Música herramienta

miércoles 24 de junio de 2020 | 5:00hs.
Música herramienta
Música herramienta
El montecarlense Jorge Marcial (54), más conocido como Rula, alimentador del blues y el jazz por estas latitudes, no se queda quieto en cuarentena. 
En una entrevista con El Territorio relató que este período de quedarse en casa lo dedica a componer y ensayar. Y a la vez prueba nuevas técnicas y metodologías para la enseñanza de la música, ya que además de la escuela que dirige tiene en marcha un proyecto para hacer accesible esta disciplina artística a niños y jóvenes de todos los sectores sociales.
“La idea es seguir mejorando espacios y técnicas musicales y avanzar con proyectos para seguir fortaleciendo la tarea de enseñanza y aprendizaje”, relató en la charla que tuvo lugar en su escuela de música, ubicada sobre la avenida El Libertador, frente a la Iglesia.  
Explicó que en los últimos meses, durante el aislamiento social preventivo y obligatorio por el coronavirus se adaptó a nuevas formas de trabajo para llegar a sus estudiantes. Asimismo, con la flexibilización paulatina de la cuarentena, comenzó hace unos días a dictar talleres en grupos reducidos de uno a tres asistentes,  atendiendo a los protocolos de seguridad vigentes en la comuna y la provincia.  
El músico, que vive entre Foz de Iguazú, Brasil, y la Capital de la Orquídea, en nuestra provincia,  apuntó que “a futuro me gustaría poder contribuir en la contención de niños y jóvenes con autismo, ya que la música es una buena herramienta para ayudar en la enseñanza y socialización”.
Sobre esta posibilidad, Rula señaló que la inquietud le llega porque recibe llamados tanto de la ciudad como de otras localidades para la enseñanza de chicos con trastornos del espectro autista (TEA). “No estoy capacitado o formado en este campo, pero recibí algunos alumnos que son hijos de amigos y conocidos y así se inició este camino. Me gustaría poder ser un nexo y tratar de trabajar en red con especialistas y con la música como herramienta”, detalló, al tiempo que contó sobre su experiencia educativa con chicos con TEA. “En Foz de Iguazú trabajamos con chicos con autismo, lo que hicimos fue observar junto con psicólogos, neurólogos y psicoterapeutas, y darles a estos niños y jóvenes la libertad de que elijan un instrumento, no condicionarlos. Esta propuesta tiene resultados fantásticos”. 
En la escuela de música que fundó y dirige, él y otros colegas dan clases de diferentes instrumentos y también sobre la historia de la música. La impronta del instituto es que los estudiantes tengan acceso a la mayor cantidad de instrumentos posibles para que de esta manera puedan elegir cuál de ellos les interesa profundizar en el aprendizaje y ejecución. 
Si bien aún la escuela no puede funcionar a pleno, hay muchos planes para cuando la situación epidemiológica lo permita.  
“Hay mucho por hacer, capacitarnos, traer talleres, acercar nuestra experiencia con la música. Es un todo, con músicos y docentes de Brasil aprendí un montón y quiero ponerlo en práctica. Estoy trabajando en un sistema para enseñar de manera integral, desde gestionar un show, vestimenta, escenario, cada cuestión de lo que significa una presentación”, dijo el guitarrista.  

Proyectos 
Mediante gestiones y esfuerzos el músico pudo adquirir una batería y seguir sumando instrumentos para la escuela. También están previstas obras de mejoramiento y ampliación del edificio mediante un aporte del gobierno provincial. “En la escuela armamos un programa que lo vamos mejorando, para desarrollar con diferentes edades, como un ciclo básico común que funciona perfectamente. Probamos con la guitarra, bajo, cavaquinho, percusión, piano. Nos faltaba la batería que la pude comprar para acercar el golpe de la percusión”.
En tanto, sobre la formación musical indicó que “estamos en una región grande con muchas influencias, tratamos de no cerrarnos a un estilo de música, tenemos cerca Brasil y Paraguay, la idea es que los chicos a medida que van avanzando decidan el ritmo musical que los representa, pero tienen formación en todos los estilos que se pueda” sostuvo.
El artista se divide entre la docencia, las presentaciones en vivo en su ciudad natal, en el resto de la provincia y también en Foz. Ahora, por la cuarentena se encuentra en Montecarlo apuntalando su proyecto educativo.
Asimismo, el año pasado, junto a su banda, llevó ‘La Historia Argentina contada con rock nacional’, a las escuelas, una propuesta artística con clásicos del género desde los 60.