Montarán cinco talleres en Posadas para la confección de barbijos

sábado 28 de marzo de 2020 | 1:00hs.
Montarán cinco talleres en Posadas para la confección de barbijos
Montarán cinco talleres en Posadas para la confección de barbijos
María Elena Hipólito

Por María Elena Hipólito sociedad@elterritorio.com.ar

Son las situaciones críticas o desconcertantes las que muchas veces despiertan en el otro las acciones más nobles. Lo demostraron las numerosas personas a lo largo de la provincia de Misiones que empezaron a donar camas y a fabricar barbijos para donarlos a los hospitales y centros de salud. Gran cantidad de historias individuales que buscan un bien común.
Enmarcado con este objetivo y adelantándose a un panorama que podría volverse complicado en los próximos días, el Ministerio de Industria en conjunto con el Ministerio de Salud, montó el primero de los cinco talleres que elaborarán en Posadas elementos necesarios como barbijos, mamelucos, camisolines y botas para abastecer al sistema de salud, fuerzas de seguridad y personal que trabaja en comedores y asiste en los barrios carenciados de la provincia.
El taller -que se montó en el Salón de las Dos Constituciones de la Cámara de Representantes- cuenta con estrictas y controladas normas de seguridad, esterilización e higiene para garantizar la calidad de los productos que de allí salgan. Trabajan ocho personas por turno, de lunes a viernes, y quienes tienen la tarea de coser, en este caso, son las mujeres de la Cooperativa de Trabajo Futuro Limitada.  
Se estima que la semana que viene ya puedan empezar a funcionar otros tres centros de producción que están previstos en el Campus de la Universidad Nacional de Misiones, en uno de los salones del Museo Aníbal Cambas y en el centro de la ciudad. El cuarto estaría en un salón, no especificado aún, en el barrio Villa Cabello. 
“Lo que hacemos es planificar la producción y la logística del abastecimiento, del recurso humano que son de cooperativas, organizaciones sociales y de emprendedores”, señaló Roberto Tarnowski, subsecretario de Planificación Industrial del Ministerio de Industria.
Y, además, agregó: “Estas personas fueron capacitadas y trabajan con la coordinación de personas con formación profesional que son de la carrera de diseño textil que los supervisa, controla y organiza la producción”.
A la sala de trabajo no ingresa nadie ajeno al taller y Tarnowski indicó que las trabajadoras al entrar deben cambiarse de ropa y lavarse debidamente las manos para poder comenzar a operar.
Sobre los materiales utilizados en la confección de estos elementos, explicó: “En la mayoría de los casos usamos tela no tejida (TNT), que es muy común en el uso de bolsas de supermercado, y otra conocida como friselina. Básicamente usamos TNT de un gramaje específico y adecuado. Son productos que tienen una duración máxima de cuatro horas, porque cuando uno exhala permanentemente ya se genera humedad y se produce un caldo de cultivo de retroalimentación que perjudica a la persona, no se puede lavar ni esterilizar porque la tela se abre y ya no sirven”.
Al tratarse de elementos descartables, que no se pueden volver a utilizar, Tarnowski estimó que se necesitará una producción de 20.000 unidades por semana en todos los centros de producción, un aproximado de 1.200 unidades diarias.
“Son elementos descartables y por eso necesitamos una producción de 20.000 unidades por semana en todos los centros de producción. Este es uno de ellos que estimamos producir hasta 1.200 unidades diarias”.
Por su parte, Marta Centeno, del Servicio de Esterilización del Hospital Madariaga, que colaboró con los requerimientos necesarios para llevar el trabajo adelante, sostuvo: “Todo esto tiene que tener una determinada calidad y tengo que asegurarme de que el barbijo, el mameluco o el camisolín que voy a usar tengan la calidad. Para todo eso tengo que, desde un principio, establecer todas las etapas de producción con una determinada limpieza, es necesario trabajar en un área limpia para que el producto final salga con la calidad adecuada”.