La furia de Florence se cobró sus primeras víctimas: cinco personas murieron
sábado 15 de septiembre de 2018 | 7:35hs.
La furia de Florence se cobró sus primeras víctimas: cinco personas murieron
El avance del Florence, que bajó a tormenta tropical al tocar la costa sureste de los Estados Unidos, ya se cobró sus primeras víctimas: cinco personas murieron producto de los fuertes vientos. Una mujer y su hijo fallecieron tras la caída de un árbol; otra personas perdió la vida en Pender Country y un hombre se electrocutó al conectar un generador.
La Policía de Wilmington confirmó la muerte de los primeros dos. "Podemos confirmar las dos primeras víctimas del huracán Florence. Una madre y su hijo fallecieron cuando un árbol cayó sobre su casa. El padre fue trasladado a un hospital con heridas", escribió la fuerza en su cuenta oficial de Twitter.
Esta localidad es una de las ciudades costeras directamente golpeadas por la furia del ciclón. Allí soplan vientos arremolinados de más de 155 kilómetros por hora y diluvia. El avance del agua es notorio y caen ramas en la calle, donde los semáforos ya dejaron de funcionar.
"No se ve absolutamente nada, solo ráfagas blancas", expresó José Bianco desde el ojo de la tormenta, que si bien se degradó a la categoría 1, provocará grandes inundaciones y destrucciones en Carolina del Norte y del Sur, según informó el Centro Nacional de Huracanes (NHC).
En rigor, en Carolina del Norte unos 400.000 hogares se encontraban sin luz, según el servicio local de emergencias. En este sentido, Brock Long, director de la Agencia Federal de Manejo de Emergencias (FEMA), advirtió a la población, pese a que se degradó de categoría. "Las inundaciones tierra adentro pueden ser letales y van a ocurrir", afirmó. "Habrá daños de infraestructura, y cortes de energía que podrían durar días o incluso semanas", anticipó.
Los evacuados son aproximadamente unas 1,7 millones de personas de Carolina del Norte, Carolina del Sur y Virginia. Todos emprendieron camino el miércoles para refugiarse de la tormenta.
Esta localidad es una de las ciudades costeras directamente golpeadas por la furia del ciclón. Allí soplan vientos arremolinados de más de 155 kilómetros por hora y diluvia. El avance del agua es notorio y caen ramas en la calle, donde los semáforos ya dejaron de funcionar.
"No se ve absolutamente nada, solo ráfagas blancas", expresó José Bianco desde el ojo de la tormenta, que si bien se degradó a la categoría 1, provocará grandes inundaciones y destrucciones en Carolina del Norte y del Sur, según informó el Centro Nacional de Huracanes (NHC).
En rigor, en Carolina del Norte unos 400.000 hogares se encontraban sin luz, según el servicio local de emergencias. En este sentido, Brock Long, director de la Agencia Federal de Manejo de Emergencias (FEMA), advirtió a la población, pese a que se degradó de categoría. "Las inundaciones tierra adentro pueden ser letales y van a ocurrir", afirmó. "Habrá daños de infraestructura, y cortes de energía que podrían durar días o incluso semanas", anticipó.
Los evacuados son aproximadamente unas 1,7 millones de personas de Carolina del Norte, Carolina del Sur y Virginia. Todos emprendieron camino el miércoles para refugiarse de la tormenta.
En total, son cinco los estados que se declararon en emergencia: Carolina del Norte, Carolina del Sur, Georgia, Maryland y Virgina, además de la capital Washington.
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