Los Cerbin reescriben su historia familiar

miércoles 12 de diciembre de 2018 | 5:00hs.
Los Cerbin reescriben  su historia familiar
Los Cerbin reescriben su historia familiar
Agustina Rella

Por Agustina Rella sociedad@elterritorio.com.ar

Las raíces nos definen, marcan nuestra propia historia.
Y en un país tan extenso como Argentina, es común que las familias se hayan ido dispersando con el tiempo, por lo que rastrear el origen no siempre es una tarea simple.

En este sentido, los Cerbin protagonizan una historia con vaivenes dignos de una película, que define una de sus etapas, en un gran encuentro de primos que se desarrolló el sábado en Leandro N. Alem.

A través de un grupo de Facebook se logró ir descifrando de a poco el rompecabezas de la historia familiar, ya que a pesar de que fueron criados ligados a costumbres alemanas, no tenían mucha información sobre el pasado de sus padres.
En la actualidad se logró armar hasta nueve generaciones, que si bien aún resta oficializar con documentos, tiene nombres de los ancestros desde finales de 1700.

Unión de primos

La unión de este grupo de primos, que llegaron a Leandro N. Alem desde algunas localidades cercanas como Bonpland, Eldorado, Gobernador Roca, Buenos Aires, Brasil y hasta de Chile, nació a partir de la búsqueda de un misterioso maletín de los bisabuelos que contenía los pasaportes y otros papeles históricos e importantes.

“Consigo dar con una prima de Alem por Facebook y así comenzó la cadena hasta que conseguí el nombre de la persona que se suponía había tenido por última vez los pasaportes de los bisabuelos, Alfredo Kallus.
Lo googleo y encuentro que tiene rasgos parecidos a mi Opa, fue fascinante. Me la jugué con mi corazonada, dicen que la sangre tira”, arrancó contando Sany, que vino desde Buenos Aires para el encuentro.

“Armé un Facebook que se llama Familia Cerbin. Así sucedió que un día llegué hasta la hija de Alfredo Kallus, que me prestó el famoso maletín con los documentos para hacer el trámite y pasé un día emocionante al conocerla”, contó.
“Nos llevamos la sorpresa de que el pasaporte es polaco, en el maletín toda la documentación está en ruso y nosotros somos alemanes. Es el día de hoy que estamos en plena investigación para entender nuestro linaje”, agregó.

Sin embargo, la unión hace la fuerza, y sumando alrededor de 100 personas en el grupo, el cruzamiento de datos permitió encontrar la iglesia de Radom (Polonia) donde se bautizaron y casaron todos los ancestros. Finalmente, tras 93 años de historia de los Cerbin en Argentina, más de 50 familiares se reunieron en un camping de Leandro N. Alem y también buscan parientes europeos que son Zerbin.
En diálogo con El Territorio contaron que Catalina, Gustavo y cinco de sus ocho hijos (tres nacieron en Argentina) llegaron a Misiones en 1925, en barco. De Posadas fueron a Eldorado y como allí ya escaseaban las tierras para trabajar, volvieron a Santa Ana y en carro se trasladaron hasta Bonpland para asentarse definitivamente en Alem, que en ese entonces se llamaba Colonia Mecking.
A dos kilómetros de la ciudad de la Navidad se encuentra hasta hoy la chacra donde los Cerbin originarios vivieron hasta sus últimos días. Hoy el campo está en manos de otra familia pero todavía se erige la casa que los bisabuelos levantaron.

Con apellidos como Kallus, Banach, Haase, los descendientes se fueron esparciendo por la provincia, el país y zonas limítrofes. Así, de los ocho hermanos, Elsa es la que sobrevive hoy en Eldorado.

Valores de la fe y el amor

Según detalla Iris Haase (hija de Elsa), que hoy vive en Eldorado, Gustavo Cerbin tuvo que pelear en la Primera Guerra Mundial, mientras su mujer y niños esperaban en casa.

Prácticamente desesperanzada la mujer va a la estación de trenes, quizás en busca del soldado, quizás pensando migrar con los niños y milagrosamente se encuentra con su amado. Allí deciden venir a la Argentina. “Eran personas muy humildes, muy trabajadoras”, alegó Iris.

En tanto, Gerardo Banach, que aún reside en Alem, destacó los valores de fe y amor que heredó. El fundamento cristiano siempre fue el pilar familiar ya que los Cerbin fueron uno de los fundadores de la Iglesia Luterana de Alem.
Hoy los primos encuentran inspiración en esa historia de trabajo, fe y sacrificio y en una velada por demás emocionante, los primos afirmaron que la reunión se hará periódicamente.

De ahora en más, habrá reuniones anuales de los Cerbin para seguir escribiendo este apasionante relato.
Es así que los primos prometen tener juntada para rato y de esa manera tener un encuentro no sólo para compartir experiencias y similitudes sino también para poder seguir descifrando su linaje.