Los entrerrianos Antonio Faccendini y Juana Schimpf amaron una Misiones todavía selvática y a su gente

Él, maestro y profesor de Filosofía y Ciencias de la Educación, fue un apasionado y educador de temple. Al mismo de su carácter fuerte, relucía  su sensibilidad palmada en sus múltiples trabajos literarios.
Este entrerriano “casi misionero”, tiene un extenso currículum que se comprueba a través de notas publicadas y libros escritos. Incansable trabajador en pos de la cultura educacional , tuvo a su lado a Juana Frida, una mujer, suave, sumisa, de carácter comprensivo. Siempre al cuidado de su hogar, hijos y, hoy, es feliz con sus cinco nietos. Recuerda que con su marido se conocían desde adolescentes, pues era amigo de su familia. Se complementaban a la perfección. Él era fuego, ella el agua que apagaba la llama que ardía. Durante el resto de su vida, Antonio Rolando Faccendini vivió en  Jardín América, donde falleció. La población, por su accionar, lo destacaba como un docente emprendedor, puesto que quería lo mejor para los estudiantes, forjando y creando mejoras destinadas a la localidad. Al mismo tiempo, integraba cargos, gremiales en la docencia.
Su trayectoria le valió la designación de “Ciudadano Ilustre”. Quería a su  gente, la respetaba cooperando en varios aspectos. Entre ellos las mejores condiciones espirituales y bienestar económico de los más necesitados, indicaron sus familiares, esposa e hijos.
Faccendini nació en el distrito Corrales, Victoria, Entre Ríos, un  20 de abril de 1939 .Conocía al dedillo las costumbres de Jardín América. Toda Misiones lo inspiró y con alma de poeta, cantó a los Saltos del Tabay. Lo sentía así: “Aguas quebradas, iridiscentes perlas, arroyo que viril te despedazas ¿por qué mellas las rocas a tu paso, las hieres, las trituras, las maltratas?”. Y en otras estrofas: “Será buscando quizá el fundamento de tu inquieta función irrefrenable, o el canto perdido de la nube, que bajara a tu cauce a reflejarse”.
Refirieron su esposa Juana Frida, su hijo Pablo y nuera Viviana Gómez, que el bisabuelo de Antonio procedía de Génova, Italia, y su abuelo llegó a Victoria, Entre Ríos, en 1882 en el buque “Río Plata”, dedicándose a la hacienda y agricultura.
 Antonio Rolando llegó a Misiones en 1960 como maestro de la escuela 318, situada en pleno monte de Ñacanguazú. Ya se había enamorado de Juana Frida en un baile de carnaval , organizado por el club “Libertad” de Victoria. Cuando se instaló en Misiones, el idilio fue ahondándose más ,entre carta viene y carta va. Se casaron el 18 de junio de 1962, en Paraná , Entre Ríos. Volvió a Misiones destinado a la escuela 284, de Jardín América.
Ampliaron la pequeña escuela con los vecinos y trabajó a la par de ellos, edificando y colocando ladrillo sobre ladrillo.
Estuvo en Ñacanguazú durante 11 años. Allí nacieron sus hijos Pablo Augusto y Ernesto Eduardo. Desde 1974 trabajó en distintas localidades, conduciendo  su “sufrido” Citroën por esos caminos intransitables, más aún, en días lluviosos.
Este incansable educador, poeta y cuentista, quien dejó varios libros en su haber, fue reconocido por los pobladores. Sobre todo en  Jardín América,  donde quiso estar hasta los últimos días de su vida, acotó su esposa.
Antonio, hijo de Celestina Martínez y Ernesto Faccendini, falleció el 17 de agosto de 2003 en su Jardín.
Recibió su título de maestro en 1958. Estudió y se recibió de profesor de Filosofía y Ciencias de la Educación en el Instituto Superior del Profesorado Antonio Ruiz de Montoya.
En Victoria, Entre Ríos, fue director de la escuela 5. También maestro de la Escuela Nacional  318 de Hipólito Yrigoyen, Misiones y secretario de la Escuela Provincial de Comercio 2 de Jardín América.


Cargos varios
Maestro, director, vice en las escuelas: 318 y  284 de Jardín América. Ocupó cargos de la Cátedra de Seminario de la Problemática Educativa, en  San Ignacio. Maestro y director de la 247 de Puerto Leoni.
Se desempeñó en  Aristóbulo del Valle y otras localidades del interior.
Se jubiló como Supervisor Escolar de Enseñanza Pre-Primaria, Primaria y de Adultos y Profesores . Realizó diversos cursillos. Fue Secretario Tesorero de la Municipalidad de Jardín América.
En la Cámara de Representantes de Misiones, ayudante de la Comisión de Asuntos Sociales, Salud Pública, Trabajo y Educación. Recibió mención especial de la Revista “La Obra” y   “La Yerba Mate”.
Fue profesor de Cursillo de Perfeccionamiento Docente. Tuvo relación con las “Modificaciones en la Evaluación Docente”, propuesta aprobada en el Congreso Provincial del 2º Festival del Docente de Campo Grande.
Otros cargos públicos: jefe Radio - Censo Económico Nacional.
Tuvo amplia actividad gremial, ejerció  la Presidencia de la Asociación Gremial  de Docentes Nacionales de Misiones. Fue Secretario gremial de la Unión de Docente de la Provincia de Misiones (UDPM) cofundador del Aero Club, y copromotor de la Escuela Provincial de Educación Técnica de Jardín América, ex ENET 7, entre otras cosas.
En el 2003, fue distinguido por el Consejo Deliberante como “Ciudadano Ilustre” de Jardín América.
Su nombre fue impuesto en distintas instituciones.

Mecha Villalba

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