La crisis política cumplió cinco meses

jueves 20 de septiembre de 2018 | 5:00hs.
Nicaragua cumplió ayer cinco meses desde el inicio de la peor crisis política en las últimas décadas, que ha cobrado la vida de 481 personas, mientras aumenta la preocupación por las detenciones ilegales y el enjuiciamiento de cientos de manifestantes antigubernamentales.
En abril pasado, las manifestaciones comenzaron en las calles de Managua, pero luego brotaron en otras ciudades del país en contra de una medida previsional del Gobierno, que afectaba a la mayoría de los jubilados.
Aunque el régimen sandinista retiró la decisión, las protestas crecieron, pero ahora en reclamo de la renuncia del presidente, acusado de corrupción y de encabezar un gobierno despótico. Posteriormente, el empresariado se sumó a los reclamos.
“Nos aproximamos a más de 500 presos políticos, 200 privados de libertad sin acusación, pero no hay ni un solo paramilitar, ni agente del Estado que esté encausado por los muertos”, advirtió el Centro Nicaragüense de Derechos Humanos.
El Gobierno pasó de “la represión que en un principio fue violenta y sangrienta a los tribunales de justicia” llevando a cabo una detenciones en base a una “persecución selectiva”, afirmaron expertos.
Las detenciones fueron realizadas por la Policía al amparo de una ley hecha a la medida del Gobierno aprobada en junio por el Congreso que domina el gobernante Frente Sandinista.