La despapelización se posiciona como premisa del STJ para 2021

Los diputados de la Comisión de Presupuesto de la Cámara de Representantes provincial vienen llevando a cabo sistemáticamente las reuniones de análisis de estimaciones para el año 2021.

En la jornada de ayer recibieron a la presidente del Superior Tribunal de Justicia (STJ), Rosanna Pía Venchiarutti Sartori, y al presidente del Instituto de Previsión Social (IPS), Lisandro Benmaor.

Para la Justicia misionera se estimó un total de 4.748.114.000 pesos, que representan un 22,24 por ciento más que el monto recibido este año. De acuerdo a lo explicado, los ejes de operación estarán puestos en la digitalización y despapelización del Poder Judicial, la capacitación y la puesta en marcha de nuevas dependencias en distintos puntos de la provincia.

En tanto, el IPS recibiría 17.418.005.000  pesos, que implican un incremento del 27,74 por ciento, lo que se divide en lo que respecta a la obra social (con prestaciones, farmacias, etcétera) y lo que refiere a jubilaciones y pensiones de trabajadores públicos provinciales.

En ambos casos, se destacó el trabajo constante a pesar de la pandemia del Covid-19 y se señalaron las proyecciones para el año que viene.
Justicia despapelizada
Venchiarutti Sartori hizo hincapié en el trabajo que se llevó a cabo en la Justicia durante la pandemia, manteniendo y profundizando el eje en la despapelización. “El Poder Judicial se ha adaptado y ha tratado de mantener vigentes sus servicios, focalizando su actividad en la digitalización, capacitación para llevar adelante esa digitalización y los proyectos de despapelización”, dijo.

Informó que a partir del 1 de septiembre comenzaron las notificaciones electrónicas, que permiten recibir en un correo la notificación que antes hacían los oficiales de Justicia. “En este momento nos estamos preparando para hacer un estudio para ver cómo impacta y de esa manera corregir”, expresó.

Al mismo tiempo, agregó: “De acuerdo a eso, y teniendo la responsabilidad de administrar justicia como corresponde y llegar a todos los puntos de la provincia, hemos elaborado este proyecto en el que se pensó lo que pretendemos para la Justicia del 2021. De más está decir que en este contexto todo lo que se pretende es una apuesta al futuro, planificar de acuerdo al contexto sanitario y de acuerdo a la variabilidad económica que sufre nuestro país”.

“No es un esquema sencillo, es difícil y nos ha llevado a plantearnos muchas veces cómo seguir. Nuestro presupuesto abarca Consejo de la Magistratura, Centro de Capacitación y Gestión Judicial, Centro Judicial de Mediación, Secretaría Tecnológica e Informática, Biblioteca, Dirección y Administración, Secretaría de Apoyo para Investigaciones Complejas y Dirección de Arquitectura”, detalló, remarcando que “el Poder Judicial no es sólo el Superior Tribunal, sino que son todas estas dependencias sumadas a los juzgados que necesitan para su correcto funcionamiento, una apoyatura económica y una administración adecuada”.

En ese marco, especificó que el destino del presupuesto estaría centrado en mantener las dependencias en funcionamiento, actualizarlas y el desafío de poner en marcha dependencias en otras localidades, con concursos del Consejo de la Magistratura a tal fin. “Son dependencias muy importantes – como ser una Cámara de Apelaciones -que estarán en el interior de la provincia”, aseveró.

Ejes de trabajo
El administrador general del STJ, Néstor Oscar Moroz, también hizo uso de la palabra para referirse al trabajo que se pretende llevar adelante. Más allá de la digitalización, mencionó la puesta en funcionamiento de las nuevas dependencias y de la Quinta Circunscripción Judicial recientemente creada, además de la búsqueda constante de descentralización.

“Hablando específicamente de números, vamos a tener 22 por ciento de aumento, que obviamente está pautado con el principal aumento en materia salarial, inversiones en bienes que serán necesarios para reemplazar, mantener y completar el programa de nuevas dependencias; y la inversión de bienes de capital relacionado a la digitalización, como computadoras, cámaras, escáneres”, manifestó.

En tanto, Venchiarutti  Sartori reflexionó sobre la situación actual y mencionó que “se destinaron muchos recursos a la sanidad de las dependencias judiciales, pensábamos en la inflación, pero nunca que iba a ocurrir una pandemia”.

Consultada al respecto, contó que “el Siged (Sistema de Gestión Judicial) llega a toda la primera instancia, incluyendo juzgados de Paz, gracias a la conectividad con un convenio con Marandú, llegamos a toda la provincia. En un trabajo meticuloso, el Siged está llegando también a la segunda instancia. En Eldorado, Posadas y Oberá se publican así los fallos y significa mucho para un letrado o quien tiene necesidad de acceder a la Justicia. Además trabajamos profundamente para que llegue el Siged a otras dependencias”.

Previsión Social
Por su parte, Lisandro Benmaor remarcó que “los dos grandes ejes que tiene el IPS son la obra social, que a su vez se divide en farmacia, prestaciones médicas y bioquímicas, y el área previsional, que son todas las jubilaciones y pensiones de los trabajadores públicos de la provincia, retirados de las áreas de seguridad y educación, entre otras”.

Especificó que en Misiones hoy hay 212.060 afiliados (86.441 activos, 20.040 pasivos y el resto son familiares), siendo que en enero último eran 207.903.

Detalló además que el Instituto tiene 45 delegaciones en la provincia, 28 bocas de expendio, la delegación Capital Federal y la casa del afiliado, además de un policonsultorio, 14 farmacias, cinco laboratorios propios, dos gimnasios, un jardín maternal, un centro de atención psicosocial y un complejo recreativo en Candelaria.
Manifestó que de las erogaciones del instituto, las jubilaciones se llevan la mayor parte, con más del 60 por ciento, luego la obra social y farmacias propias con alrededor del 36 por ciento, y en menor medida, los gastos de funcionamiento del organismo, el hotel y  turismo social, entre otros. 

Respecto de la pandemia por Covid-19, consideró que han actuado de manera rápida y efectiva para brindar prestaciones nuevas: “Hemos lanzado programas y planes estratégicos para resguardar, fundamentalmente pero no exclusivamente, a los más vulnerables: adultos mayores, pacientes con patologías crónicas y oncológicas, y personal de salud”.

“Rápidamente instauramos telecomunicaciones para consultas virtuales con profesionales médicos, para poder sacar cualquier duda por parte del afiliado y tener una comunicación con un  profesional experto en medicina”, agregó.

Y resaltó que “si algo que caracteriza al IPS es su componente humano. Durante el período enero/julio 2020, debido a la pandemia Covid-19, el contacto con los afiliados fue a través del call center 0800-555-4776. Atendimos a 4.304 personas. Por el mismo período 2019, se contactaron a 2.900”.

 “A su vez, a cada uno de los afiliados que por una patología de base necesitaba un tratamiento o contención domiciliaria, hemos instaurado un programa de atención en su domicilio, le llevamos todo lo que sea vacunación, medicación y contención psicológica, ya que el área psicosocial y todos los profesionales psicólogos que abordan a los pacientes oncológicos han multiplicado su trabajo porque la demanda psicológica a raíz del coronavirus ha sido exponencial”, concluyó.