y hoy sus respectivas familias no saben nada de ellos.

5. Clínica clausurada. Como hospital de nacimiento figura San Silvestre, un centro que nunca fue inscripto en el registro de habilitación de hospitales en Bolivia, según lo confirmó el Servicio Departamental de Salud (SEDES) a este medio. En 2004 esa clínica fue clausurada por la Policía por no poseer dicho permiso, informó en ese momento un diario local. Es más, un efectivo policial de Santa Cruz confió a este portal que en ese lugar se practicaban abortos clandestinos (ver documento).

Perfil.com se comunicó con Sergio Schoklender y este se negó a responder sobre las irregularidadades denunciadas en esta investigación. "No voy a dar explicaciones sobre el tema. Es una canallada atroz querer involucrar a mi familia en esto. De ninguna manera voy a permitir eso. Es una infamia", afirmó.

Así el ex gestor de Madres asoció esta investigación a las causas penales en su contra por los fondos de las Madres y a su distanciamiento del Gobierno. "Van a usar cualquier cosa para tratar de agredirnos, de descalificar lo que estamos haciendo, para ensuciarnos", agregó.