Más de 300.000 soldados rusos finalizan históricas maniobras

Como parte de las maniobras militares más grandes de la historia de Rusia, las fuerzas navales rusas participaron ayer en un ejercicio de cacería de submarinos utilizando un barco especializado y un helicóptero en el Mar de Okhotsk.
Unos 3.200 soldados de China se unieron a unos 300.000 soldados rusos en una semana de juegos de guerra llamados Vostok 2018 (Oriente 2018), realizados en Siberia y el Lejano Oriente, así como en los océanos Ártico y Pacífico. 
Las maniobras continuarán hasta hoy y en ellas participan 1.000 aviones, más de 36.000 tanques y otros vehículos de combate. Las maniobras superan a las mayores que realizó la Unión Soviética en 1981. El ejercicio naval en el brazo del Pacífico entre Rusia y la isla japonesa de Hokkaido contó con el destructor ruso vicealmirante Kulakov y un helicóptero Ka-27 equipado para la caza de submarinos.
El Ministerio de Defensa dijo que los ejercicios de ayer también incluyeron aviones de combate          MiG-31 y Su-35 que practicaron la intercepción de aviones que parecían acercarse a su zona sin responder al control de tierra, además de bombarderos de largo alcance Tu-22 que alcanzaron objetivos que asemejaban aviones estacionados y almacenes.
Desde la perspectiva de China, la alianza militar con Rusia envía una fuerte señal a Estados Unidos y su aliado Japón.
Pekín intenta defender sus intereses en el Mar del Sur de China, que las autoridades chinas reclaman casi en su totalidad, así como Taiwán y las islas Senkaku y Diaoyu controladas por Japón, pero reclamadas por China. Para Rusia, la alianza cada vez más robusta con China es particularmente importante a la luz de las tensas relaciones con Estados Unidos y sus aliados , junto con la amenaza de más sanciones estadounidenses.