Las mujeres se ponen al frente de la masonería

miércoles 25 de septiembre de 2019 | 7:00hs.
Susana Tenreyro, presidenta del Triángulo Minerva, dependiente de la Gran Logia Femenina de Argentina
Susana Tenreyro, presidenta del Triángulo Minerva, dependiente de la Gran Logia Femenina de Argentina
Por Silvia Godoy

Por Silvia Godoy sociedad@elterritorio.com.ar

Situado su origen a fines de la Edad Media en Europa, la masonería ha sido hasta el siglo XX un recinto de hombres y vedado a las féminas, a las que se reservaba un sitio secundario en el desarrollo de acciones benéficas.     
Por el carácter secreto de las logias, se alimentaron las más dispares teorías conspirativas, que se fueron diluyendo con una mayor apertura hacia la sociedad en los últimos años.
Y a la par de este proceso de acercamiento a la comunidad se da una revolución en el seno de esta organización con la irrupción de los movimientos feministas masónicos en Francia a finales del 1800, hasta que en la década de 1950 se funda la Gran Logia Femenina francesa.   
Con ese antecedente, las logias de mujeres se expanden a otras naciones. En el país se constituye en 2002 la Gran Logia Femenina de Argentina, aunque el movimiento que hizo posible que se levanten sus columnas comenzó unos años antes.
Desde entonces, la Gran Logia Femenina propició la constitución de otras logias en las provincias. Así, nace en Misiones en 2015 la Logia Aurora Misiones 3, que hoy cuenta con 30 miembros y que se reúne en el edificio de la Logia Roque Pérez, en calle Córdoba 318. 
A la vez, aparece en escena el incipiente Triángulo Minerva, que está en proceso de sumar miembros.   
“Aurora Misiones ha alcanzado un número tal que ya es posible un desprendimiento para una mejor organización de la tarea y la expansión de la masonería femenina y por ello tiene lugar el Triángulo, que es un espacio nuevo e independiente”, indicó a El Territorio Susana Tenreyro, presidenta del Triángulo Minerva, dependiente de la Gran Logia Femenina de Argentina.
El Triángulo Minerva es una asociación nueva que cuenta con tres maestras y cinco integrantes, está en etapa de crecimiento y consolidación y por ello, da charlas informativas abiertas al público.          
“El Triángulo es un espacio nuevo, trabajamos al igual que las logias masculinas con el rito escocés antiguo aceptado y si bien tenemos lazos de fraternidad y nos han cedido un espacio, no coincidimos en las reuniones. Una vez que el Triángulo alcance una cierta cantidad de miembros, se erige en una logia”, contó.
Y expresó que el vocablo ‘masona’, en femenino, “se tuvo que adaptar del masculino, porque es cierto que desde el origen las logias fueron masculinas y las mujeres podían participar como miembros por adopción, que era como un rol reservado para familiares de los masones. Pero acorde con los nuevos tiempos, hoy las mujeres somos protagonistas en la masonería y tenemos el espacio logial para desarrollarnos”.    
Precisó que en Sudamérica, Chile está a la cabeza del movimiento masónico femenino y que el primer grupo de masonas argentinas dependió de la logia de Chile y debió viajar mucho para prepararse y hasta obtener su carta patente habilitante. 
“Hay logias femeninas en varios países de Sudamérica como Uruguay, Venezuela y también Paraguay, las hermanas masonas paraguayas dependen de la Gran Logia Femenina de Argentina”.  
Precisó que actualmente, en todo el territorio nacional hay casi medio millar de mujeres masonas que comparten los ideales de libertad, igualdad y fraternidad.
“Las masonas, con la presidenta de la gran logia, la gran maestra Mariela Rodríguez Ruiz, propulsamos el ideal de la sororidad que es la fraternidad femenina”, indicó Tenreyro. 

Minerva
Explicó junto a otras compañeras que “decidimos nombrar Minerva en honor a la diosa romana de la sabiduría. Es protectora de los artesanos y nosotras, como masonas somos artesanas de nuestro desarrollo personal, de nuestro crecimiento espiritual”.  
Asimismo, refirió que un puntal de esta nueva propuesta que busca ampliar su membresía es la apertura a la comunidad con actividades de concientización por ejemplo en educación vial y de apoyo a organizaciones civiles como hogares de niños y de ancianos, entre otros. 
“Estamos convocando a mujeres desde los 18 años que tengan ganas de estudiar y desarrollarse, no hay más requisito que ese, porque ser masona quiere decir trabajar para mejorar el entorno cercano, primero la familia, la comunidad y así la humanidad completa. Para ello hay mucho trabajo de lectura, de intercambio de ideas y conocimientos y también de acción”.
En este punto, dijo que la acción es uno de los pilares de la masonería, que se constituye como una organización filantrópica, iniciática y progresista.
Por último, sintetizó: “Nosotros decimos que en estos tiempos la masonería no es secreta sino que más bien es discreta y nuestro objetivo fundacional es abrirnos a la sociedad, tener una presencia y poder generar cambios positivos. Quizás en otros tiempos hubo una necesidad del secretismo, pero ahora la discreción es en cuanto a qué hacemos, porque para entenderlo hay que vivirlo. La logia tiene mucho de simbolismo, de estudio filosófico y uno de las cosas más importantes que comparten las logias femeninas es ese vínculo que nos conecta como mujeres y nos empodera”.

Para saber más

El Triángulo Minerva
Se reúne los sábados en la sede de la Logia Roque Pérez, en Córdoba 318, Posadas. Los encuentros se dividen en tiempos para el ritual, la lectura y el debate y la definción de acciones. La organización es jerárquica con grados de aprendices, compañeras y maestras. Para saber más, comunicarse vía e-mail a minerva1033@hotmail.com.